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Al mismo tiempo, ¡Heather Sage había cambiado!
La semilla que Braydon Neal plantó era aterradora. Al final, aún afectó a Heather, permitiéndole madurar y convertirse en una verdadera artista marcial.
Los artistas marciales eran buenos para matar, y Heather no era la excepción.
¡No había un solo artista marcial en el mundo cuyas manos no estuvieran manchadas de sangre!
Dominic Lowe observó esta escena y finalmente suspiró débilmente. Dijo:
—Yarrow Lake merecía morir, pero ha traído un mensaje ultrasecreto. No sería demasiado tarde para matarlo después de preguntarle. Además, ahora que está muerto, ¡va a haber un gran desastre!
—Oh, ¡quiero saber qué tan grande es el desastre! —Un joven vestido de verde con un temperamento frío y severo apareció, y había intención de matar entre sus cejas.
¡Había llegado el Dios de la Guerra de la Nación, Jonah Shaw!
Parecía que Dominic, este viejo chocho, estaba cansado de vivir.