Este destino nacional no era algo que la gente común pudiera soportar.
Por eso, Jay Morris dijo con voz ronca —La ceremonia oficial del rito y la adjudicación adicional de títulos en la cumbre del Monte Tanish se llevan a cabo especialmente para ti. El día de tu ceremonia de coronación de veinte años, te ayudaremos a superar el reino del rey y a situarte en la cima de Hansworth. Crearemos una era dorada nunca antes vista. ¡Guiaremos a la caballería del ejército del norte para intimidar a los bárbaros más allá de las fronteras y elevar el prestigio de Hansworth!
Las palabras de Jay estaban llenas de esperanza.
En este mundo, no faltaban personas como él.
Su corazón estaba con Hansworth y no tenía motivos egoístas.
No todos los jóvenes funcionarios de las 24 divisiones de la capital eran como Hector Sattler.
Incluso Hector tenía buenas intenciones en su corazón.
En aquel entonces, si hubiera sabido que el ejército de Ludwig terminaría así...