—Cristóbal estaba de mal humor, su exasperación y rabia evidentes. Las paredes del estudio daban fe de su agitación interna, su mente repasando las venenosas palabras de Pamela. No podía creer que Pamela se hubiera atrevido a hablar mal de su madre. Sus palabras, refiriéndose a Gloria como una "madre patética", resonaban en sus pensamientos, alimentando su ira.
Cristóbal no podía creer que su tía culpaba a su madre por las acciones de Britney. Nadie, ni siquiera la propia Pamela, podría haber predicho la verdadera naturaleza de Britney y sus astutas maneras que habían engañado a la familia. ¿Por qué sólo Gloria era la culpable?
Era absurdo.
Su mandíbula se tensó mientras luchaba por contener su enojo. Sintió una abrumadora sensación de protección hacia su madre. Gloria siempre había estado allí para sus hijos, y responsabilizarla por el engaño de Britney era injusto.