Abigail observó horrorizada cómo los dos hombres se enfrentaban, sus cuerpos tensos y enroscados como serpientes. Quería gritar para hacerlos parar, pero su voz estaba atrapada en su garganta. Todo lo que podía hacer era mirar con horror.
La pelea se volvía más intensa, con ambos hombres sin mostrar señales de rendirse.
Cristóbal conectó un golpe en la nariz de Jasper, haciendo que sangrara profusamente. Jasper respondió golpeando a Cristóbal en la sien, haciéndolo tambalear hacia atrás.
Abigail estaba aterrorizada de que uno de ellos saliera seriamente herido.
—Paren... —intentó intervenir, pero fue empujada a un lado mientras los dos hombres seguían peleando. Su cuerpo pequeño voló hacia atrás y aterrizó en una superficie dura.
La situación se estaba saliendo de control.
Cristopher lo empujó contra el Maserati, presionándolo hacia abajo en el capó. Intentó estrangularlo.