—¡Advertencia! Contenido para mayores de 18 años. Picante.
Jeslyn luchaba por seguir el ritmo de sus embestidas mientras intentaba recuperar el aliento. A pesar del aire acondicionado, ambos seguían sudando.
"Tu eres mi esposa", susurró en su oído y mordió su lóbulo.
"Mmm... Lo sé, estoy... aah... estoy..." Con la palma de Maverick en la parte posterior de su cabeza, él tiró suavemente de su cabello, haciendo que ella emitiera ese sonido que tanto le gustaba. Con el gemido saliendo de su boca, Maverick llegó al clímax y se corrió dentro de ella.
"Maverick... j*dete... oh Dios mío... ¡sí... monstruo!"
"Ya me estás j*d*endo. ¿Quieres otra ronda?" Levantó una ceja mientras apretaba su pecho con una sonrisa en sus labios.
"Aaah... N-no, por favor. Jajaja... me hace cosquillas, para... jajaja..."
Sus voces y respiración pesada se interrumpieron cuando sonó el teléfono de Jeslyn.
Jeslyn tomó su teléfono con manos temblorosas y vio la identificación de llamadas. Era Vera.