Un espiral, como si estuviera deformando la realidad, apareció repentinamente en medio del gigantesco lago de Amegakure. De allí salió aquel hombre enmascarado. Su Sharingan miró a través del agujero en la máscara y suspiró pesadamente. Se sintió aburrido de ver este país lluvioso después de unos pocos días. El mundo Shinobi ha estado agitado últimamente y eso es su culpa. De hecho, se siente orgulloso de ello.
"Hm…"
Esperó pacientemente ahí mismo, pues él sabía que esos dos traidores aparecerán ante él.
***
Inmediatamente, cuando sintió la presencia de Madara, Toru guardó los ojos de Shisui entre su ropa, luego se puso la bufanda y la capa. De alguna forma sintió escalofríos cuando repentinamente el chakra de Madara se conectó a la aldea, pero eso no lo iba a detener. Pasados unos pocos segundos, Toru comenzó a correr en dirección a ese lugar en específico.
'Parece que Konan pensó lo mismo que yo'
Una pequeña mariposa de papel se posó en su hombro. Este era el mensaje de Konan para él. Algo iba a salir mal hoy y ella necesitaba ayuda.
'Como prometí…' cerró los ojos. 'Te ayudare hasta que logre encontrar algo mejor que hacer'
Aún desconocía su propia identidad, no logra encontrarse a sí mismo y eso lo está destruyendo por dentro. Pero a pesar de esto, logró encontrar la calma con alguien, esa era Konan. Aun si se sentía inseguro, corrió a donde ella posiblemente se encuentre.
'Esta vez tendré que usar todo lo que tengo'
Sus ojos brillaron carmesíes por un segundo. Sus músculos se tensaron y pisó el aire fuertemente. ¡Boom! Y se impulso con todo lo que tenía para llegar más rápido.
***
"Así que tu eres la primera en venir ante mi. Solo tengo una pregunta para ti. Dependiendo de lo que respondas, el destino de tu vida será decidido" Madara miró con desdén a la mujer frente a él. Ella le regresó la mirada de la misma forma.
"No hay preguntas que responder, Madara. No importa qué es lo que quieras, no te entregaré nada" dijo con una expresión seria en la cara.
Mientras se dirigía a este lugar, ella le envió un pequeño origami a Toru para advertirle. Ahora se encontraba frente a frente con Madara. Se sintió nerviosa, pero luego recordó el motivo por el que aún seguía con vida.
"Jajaja. Te anticipas a los hechos. No por nada eres una de los primeros en Akatsuki." Negó de forma irónica. "¿Dónde está el cadáver de Nagato? ¿Dónde está el Rinnegan, Konan?"
Konan frunció el ceño y extendió la mano. "Ya te lo dije: No importa qué es lo que quieras, no te entregaré nada. Y ahora que te tengo frente a mí, no voy a desaprovechar esta oportunidad. Te destruiré"
"Ya veo. En ese caso no seré compasivo"
Justo cuando Konan extendió las manos para atacar, una gran explosión se escuchó. Una fracción de segundo después, una brillante llama se movió por todo el lago hasta llegar a donde Madara.
Madara se dio cuenta muy tarde. Dos ojos lo miraron directo a los suyos, esos que parecen personificar a la muerte. Ese era…
"Asahi Toru…"
¡Boom! Madara recibió el golpe de lleno, ni siquiera intentó moverse, sin embargo, lo que había provocado aquel estruendo después del golpe, fue el agua. Toru se sorprendió cuando atravesó a Madara sin poder conectarle el golpe. Retrocedió inmediatamente después de esto y se posicionó junto a Konan.
"Ese Sharingan…"
"Lo sé. Tengo algo planeado"
Konan miró al pecho de Madara todo el tiempo, pues si lo miraba a los ojos, era obvio que caería en un genjutsu y ese sería el final de todo. Aun así, también tenía a Toru de su lado. Así que este plan podría llevarse a cabo.
"Entonces aquí tenemos a nuestro último traidor. Hm… ahora que lo recuerdo, hay algo que hizo que me picara la curiosidad. ¿Por qué me traicionaste, Konan? ¿Realmente crees que Uzumaki Naruto es tan especial?"
Luego de que Madara hiciera su pregunta, Toru miró a Konan en silencio. Es cierto que él estaba sorprendido por la ridícula forma en la que Naruto convenció a Nagato, pero esto también convenció a Konan. Sin embargo, él no iba a caer en las bonitas palabras de Naruto. El mejor que nadie sabía que esas soñadoras palabras eran solo patrañas estúpidas, aunque él tampoco negó que algo como lo que Naruto desea sea del todo imposible.
Al final, Konan sólo respondió con las palabras que surgieron en su corazón.
"Naruto es la personificación de la Luz. Es por eso que, todos los que le conocen, llevan la flor de la esperanza" justo después de que terminó de dar su respuesta, las hojas de papel comenzaron a desprenderse de su cuerpo.
Ella está decidida a pelear. Ahora Toru solo tenía dos opciones, usar Shigan o usar Senjutsu. Shigan es perfecto para asesinar personas en masa, pero cuando se trata de alguien que puede volverse intangible, eso quedaba completamente descartado. Aun así, si él podía planearlo lo suficiente, tal vez… Aunque también le quedaba usar Senjutsu, lo cual potencia todos sus jutsus y podría atacar a Madara con una lluvia interminable de Shakuton. Aun así, desconoce mucho de las habilidades de este tipo.
Así que optó por la opción más rentable.
"Ya veo, ya veo. Se podría decir que entiendo el por qué. Sin embargo, ¿qué hay de ti, Toru? No obtienes ningún beneficio estando con esta mujer. Por lo que tu traición no tiene sentido alguno. ¿Qué buscas en realidad? Es más, ahora mismo yo podría perdonarte y dejarte ser parte de los Uchiha sin tomar represalias por tus acciones en mi contra. Después de todo, llevas la sangre de mi clan en tu cuerpo, pero aún así no lo entiendo. Iluminame con una respuesta coherente"
"Heh… Me llamo Toru, Asahi Toru. En el pasado mi clan fue parte del clan Uchiha, pero este es el presente, no tenemos nada que ver contigo y tu clan. Ahora mismo solo tengo un objetivo y es devolver un favor"
"Ho… ya veo. Entonces morirás por un favor, que estúpida decisión" Madara negó con la cabeza. Toru podría ser un buen soldado para la guerra que se aproxima, pero este mismo se negó a cooperar. No había más opción que matarlo junto a Konan, además de llevarse el Kodo Shigan, claro está. "Bueno, ya no estás usando la túnica, pero Konan si. Veo que extrañas Akatsuki, a pesar de que ahora mismo me has sacado los colmillos"
Konan se molesto por este comentario. "Akatsuki fue fundada por Yahiko. Las nubes rojas en nuestra ropa representan la lluvia de sangre que se formó sobre Amegakure por culpa de las guerras. Para Akatsuki, esta ropa representa la justicia, así que Akatsuki y nuestro símbolo no te pertenecen para que hables como si fueras el dueño de todo" Entrecerró los ojos y las hojas de papel comenzaron a levitar alrededor de ella. "Y el Rinnegan le pertenecía a Nagato, un ninja de Amegakure. Esos ojos tampoco te pertenecen. ¡Sus ojos son el mayor tesoro de nuestro país!" Sin esperar más, cuchillas de papel se lanzaron contra Madara.
Sin embargo, este ataque falló, ya que Madara se hizo intangible para evitar salir herido.
"Jajaja. No puedes estar más equivocada, querida. Y bueno, ya que ambos, kunoichi de Amegakure y ninja de Konohagakure van a morir, dejen que los ilumine con la verdad"
Toru y Konan se miraron entre sí en silencio. Madara continuó.
"Fui yo quien incitó a Yahiko a crear Akatsuki. Y también… fui yo quien le entregó el Rinnegan a Nagato…"
Konan se quedó en shock al escuchar esto, mientras que Toru solo apretaba los puños esperando el momento para atacar. Su mirada se agudizó cuando escuchó lo que Madara dijo sobre el Rinnegan. Desde un principio pensó que el Rinnegan le pertenecía a Nagato, pero ahora que acababa de escuchar esto, no supo en qué pensar.
"La verdad es que solo estoy recuperando lo que es mio desde un inicio. Esto ya no es nada personal" No, Madara sabía que esto iba más allá de recuperar lo que era suyo. Levantó los hombros como si no le importase nada y su Sharingan dio un pequeño giro dentro de su ojo. "Olvida lo que dije, si es personal. Eres una niña que no sabía nada de nada. Sin embargo, ahora eres una niña que sabe dónde está el Rinnegan. Lo único que tengo que hacer es capturarte y el trabajo está hecho." Miró a Toru. "A ti te dejaré para el final"
Sin poder esperar más, Toru y Konan se lanzaron al ataque. El tiempo parecía pasar en cámara lenta mientras se acercaban a ese hombre enmascarado. Toru miró como pequeñas hojas de chakra se acercaban a su cuerpo. Nunca esperó esto, pues estaba siendo atacado por Konan. Las hojas de papel lo empujaron hacia atrás y ella continuó hacia delante.
Con sus hermosas alas de ángel, su cuerpo se extendió como una ola de papel que chocó contra Madara. Él, en respuesta al ataque, usó el poder de su ojo para enviar todo a otra dimensión, pero rápidamente se dio cuenta de que se estaba tragando un montón de sellos explosivos.
¡Boom! Antes de poder levantarse, Toru fue empujado por la explosión que se formó después de que Madara absorbiera el papel. Retrocedió en el agua hasta detenerse a dos metros de donde estaba y levantó la mirada. Las hojas de papel se hundían en el agua, llenas de sangre, chamuscadas por la explosión. Tuvo un momento de debilidad cuando vio a Konan materializarse frente a él. Ella estaba herida, pero eso no era todo.
"No debí haberte subestimado"
La sangre salió de su brazo amputado. Madara miró a través de su máscara. Konan logró golpearlo con su jutsu, pero ella también había recibido el daño de la explosión. Su cuerpo lentamente se reagrupo en forma de hojas de papel.
"Has intentado autodestruirte para matarnos a ambos…"
Los ojos de Toru se abrieron en shock al escuchar eso. Miró a Konan en silencio, mientras ella respiraba pesadamente por el daño recibido. Ella se lanzó al ataque con las intenciones de morir junto a Madara y Toru presenció eso en primera fila.
"Konan… tu…"
"No digas nada…" Ella ya sabía lo que Toru pensaba de ella en ese momento. Así que se tragó ese sentimiento de incomodidad y levantó la mano otra vez. "Toru, escucha con atención. Somos diferentes a esta persona. ¡Él es la oscuridad! ¡Un ser malvado que busca sembrar la oscuridad en el mundo!" Apretó el puño con fuerza. "Juré proteger los ideales de Nagato y Yahiko… así que… por favor… ayúdame…"
El chico suspiró. A pesar de que ella hace unos segundos quería hacer todo sola, ahora pedía ayuda. El no la culpaba, no importa que, si cualquiera de los dos falla, ambos morirán. No había otra opción más que pelear por un futuro mejor. Pero, ¿qué sentido tiene pelear si al final él no es nadie en este mundo? ¿Qué sentido tiene vivir si de todas formas va a morir? ¡No hay sentido en eso! Pero aún así…
Sus brazos se cubrieron del brillante color del Shakuton, sus ojos carmesíes como la sangre se mostraron y su cabello se erizó. Madara no iba a perder el tiempo, así que él tampoco.
"No hay manera de que pueda quedarme más ciego de lo que ya estoy. No hay forma de que mis ojos se dañen más de lo que ya están" Cerró los ojos y lágrimas de sangre cayeron por sus mejillas. Fusionado con el Senjutsu, cuando abrió los párpados, el Shigan se mostró en sus ojos.
Konan suspiró cansada después de esto. Fue egoísta en ese momento, pero tenía que pedirle una disculpa a Toru por lanzarlo lejos para que no reciba la explosión.
"Gracias, Toru…"
"Solo estoy ayudándote hasta encontrar algo mejor que hacer, me quedaré a tu lado hasta entonces"
¡Boom! El agua bajo los pies de Toru explotó e inmediatamente apareció delante de Madara. Intentó darle un puñetazo, pero este se volvió intangible y Toru lo atravesó, chocando contra el agua, pero recuperándose al instante en el suelo, levantando la pierna para darle una patada en la mandíbula, pero él otra vez se volvió intangible.
"Inútil" dijo Madara.
Ambos se miraron a los ojos. El tiempo era lento para ellos en ese momento, pues sus movimientos eran tan rápidos que parecía que todo a su alrededor reducía su velocidad.
Un repentino golpe nuevamente, el agua explotó, pero Madara no recibió daño.
"¿Por qué te esfuerzas tanto, si no puedes siquiera tocarme?"
Toru cerró los ojos.
"Porque ese es el plan"
"¿...?"
Una repentina luz brillante se mostró sobre ellos. Madara miró hacia arriba y allí estaba Konan. A su lado estaba un clon de sombras de Toru, quien sostenía la mano y la cintura de esa mujer mientras unas gigantescas alas de papel envueltas en Shakuton se formaban detrás de ellos.
"Puedes volverte intangible, si, pero cuando vas a atacar, tienes que volverte tangible otra vez. Así que, ideé algo interesante. Tal vez te guste mi regalo, Madara"
Las gigantescas alas de papel comenzaron a cerrarse, envolviendo el lago por completo y evaporando la superficie del agua. Madara no entendía esto, pues simplemente puede mantenerse siendo intangible para no recibir el daño. Así que, ¿por qué hacen esto? No tenía ningún sentido.
"Qué plan tan estúpido. Esperaba algo mejor de ti, Toru. Ahora recibirás el daño de tu propio jutsu, ¿estás consciente de ello?"
Toru abrió los ojos y sonrió.
"Qué mente tan pobre tienes…"
¡Boom! Las alas se cerraron por completo y la explosion se escuchó en toda la aldea. Los aldeanos miraron a la distancia la gran luz que se reveló, seguida de una gigantesca nube de vapor. El agua hirvió bajo los pies de Madara, quien miró todo el alrededor, dándose cuenta de lo que Toru tenía planeado.
"Ya veo…"
Todo se cubrió de una espesa nube de vapor que se provocó después de la explosión. Este era el plan de Toru y Konan. Si Madara no puede ver de dónde viene el golpe, entonces no sabrá cuándo hacerse intangible.
Pero esto lo hizo negar con la cabeza. Madara estaba decepcionado.
"No esperaba nada y aun así me decepcionas, Toru"
Madara pensó que, con un simple movimiento podía hacer que el vapor desapareciera, así que este plan era estúpido. Extendió la mano y en esta apareció una extraña arma con forma de abanico. A esta arma se le denomina "Gunbai" y pertenece a Madara.
Este extendió su mano con el arma hacia atrás y golpeó el aire con fuerza, empujando todo el vapor fuera de la aldea, pero…
¡Boom! El agua explotó porque algo entró en ella de forma abrupta. En el lugar donde Madara estaba, ahora se encontraba Toru con el puño envuelto en Shakuton. Había sangre en su mano, pues de alguna forma la cara de ese bastardo era incluso más dura que el tungsteno.
"Madara… cuando atacas te vuelves tangible" En el momento en que Madara uso el arma para dispersar el vapor, Toru aprovechó para darle un puñetazo en toda la cara. Aunque el plan fue bastante sencillo y apresurado, al final resultó bastante efectivo. "Ahora dime, ¿qué te pareció mi truco de magia? Te has llevado un buen susto, ¿no?" dijo Toru. Él esperaba que Madara saliera del agua con algunas heridas mayores, pero cuando ese tipo salió del agua…
"Qué plan tan apresurado, mocoso. Eres inteligente. No por nada hice que Nagato te ofreciera entrar a Akatsuki…" Respiró de forma pesada mientras la sangre corría por su frente. La máscara que él traía puesta se agrieto y un pequeño trozo de la misma cayó al agua. Su ojo derecho se reveló, parecía bastante herido y tenía bastantes cicatrices que parecían heridas de quemadura. "¿Qué se siente ser mi marioneta, niño? Aquellos que se hicieron llamar 'Asahi' merecen estar en la sombra de los Uchiha. Ustedes siempre serán mis marionetas, desde el día en que ese hombre se enfrentó a mi, se condenaron a ustedes mismos. Pero…" Se enderezó y estiró el cuerpo a pesar de que ha recibido mucho daño. "Eso no importa ahora. Solo vine por una cosa…"
Toru tenía la piel un poco chamuscada por el daño de las alas de fuego, pero después de eso, se encontraba en perfecto estado.
"Eso lo sé…"
En el agua, comenzaron a reflejarse extraños objetos incandescentes. Madara miró hacia arriba. El obviamente no se había olvidado de ella, pues Konan aún seguía junto al clon de Toru en el cielo. Ahora todo el cielo lluvioso de Amegakure se cubrió por cientos de lanzas de Shakuton y papel.
La vista era magnífica para los habitantes de la aldea, pues las lanzas parecían estrellas que bajaron del cielo solo para ser apreciadas.
-Laboratorio de Toru-
Akiko sintió la pelea que se había estado llevando a cabo allí arriba los últimos veinte segundos. Toru le había dicho que esperara en el laboratorio para llevar a cabo el trasplante de ojos, pero él nunca llegó.
'Kami-sama… ¿él estará bien? Siempre hace todo solo y de alguna forma me preocupa. Él es demasiado joven, si algo le pasa me sentiría culpable'
Aunque Toru no tenía intenciones de salvar a esta mujer y a su hijo, al final terminó haciéndolo. Akiko está agradecida con Toru por eso y, alrededor del mundo, mucha gente también está agradecida por el trabajo de ese chico. El salvó muchas vidas, pero lo que ninguna de esas personas que fue salvada sabe, es que ese mismo chico que salvó a tanta gente, también le ha arrebatado la vida a muchos más. Okaminaru lo dijo antes, Toru no busca ser un héroe, pero tampoco quiere ser un villano. Aunque el mismo Toru no lo sepa, tal vez él solo sea una persona que busca vivir en paz.
Sin pensar tanto, ella tomó el bisturí y lo miró atentamente.
'La herramienta que se supone debo usar para trasplantar los ojos de Kami-sama' Los dioses también pueden sangrar, pensó mientras volvía a dejar el bisturí en la mesa.
"Suficiente. Si Kami-sama cambia de opinión, no es algo en lo que deba meterme. Sin embargo…"
¡Boom!
"¡Kya!"
Por un segundo, todo tembló de forma abrupta. Akiko miró si los instrumentos estaban en buen estado después del temblor repentino y suspiró aliviada. Se preguntó qué estaba pasando allí afuera, así que subió las escaleras y salió del laboratorio. Cuando abrió la puerta y miró al cielo, sus ojos se abrieron al ver las lanzas de fuego.
"Kami-sama…"
-Lago de Amegakure-
"¿Eso es todo lo que planean hacer? Es un desperdicio de chakra, pues nada de eso podrá hacerme daño"
Solo con volver inteligible su cuerpo, Madara podría evitar el daño de ese jutsu combinado. Para él era estúpido gastar tanto chakra si al final no les iba a servir de nada.
Y Toru le dio la razón.
"Lo es. Simplemente estoy esperando a que quieras pelear sin usar jutsus. Es aburrido de esa forma y se me acabaron las ideas para hacerte entender. ¿Acaso el gran Madara le teme a una pelea a puños contra un niño?" Está era una provocación muy obvia. Toru ya había usado su único as bajo la manga y fallo en matar a Madara con un solo golpe. Ahora mismo no se le ocurría cómo hacer que Madara se vuelva tangible, así que al final usó el truco más clásico de todos "Provocación"
"Heh. No estés seguro de que eso funcionará. Ya recibí un golpe de tu parte y déjame decirte que dolió demasiado. No permitiré que algo así pase, pues quiero alcanzar mi objetivo"
"¿Estás seguro de eso, Madara?"
Toru entrecerró los ojos y miró a Madara directo a la cara. Había una particularidad en las expresiones faciales de Toru. Cuando él era niño, su cara siempre tenía una inexpresividad adormecida. Después de huir de Konoha, él tenía una inexpresividad agresiva en su rostro, esto era acompañado por el extraño brillo en sus ojos que lo hacían parecer un depredador. Cuando sus amigos de Akatsuki murieron, la inexpresividad de Toru pasó a ser un poco más suave y solitaria hasta este momento.
La mirada de Toru ahora era bastante feroz, a pesar de que su cara era casi inexpresiva. Esto hizo que Madara levantara las cejas, intrigado por la mirada asesina de este chico.
Esto lo convenció.
"No te vas a rendir, eh…"
¡Boom! Una de las lanzas explotó al lado de Madara, sin embargo, él comenzó a caminar a donde Toru, estando bastante relajado.
Al mismo tiempo, arriba en el cielo, Konan y el clon de Toru extendieron la mano hacia delante y las lanzas brillantes comenzaron a dispararse contra Madara, pero este se volvió intangible, logrando evadir todas con facilidad.
"Entonces, antes de tu muerte, te mostraré el poder de Uchiha Madara"
Pronto, los pasos relajados de Madara aumentaron la velocidad. Por un segundo desapareció a la vista de todos y apareció delante de Toru.
"Madara…"
"Toru…"
El Sharingan giró y el ambiente cambió por completo. Madara usó genjutsu, pero falló. Al hacer esto, entró en la mente de Toru, donde comenzó la pelea. El suelo estaba conformado por un enorme mar de sangre y el cielo era completamente negro. Por un segundo, a Madara le pareció ver cadenas y grilletes en los brazos y piernas de Toru, pero cuando se lanzó al ataque, estas desaparecieron. Al final, lo tomo como parte de este extraño genjutsu.
¡Bam! Ambos chocaron los puños. Toru miró a Madara y el brillo en sus ojos se intensificó. Nuevamente, un choque de puños se efectuó, haciendo que la sangre en el suelo temblara. Mientras tanto, afuera del genjutsu, Konan miraba como Toru y Madara peleaban solamente usando Taijutsu. Ambos se movían a velocidades extraordinarias, tanto que, para ella, era difícil poder seguirles con la vista. Aun así, miró al clon de Toru, quien en ese momento, observaba todo en silencio.
"Es más fuerte de lo que imaginé" dijo el clon.
Konan frunció el ceño y regresó su mirada al frente. Toda la aldea parecía temblar por los choques de poder que explotaban repentinamente. En vista de esto, ella siguió con el plan.
Era extraño para ella. A pesar de que ambos apenas habían intercambiado palabras en medio de la pelea, los dos sabían muy que hacer. Estaban completamente sincronizados y eso de alguna forma hizo que Konan se sintiera preocupada. Las lanzas incandescentes continuaron lanzándose contra Madara, sin importar si también estuviesen a punto de impactar contra Toru.
Una explosión tras otra. A pesar de que ambos se encontraban encerrados en la mente de Toru, de alguna forma sus cuerpos se movían y peleaban en el exterior, al igual que dentro de este extraño lugar sangriento.
"Es inútil. Alguien como tú, un traidor, una falla en este mundo, nunca serás capaz de alcanzar a un Uchiha de verdad. Todo lo que haces es inútil y lo sabes"
Toru mantuvo su silencio ante las palabras de Madara. Con gran agilidad, se movió por el mar de sangre y lanzó una patada a la cara de Madara, quien simplemente lo esquivó, estirando la pierna y golpeando a Toru en la cara.
El intercambio de golpes se reanudó. Continuaron luchando con su propio taijutsu sin contenerse, pero aunque Toru parecía tener la ventaja…
"¡Ora!"
¡Boom! El agua explotó, pues Madara… se hizo intangible para no recibir daño. Aprovechando su intangibilidad, Madara atravesó el cuerpo de Toru y tomó algo en sus manos, era un frasco.
"Interesante. Así que aquí estaban. Lo siento mucho, mocoso. Pero esto me pertenece"
Toru miró la mano de Madara y todo alrededor se rompió como cristal. Sus ojos miraron en estado de shock lo que este bastardo tenía en su mano.
'Los ojos de Shisui-san…'
El recordó que los había guardado entre su ropa, así que, Madara, al hacerse intangible, puede fácilmente tomar lo que estaba oculto entre la ropa de Toru.
"Estas baratijas no servirán" En su otra mano, sostuvo las dagas de Toru, para después tirarlas al agua.
Él vio esto e inmediatamente cambió la expresión en su rostro. Una mirada tan fría y molesta, que por un segundo, hizo pensar de sobremanera a Toru.
'Es la primera vez que siento tantas cosas en medio de una pelea'
Él sentía que una gran cantidad de emociones envolvían su corazón, pero no lograba entenderlas. Todo era más difícil cuando se estaba bajo presión. Aun así, lo que hizo que su expresión cambiara, fue la manera en la que Madara arrojó las dagas al agua y el hecho de que ahora tiene los ojos de Shisui en sus manos.
El no iba a permitir que esto pase. Los ojos de Shisui ahora le pertenecen a Toru, pues fueron un regalo de Itachi antes de morir. Sin esos ojos, Toru no podrá volver a ver la luz del día y mucho menos el rostro de Konan. Sintió que la ira, como aquella noche carmesí, envolvía su mente y alma. Pero a pesar de que esa emoción era demasiado fuerte, apretó los puños con fuerza y suspiró pesadamente.
"Nada de esto te pertenece. Shisui-san era el portador original de esos ojos, quien los legó a Itachi y este, a la vez, me los dejo a mi. Esos ojos no son tuyos, pues me pertenecen a mi. Si no me los devuelves, entonces tendré que recurrir a métodos más salvajes"
"Ha~... Sorprendente. Así que, realmente podías poner ese tipo de expresiones en tu rostro. Aunque déjame decirte algo, desperdiciaste tu oportunidad de usar estos ojos. Los has perdido y no lograrás arrebatarlos de mis manos. Si realmente los quieres de vuelta, entonces tenlos por perdidos"
¡Boom! El agua explotó, ahora Toru se encontraba detrás de Madara.
El enmascarado miró que esto se ha puesto realmente serio. Konan sigue lanzando las lanzas de papel y Toru sigue atacando. Hay un límite en el tiempo que puede volverse intangible, por lo que esto, obviamente, era su debilidad y tal parece que Toru, en este momento, acaba de darse cuenta.
'Ya perdiste, Toru…'
Nuevamente, el agua se levantó en forma de explosión. Esta vez, una pequeña cortada apareció en el brazo restante de Madara, quien miró esto y frunció el ceño.
Toru miró al suelo y extendió su mano derecha. Del agua, salieron tentáculos hechos del mismo líquido, los cuales le devolvieron las dagas.
"Suiton…"
El controla todos los elementos, aunque su punto fuerte es el viento y el fuego. Así que, ha llegado la hora de usarlos y combinarlos como se debe.
"Shakuton: Kajōsatsu… [Estilo Abrasador: Ola Abrasadora]"
Encima de Toru, se formaron tres esferas que comenzaron a orbitar lentamente a su alrededor. Estas esferas brillaban en el color del fuego y parecían extremadamente peligrosas con el simple contacto.
Madara frunció el ceño, ya que vio como el agua comenzaba a evaporarse de nuevo. Pero esto era algo diferente, demasiado para su gusto. Y rápidamente entendió.
Este jutsu era muy parecido al de cierta mujer de la Niebla Sangrienta…
"Si ya lo entendiste, entonces no tengo que explicarlo. Pero por si no te queda claro, si dejas de ser intangible, mi jutsu secara todos los líquidos de tu cuerpo y quedarás como una momia"
"..."
Nuevamente, los engranajes en la mente de Toru comenzaron a girar. Esto ya no se trata de fuerza, se trata de destreza en batalla, es decir, inteligencia. Madara lo dijo, Toru es inteligente y él mismo usará eso en contra del enemigo.
Simplemente un paso en falso, y Madara morirá. Sin embargo, él necesita recuperar los ojos. Caminó hacia delante de forma relajada mientras sostenía las dagas. Al mismo tiempo, Madara frunció el ceño y se hundió en el agua.
Repentinamente, Toru dejó de sentir el chakra de Madara y entonces…
¡Salpicar! Konan abrió los ojos al verlo. Madara apareció detrás de Toru e intentó apuñalarlo con una barra de metal, pero Toru se dio la vuelta, soltó las dagas y puso las manos frente a él para evitar el ataque. La sangre salpicó, pues la barra de metal atravesó las manos de Toru, dejándole agujeros en ambas palmas.
"Tengo que ir…"
Konan intentó bajar, pero el clon la sostuvo de la cintura con fuerza.
"No…"
Mientras tanto, allí abajo, Toru sintió el dolor de tener ambas manos atravesadas por aquel objeto metálico. La sangre salió de la herida y se mezcló con el agua. Frente a él, Madara entrecerró los ojos. Claramente se podía ver el vapor salir de su cuerpo, pero también parecía que lo estaba soportando muy bien.
"¿Eso es todo lo que tenías para mí? Ciertamente estoy sorprendido por lo insistente que has sido, pero llegó la hora de terminar con esto"
Toru bajó la mirada, pero no produjo ningún sonido de dolor ni nada parecido. Es más, él se mantuvo en silencio, mirando al suelo mientras las esferas brillantes intentaron drenar todos los líquidos del cuerpo de Madara.
"Hasta nunca, Asahi Toru…"
Intento atravesarle la cabeza con la misma barra atravesada en las manos de Toru, pero algo pasó. La barra metálica no cedía y al mismo tiempo…
Toru levantó la mirada.
Madara abrió los ojos al ver esa mirada. Era una mirada que no poseía ningún índice de emociones, como si por un momento estuviera viendo a una persona completamente diferente a Asahi Toru. Había algo extraño allí, pero cuando intentó matarlo con la otra mano…
"Esos ojos me pertenecen, fueron un regalo de mi viejo amigo y es por eso que puedo hacer lo que quiera con ese regalo. Entonces, Shimikomaseru…"
Una brillante luz iluminó todo amegakure, una brillante luz incandescente que parecía querer comerse todo el mundo. A la vez, él grito ahogado de dolor de aquel hombre hizo eco. Fue desgarrador, un grito lleno de agonía.
Desde lo alto del cielo, incluso Konan y el clon pudieron escucharlo.
"¡¡Ahhhhhhhhg!!"
Las llamas del Shakuton cortaron y quemaron. Las tres esferas, como soles llenos de poder, intentaron drenar los líquidos del cuerpo de Madara. En ese mismo instante, aquel frasco de vidrio dentro de su túnica explotó y los globos oculares que contenía se desintegraron con las llamas.
Con esta acción, Toru solo quería dejar una cosa en claro. Ciertamente era como el berrinche de un niño… "Si yo no puedo tenerlos, nadie los tendrá" Así fue como los ojos de Shisui desaparecieron de la faz de la tierra. El genjutsu más fuerte se convirtió en cenizas.
"¡¿Qué has hecho?!"
Madara, con todo el cuerpo chamuscado, retrocedió y se tocó la cabeza con fuerza. Ha logrado sobrevivir al jutsu, pues su cuerpo era más resistente de lo que Toru logró calcular. Pero ahora estaba extremadamente herido y él no dudaba que este tipo aún tenía bastante chakra a su disposición. Así que, debían ejecutar el final de esta acto.
***
"Konan, antes dijiste que tenías un plan. Tengo una idea de lo que tienes en mente. Por favor, hazlo" El clon, sin soltar a Konan, entrecerró los ojos.
Sin embargo, al escuchar esto, ella frunció el ceño. Ella no sabía cómo es que Toru sabía de esto, así que esto la desconcertó. Además, al ejecutar ese jutsu, la vida del Toru original, quien se encuentra allí abajo, correrá grave peligro. No podía simplemente matar a Toru junto con Madara, pues, aunque él haya decidido ayudarla, no valía la pena sacrificar la vida de alguien ajeno a este problema.
Eso debería ser así, pero Toru…
"'Madara es oscuridad' dijiste. Entonces, ¿qué soy yo? Estoy seguro de que no soy alguien bueno, pero tampoco soy tan malvado. Aunque es difícil para mí encontrar una respuesta a esa pregunta, tal vez sí continúo viviendo logre encontrarla. Y, para eso, debemos acabar con ese tipo. Si él no muere en este momento, entonces nosotros moriremos y al final no podré encontrar esa respuesta. Así que, hazlo, usa aquel jutsu, te ayudaré a potenciar el daño. Además, mi original también tiene un Kinjutsu [Técnica Prohibida] que seguramente él usará cuando vea que vas a atacar"
"¿Realmente estás seguro? Si lo haces-"
"Estaré bien, soy resistente. No importa qué sea, viviré para encontrar esa respuesta. Ayúdame, Konan"
Ella abrió los ojos. Fue ella quien pidió ayuda al principio, pero ahora era Toru quien dejó salir esas mismas palabras. Ella bajó la mirada y luego miró al clon. Era un clon de Toru, si, pero sus manos eran extrañamente cálidas. Se dijo a sí misma 'Este sentimiento otra vez…' para luego sujetar la mano del clon con fuerza.
"Lo haré…"
***
"¿Qué hice? Nada importante. No es nada…"
Tentáculos de agua salieron del lago y le entregaron las dagas a Toru. Acto seguido, miró a Madara. Pensó por un momento que el regalo de Itachi se ha convertido en cenizas y que ahora ha perdido la oportunidad de recuperar la luz en sus ojos. Apretó la empuñadura con fuerza y suspiró.
Ha llegado la hora de terminar con esto. El acto final…
Arriba en el cielo, Konan extendió la mano hacia delante, mientras que, con la otra mano, sostenía la mano del clon de Toru. El agua del lago comenzó a perturbarse, haciendo que Madara se ponga a la defensiva. Al mismo tiempo, Toru se hundió en el agua y entonces…
El sonido de cientos, miles, millones de hojas de papel chocando hizo eco en toda la aldea. El lago se partió en dos y el agua fue tragada por el agujero que se abrió en medio del papel. En la mitad de todo, Toru se encontró cayendo al vacío y, arriba de él, Madara también.
La luz del Shakuton envolvió las dagas y, a la vez, Toru entrecerró los ojos. Con el Shigan y el Senjutsu activos, pudo ver claramente dónde tenía que atacar. Así que abrió los brazos con las dagas, las cuales se convirtieron en espadas incandescentes.
"San [tres]"
Madara miró hacia abajo y se dio cuenta de lo que Toru trataba de hacer. Así que usó la habilidad de su ojo derecho.
"Ni [dos]"
Todas las líneas de muerte en la existencia se movieron de forma violenta, chocando y conectándose unas con otras.
"Ichi [uno]"
La energía del mundo fluía en el aire, acariciando el mundo con delicadeza. El Senjutsu lo ayudó a sentir esto…
"Rei [cero]"
Cuando la cuenta regresiva terminó, mencionando el nuevo nombre de estas dos espadas de fuego, Toru lanzó dos tajos de Shakuton que se extendieron y lanzaron contra Madara. Pero éste, al ser intangible, las cuchillas de fuego que se formaron continuaron su camino hacia el cielo atravesándolo. En ese mismo segundo, las hojas de papel comenzaron a flotar alrededor de estos dos y rápidamente, ambos vieron que todas las hojas de papel realmente eran sellos explosivos.
Toru ya tenía sospechado esto, así que podía asegurarse de sobrevivir a las explosiones.
¡Boom! Las hojas de papel comenzaron a explotar. Una explotó cerca del rostro de Toru, pero este envolvió su cuerpo en Shakuton y usó el senjutsu para resistir mejor el daño.
Por otro lado, Madara no tenía cómo escapar. Para teletransportarse tenía que volverse tangible y, al hacerlo, recibiría todo el daño de las explosiones. Además de que seguramente moriría, ya que, al teletransportarse, tiene que esperar unos segundos. En ese corto lapso de tiempo, terminaría por convertirse en una bolsa de carne sin vida.
'Eso es malo… ¿Qué debo hacer?' Pensó.
Él también miró a Toru unos metros más abajo, quien había decidido usar una de sus plataformas de aire para observar de cerca. Sin embargo, ¿por qué se quedaba aquí? El muy idiota está recibiendo el daño de las explosiones también. Es imposible que sobreviva a esto, o al menos eso pensó él. Toru, al controlar el chakra senjutsu, pudo endurecer su propio cuerpo lo suficiente para reducir el daño en gran medida. Si, él terminaría gravemente herido, pero saldría con vida de esta, cosa que Madara no podrá hacer.
"Morirás aquí, Madara…"
En medio de las explosiones, Toru caminó relajado. Las heridas se cerraban rápido debido a que su cuerpo estaba cubierto por Shakuton. Sin embargo, su plan no era quedarse aquí todo el tiempo que las explosiones duren. Él estaba esperando eso…
El sonido de las llamas resonó cerca de su oído. Los sellos explosivos se cubrieron de Shakuton, aumentando aún más el daño que Madara tendrá que recibir. Con esto listo, Toru tenía que pasar a la conclusión de este acto.
***
"... ¿Qué… qué es eso?" Ella miró al cielo. Ella no entendía lo que sus ojos miraban en ese momento. Era extraño, algo que apareció de la nada.
A diferencia de Konan, el clon de Toru no cambió la expresión de su rostro al ver lo que se estaba formando en el cielo. Es más, extendió su mano y el viento se envolvió en Shakuton, convirtiéndose en una rama que lentamente se acercó a esa "cosa" brillante.
La rama lentamente se unió y entonces…
Una luz brillante iluminó todo Amegakure. Las nubes de lluvia se desintegraron y ese "algo" brilló con intensidad. Una esfera gigantesca, pura y brillante, peligrosa y majestuosa… Era como ver al sol descender al mundo. Aquella esfera hacía extraños ruidos, como si estuviera golpeando el aire.
"Este es mi jutsu definitivo. Es una extensión de un jutsu que usé en el pasado contra el Ichibi, Gaara" dijo el clon, a lo que Konan solo estuvo escuchando en silencio.
***
Aproximadamente 3 minutos después de que comenzarán las explosiones, Toru aún seguía en medio de esto. Estaba quieto en medio de las explosiones, de brazos cruzados.
Madara solo lo miró con ira, pues no sabía qué hacer para sobrevivir. En ese momento, sin embargo, una luz proveniente del cielo llamó su atención. Mientras los sellos explosivos atravesaban su cuerpo, miró hacia arriba y sus ojos se abrieron en estado de shock.
"Una gigantesca masa de chakra puro…" Apretó el puño y miró a Toru. Fue ahí cuando se dio cuenta. Las cuchillas de Shakuton que Toru lanzó antes no iban dirigidas a él. Es más, Toru tenía el propósito de fallar. Pues, cuando las cuchillas llegaron al cielo y chocaron contra las nubes lluviosas, las mismas se convirtieron en dos esferas que comenzaron a girar a grandes velocidades, rotando y tragándose todo el hidrógeno en el cielo. Ambas esferas al final se fusionaron y se expandieron, justo como la muerte de una estrella. Fue así como Madara pudo ver el nacimiento de un sol. Inmediatamente se lanzó contra Toru, pues faltaba poco para que su intangibilidad se acabara y, si esa cosa llega a golpearlo, no quedará ni sus cenizas.
Por otro lado, Toru se dio cuenta de esto y lo miró hacia arriba. Piso el aire con fuerza y se impulsó. Las llamas en su puño derecho se intensificaron y, como un conejo, saltó a una gran velocidad en el aire.
Él sabía que si Madara recibía otro puñetazo, el mismo tenía grandes posibilidades de morir, por lo que usó esto a su favor.
Cuando ambos estuvieron cara a cara, Madara se dio cuenta de que había actuado por impulso, así que Toru pasó a través de él aprovechando la intangibilidad de Madara y salió del océano de sellos explosivos.
***
Como una estrella fugaz, ella miró como el Toru original se impulsaba a donde estaba esa gran esfera que parecía tener cerca de 40 metros de diámetro.
"Voy a agarrarte de la cintura con fuerza. La onda expansiva empujará todo hacia atrás. Y descuida, la aldea estará bien, estoy controlando el daño que mi jutsu causa"
"¿Algo así es posible?"
"En teoría, si. Es la primera vez que uso este jutsu, aunque ya lo tenía creado en mi mente"
***
Posicionándose sobre el gran sol que creó, Toru suspiró cansado. Esta cosa le recordó su vida pasada y lo hizo sentir extraño. Aun así, a la lejanía, miró a Konan y al clon, está fue suficiente motivación para que el actuará.
"La luz no volverá a mis ojos, pero hay una llama que crece en el fondo de mi corazón. No se si eso es bueno o si es malo. Por ahora, solo quiero una respuesta…"
Levantó el puño y las llamas se intensificaron.
"Shimikomaseru, Shakuton…"
Cada vez más, el sol parecía brillar con intensidad. La X en los ojos de Toru giro y una pequeña gota de sangre se deslizó por su mejilla, la cual se evaporó por el calor del Shakuton.
"..."
Cerró los ojos y apretó el puño. Entonces, desde el fondo de su corazón gritó:
"¡Saigo no Yoake! [Final Down]"
¡Boom! Le dio un puñetazo al sol, el cual se salió de su lugar y se dirigió al lago de sellos explosivos. El aire parecía quemarse a su alrededor, pues incluso el sol naciente puede dañar todo a su paso, puede lastimarlos a todos… sin darse cuenta…
***
"Maldito mocoso…"
Madara vio de primera mano como el sol se acercaba a él. Inevitablemente cerró los ojos y recordó la silueta de una chica.
…
…
…
La luz se intensificó y al final…
***
El Final Down de Toru se mantuvo encendido a la vez que los sellos explosivos de shakuton entraban dentro del jutsu y continúan explotando. El extendió sus manos junto al clon y las ramas que se extendían hasta el sol desaparecieron.
Después de diez minutos, el sol se apagó y fue perdiendo su tamaño. Se volvió tan pequeño como una pelota de béisbol, pero entonces… esto era a lo que se refería Toru antes. Lo que le dijo a Konan…
La onda expansiva.
…
…
El sol volvió a crecer, empujando todo con una gran corriente de aire para finalmente desintegrarse y desaparecer. Esto duró cerca de dos segundos. La corriente de aire era demasiado fuerte, pero los alrededores no sufrieron daño. Konan y el clon de Toru fueron empujados hacia atrás, esto hizo que el clon desapareciera envuelto en una nube de humo.
'Toru…'
Ella, aún flotando con sus alas de ángel, miró al Toru original, quien caía a gran velocidad. Después de entregar casi todo su chakra a ese Kinjutsu, más el daño que recibió de los sellos explosivos, Toru se sintió exhausto y se desmayó en el aire.
Konan rápidamente voló hacia donde él y lo atrapó.
'Dijiste que estarías bien…' En sus brazos, el chico respiraba con dificultad. 'Esto no es estar bien…' Lentamente descendió al agua. "Eres un mentiroso…"
"Yo… supongo que lo soy…"
Konan se sobresaltó por las repentinas palabras de Toru. El se despertó y bajó de los brazos de Konan, cayendo de rodillas en el suelo.
"No pensé que mantener una masa de chara tan grande durante más de 5 minutos llevaría más chakra de lo que calculé. ¿Y tú estás bien? Controlar esa gran cantidad de papel debió ser difícil"
"No lo estoy… apenas puedo moverme, pero es más fácil si uso las hojas de papel. Así es como pude atraparte"
"Ya veo…" Toru se miró a sí mismo y suspiró cansado. 'Ha~ soy un desastre. No imaginé que el Senjutsu me lastimaría tanto. Normalmente solo siento comezón en el cuerpo cuando lo uso, pero esta vez es como si me hubiera quemado desde dentro' Este era un nuevo descubrimiento. Pues, como es normal, Toru solo siente comezón cuando tiene la Energía del Mundo en el cuerpo, pero esta vez, él uso excesivo de esta misma energía lo ha lastimado bastante. 'Debería estar bien, puedo manejar esto, no me pasará nada…'
Al mismo tiempo, sin embargo, Konan observó los alrededores y miro que el agua del lago estaba hirviendo. El cielo se había despejado por el kinjutsu de Toru, por lo que de alguna manera era un hermoso paisaje de esta aldea que, normalmente, está rodeada de lluvia.
"¿Quedó algo de Madara?"
Toru también se percató. Terminó desactivando el senjutsu por unos momentos. "Seguramente no. Mi Shakuton corta y quema, por lo que es probable que se haya convertido en cenizas o incluso menos que eso. Hm… ¿Uh?" Vio algo extraño flotando en el agua. Era esa extraña arma en forma de abanico. Dejó a Konan atrás y se acercó al arma. 'Esto debería haberse destruido…'
Había un poco de sangre en el arma, además de que esta misma no tenía ningún rasguño. De alguna u otra forma, esto terminó siendo bastante extraño para Toru. Se agachó y observó con cuidado, estiró la mano y sintió rastros de chakra. Fue entonces cuando se dio cuenta…
"¡¿?!"
Sus ojos se abrieron en estado de shock. Sintió el chakra del bastardo detrás de él, más específicamente, detrás de Konan.
"¡No!"
Se dio la vuelta y saltó en el aire para impulsarse. Apareció delante de Konan al instante, la tomó de la mano y la arrojó al suelo.
¡Salpicar!
"¡Ahhhhhhgg!"
Toru sintió dolor en su espalda y abdomen, cosa que lo hizo caer de rodillas y brazos sobre el agua, justo encima de Konan. La sangre salpicó contra el agua y encima de la ropa de Konan. Ella no sabía qué pasó, pero se dio cuenta cuando vio por encima del hombro de Toru. El Sharingan de Madara brillaba tenuemente detrás de él.
"¿Cómo es posible…?"
La esperanza en el rostro de Konan se desvaneció cuando vio la herida de Toru. Había una barra metálica atravesándolo desde la espalda, pasando por la zona del pulmón, atravesando el hígado, para finalmente salir por el abdomen. No había mucha sangre saliendo debido a que la herida estaba cubierta por esa barra metálica.
"Tengo que admitirlo. Me llevé un buen susto hace un momento. Realmente pensé que iba a morir. Bueno, realmente morí…"
Su voz tenebrosa resonó cerca del oído de Toru, quien trató de aguantar el dolor, pero por extraño que parezca, esa barra metálica le estaba quitando el poco chakra que tenia, justo como lo que hacía Nagato, lo que lo estaba dejando rápidamente incapacitado.
Se sujetó el abdomen con la mano derecha, tratando de que la barra metálica no avance más y lastime a Konan, pero estaba siendo más difícil de lo que parecía.
'¿Yo… voy a morir?'
"¡Ngh!"
Toru no pudo evitarlo. La barra metálica atravesó su mano y apuñaló a Konan en un costado del torso. Afortunadamente, para ella, Toru intentó que la barra no toque ningún punto vital de Konan.
"K-Kona…n"
Los ojos de Toru se cerraron y entonces…
¡Clang, Bam! Madara rompió la barra para que quedara incrustada en el cuerpo de Toru y luego lo pateó lejos. Él se hundió en el agua mientras la sangre lentamente se mezclaba con esta misma.
"¡Toru!" Ella intentó arrastrarse, pero sufrió el mismo destino.
Ya un poco harto de esperar, Madara pateó a Konan y un poco apresurado, se acercó a ella.
"En este momento deberías estar preguntándote: '¿Cómo puedes estar vivo?' y yo te daré una respuesta. Izanagi, un kinjutsu que nosotros, los Uchiha, tenemos para convertir las ilusiones en realidad, lo malo es que, a cambio, uno de nuestros ojos se cierra y no vuelve a ver la luz… nunca más. Este es un kinjutsu que sólo puede ser usado por los poderes de ambos clanes primigenios, Uchiha y Senju"
"Tu… tu no tienes tal cosa… ese poder le pertenece al Rikudō [Sabio de los Seis Caminos], por lo que eso es imposible. Tu… tu…" Intentó levantarse del suelo, pero sus heridas eran muy graves y había gastado mucho chakra en el kinjutsu de antes. "Toru… tu… ¡Tú!"
"Si, yo. Él ya debería estar muerto. No llores por un niño, mujer. Bueno, aprovechando que ahora ambos se han calmado, uno más que otro y, teniendo en cuenta que eres una antigua aliada, te daré el derecho de saber un poco más de mis jutsus y mi historia"
***
'¿Qué es esto…?'
Por alguna razón, mientras se hundía, el agua se sentía tibia, bastante cálida, bastante familiar. Aquella agua, que lentamente se fue convirtiendo en sangre, lo abrazó con fuerza. Al mismo tiempo, susurros se escucharon, susurros que parecían celebrar la cercana muerte de este chico. Los susurros continuaron, uno tras otro detrás de su oído. Voces escalofriantes, voces desconocidas. Lentamente aterrizó sobre una superficie dura, sin hacerse daño por la caída. Cuando sus rodillas tocaron ese "suelo", sintió un escalofrío recorrerle todo el cuerpo, además de toda la oscuridad que lo rodeaba.
No podía moverse, no podía respirar, no podía ver. Sintió extraños objetos atados a sus muñecas y tobillos. Pasos escalofriantes, como si caminarán encima de un charco se escucharon. Una llama se encendió delante de Toru, lo que le permitió ver y entonces…
"¡¿?!"
Sintió dos manos sobre sus hombros. Eran manos pequeñas, como las de un niño.
"Estamos aquí de vuelta" Dijo la voz de un infante. "Estamos aquí para siempre…" Clavó sus uñas en los hombros de Toru. "¿Qué es lo que pueden ver tus ojos, onii-san? ¿Qué es lo que viste mientras eras lanzado al agua como un anzuelo?"
'Yo…'
"Había sangre, mucha sangre. Tus manos están cubiertas de sangre, onii-san. Lo sabes, en el fondo de tu corazón, lo sabes. Escucha aquellos gritos, escuchalos, no continúes ocultándolos, no sigas ocultando lo que te hace sufrir, onii-san. ¿Qué es lo que ves?"
"Yo…"
El no podía verlo, pero aquel niño detrás de él tenía el cabello negro, ojos plateados y una extraña cara inexpresiva. Sin embargo, aquel niño sonrió. Era una especie de sonrisa inexpresiva que de alguna forma era extremadamente macabra.
*Shhhhh…*
Algo se movió detrás de ambos y manos carmesíes y esqueléticas se posaron sobre los hombros del niño. Era un ser con apariencia de esqueleto con alas negras, solo que había un poco de carne putrefacta sobre sus huesos. El esqueleto movía la boca, y el niño hablaba en respuesta.
"Esa mujer…"
Manos comenzaron a salir del suelo, lo cual reveló a aquel océano de sangre que Toru conoce demasiado bien.
"Ella morirá…"
Los ojos de Toru se abrieron en estado de shock. Frente a él, Madara sostuvo a Konan de la capa y la levantó del agua. Él Sharingan brillo en sus ojos, esos ojos que de alguna forma asquean a Toru.
"Ella morirá… justo como los otros. Ella morirá, exactamente igual que aquellos a los que llamaste 'amigos', onii-san"
…
…
…
…
…
***
"Antes dijiste que soy la oscuridad. Destruiré tu lindo y pequeño puente de arcoíris y sus siete colores, y lo ahogaré en la oscuridad. Cuando mi genjutsu acabe, tu vida también lo hará. Ahora dime… ¿Dónde está el Rinnegan?"
…
…
…
Los ojos de Konan se pusieron en blanco y el Sharingan de Madara dio dos vueltas dentro de sus ojos.
Él sonrió al ver a Konan mover la boca, revelando la ubicación del cadáver de Nagato. Con esto hecho, estiró la mano izquierda y de su manga salió una barra de metal.
"Como prometí…"
*gotear*
"¿...?"
¡BOOM! Una fuerza invisible se hizo presente, como una terrible ventisca, cuya fuerza empujó a Madara tan fuerte, que este literalmente salió disparado de la aldea. Atravesó montañas en el proceso y, cuando se detuvo en una de las montañas a unos pocos kilómetros de Ame, quedó en shock por el fuerte golpe.
Konan, quien estaba a punto de perder la conciencia, cayó al agua al ser soltada por Madara. Ella se tocó el cuello con dolor y luego miró los alrededores.
"To…ru…" dijo al ver a la persona que salía del agua.
Su ropa estaba empapada y tenía un pequeño agujero en el abdomen, en el cual aún estaba esa barra metálica. Tenía la mano extendida y, por la posición en la que se encontraba, se veía bastante débil, pues apenas podía mantenerse de pie.
Ella lo vio claramente, la mano de Toru temblaba y un par de lágrimas corrieron por las mejillas del chico. Estas lágrimas, pronto se mancharon de color carmesí, transformándose en extrañas lágrimas de sangre, que cayeron al agua y se mezclaron con la misma.
El miraba al suelo, como si estuviera en trance. Su cabello le cubría los ojos y su respiración era entrecortada.
"¡Toru! ¡No te muevas! Ya voy… espérame… voy a ayudarte, solo mantente despierto, Toru…"
Konan, con lo débil que estaba, flotó con las hojas de papel y se acercó al chico, pero cuando lo vio de cerca, sus ojos se abrieron en estado de shock.
Una tenue luz púrpura brillo detrás del cabello de Toru. Entre más se acercaba más podía apreciarse. Los ojos del chico habían cambiado. Un extraño patrón de ondas se extendió a lo largo de sus globos oculares, acompañado de aquel tenue brillo púrpura que en aquel momento, sólo dejó a Konan con una cosa en mente.
"Rinnegan…"
Al escuchar la voz de Konan, el brillo púrpura en los ojos de Toru desapareció y sintió un fuerte dolor de cabeza. Ahora lo recordaba, lo que iba a pasar. El no entendía nada de lo que pasó, pues vio todo como un extraño sueño. Por unos segundos se quedó recalculando lo que había pasado, para luego recordar lo que Madara les hizo a ambos.
Levantó la mirada y se dio cuenta de que Konan estaba frente a él.
'Sus líneas de muerte…' Estiró su mano y le tocó la mejilla a Konan. 'En aquel momento dejaron de moverse…' Era como si en ese momento, el destino de Konan hubiera sido morir. Pero algo pasó, algo intervino, aunque él no lo recordaba con claridad. Aun así…
"¡Tenemos que irnos!"
"¿Qué…?"
Antes de que Konan pudiera refutar algo, aún con todas sus heridas, Toru la levantó en sus brazos y se impulsó en el aire. Inmediatamente corrió con todo lo que tenía. Cada paso que daba, cada vez que se alejaba de esta aldea, los recuerdos de sus amigos de Akatsuki llenaban su mente. Cada uno de ellos murió y lo mismo le iba a pasar a Konan.
Su visión era borrosa, su cuerpo entero sentía dolor, pero había un lugar en específico donde dolía más y ese lugar eran sus ojos. Aquella voz le susurró al oído de, lo que hizo que el chico quisiera huir más rápido, lo que provocó que tropezara al llegar al bosque.
"Ha… hah… Konan, súbete a mi espalda. Tenemos que irnos… Tenemos que irnos o moriremos…" Tocó su frente con el suelo y apretó los puños con fuerza. "¡Rápido, Konan! ¡Tenemos que irnos!" Levantó su mirada y vio a Konan a los ojos.
Ella al fin lo entendió cuando vio la desesperación en la mirada de Toru. Así que obedeció, dejando todo atrás… Yahiko, Nagato… Ella subió a la espalda de Toru y se sujetó con lo último de fuerzas que tenía. Al mismo tiempo, el chico hizo su mayor esfuerzo para ponerse de pie y continuar corriendo.
"Ha… hah… ha…" Se tocó el abdomen y vio la sangre. Entonces su mente se despejo y usó esa sangre para lo siguiente. "¡Kuchiyose no Jutsu!"
¡Puff! Toru dio un salto y subió al lomo de Okamikase.
"Muchacho, ¿qué te pasó?"
"¡Sácanos de aquí, Okamikase-san! ¡Rápido! ¡Madara no tardará en encontrarnos!"
"¿Qué…? ¿Madara? Mocoso, ¿en qué demonios te metiste? No, eso no importa ahora. Prepárense para una invocación inversa" Mientras corría, acercó sus dientes a un costado de su cuerpo y sacó un pergamino pequeño. "Mujer, toma esto y ábrelo, rápido. El muchacho se desmayó"
"Toru…"
"No hay tiempo para llorar por tu amado, hazlo rápido"
"¿Amado? No, yo… Ha~" Ignorando lo que el lobo anciano dijo, ella abrió el pergamino e hizo un sello de una mano. "¿Así está bien?"
"Si. Ahora…" Aumentó la velocidad, ya que, con el Senjutsu, pudo sentir a alguien siguiéndolos. "¡Kuchiyose no Jutsu!" Golpeó el suelo con las patas delanteras y entonces los tres fueron tragados por una nube de humo.
Después de eso, ya no había nada ni nadie en ese lugar.
…
…
A los pocos segundos, Madara llegó con el cuerpo completamente ensangrentado.
"Hm… después iré por ellos. Ahora tengo que ir por el Rinnegan"
Decepcionado de no poder alcanzarlos, Madara se dio la vuelta y regresó a Amegakure. En uno de los árboles, Zetsu sonrió de forma extraña, pues de alguna modo le divertía esto.
-En algún lugar extraño, lejos de este mundo-
El sonido de las ambulancias se escuchó resonar junto a los murmullos de la policía. Había humo saliendo de un lugar en específico. Edificios destruidos, personas fallecidas, aquel suceso fue tan repentino que nunca nadie supo qué fue lo que pasó.
"¿Puede considerarse esto un ataque terrorista?" dijo el jefe de policía.
A lo que uno de los presentes negó con la cabeza.
"No tiene ningún sentido. No hay pruebas de que haya sido un ataque terrorista. Además, tenemos informes de que hay una extraña radiación en el centro de la explosión. Ya hemos llamado a los especialistas, deberían llegar en unos minutos"
"Entiendo…" Asintió con la cabeza y se cruzó de brazos. '¿Será una señal?' Frunció el ceño al pensar en ello. Hay videos de baja calidad que grabaron lo sucedido desde una lejana distancia, también hay testigos de ello. La explosión, más que una explosión, fue como si de repente una burbuja roja gigante apareciera, tragando todo a su paso"
***
Después de 5 minutos, los especialistas en elementos radiactivos llegaron. Tenían los típicos trajes amarillos y máquinas que detectaban los niveles de radiación. Parecía que esta extraña radiación no afectaba al ser humano, pero aún no lograban encontrar el por qué.
"¡Encontré algo!"
Uno de los hombres de traje amarillo levantó la mano y sostuvo algo con unas pinzas.
"Este es el centro de la radiación…"
"Ya veo… Pero, ¿qué es?"
"No lo sé, es afilado. Parece el pedazo de una cuchilla"
En las pinzas, se mostró allí la parte fragmentada de una daga, como si hubiera sido separada de la empuñadura con un corte limpio, capaz de dividir las partículas.
Para ellos esto era importante, pues se trataba del centro de la radiación y posiblemente el origen de la explosión carmesí. Tomaron el trozo de metal y lo metieron en un maletín con mucho cuidado. Mientras los demás investigadores analizaron los restos, el que parecía ser el superior entre ellos tomó el maletín y salió del gigantesco cráter que se había formado.
A punto de llegar a la camioneta que transportará este objeto a los laboratorios, un hombre anciano lo detuvo. El hombre estaba vestido como el Padre de una Iglesia y estaba acompañado de personas que vestían de una forma similar. El anciano tenía el cabello canoso y un poco largo hasta la nuca, además tenía una sonrisa amable en su rostro, totalmente diferente a lo que su cuerpo ligeramente corpulento mostraba.
"Buenas tardes"
"¿Eh…? ¿Buenas tardes? No deberían estar aquí, esta es una zona restringida, es peligroso mantenerse cerca del cráter"
"Descuida" dijo el anciano. "Ya hemos hablado con tus superiores y nos han dado el permiso para intervenir. Venimos por órdenes de cierta persona" Le entregó un documento con la firma del hombre a cargo del caso. "Soy Kotomine Risei, es un placer. Así que, ya que me he presentado y has leído y comprobado el documento con tus propios ojos. Por favor, el maletín"
"Bueno… debería hablar primero con el Doctor, así podría entender mejor la situación…"
"Está bien. Como tu desees"
Después de eso, aquel anciano caminó junto al investigador, el cual se había quitado el traje que lo protegía de la radiación y, junto al maletín, se dirigieron a hablar con aquel Doctor.
***
Al día siguiente, aquel anciano abordó un tren junto a las personas que lo acompañaban. Una de esas personas cargaba el maletín con el pedazo de daga en su interior y los demás parecían protegerlo.
'Bien, esto podría ser un buen descubrimiento. Si esto resulta ser lo que creemos, tendríamos la oportunidad de usar un Servant desconocido' Se cruzó de brazos y sonrió levemente, pues ya tenía pensado quién sería el Master de este Servant.
El 24 de julio de 1990, una explosión desconocida consumió parte de Shinagawa, en Tokio - Japón. Aún se desconoce la causa.
Pero lo que sí se sabe, es que ese trozo de metal era algo especial.
Una guerra se avecina…
Continuará…