Una pequeña araña de arcilla en su mano se movió de lado a lado mientras hacía un extraño baile que de alguna manera era gracioso. Aquel niño sonrió al verlo, era bastante divertido. Este era su nuevo arte, su nueva vida después de robar el jutsu prohibido.
Aun así, no tuvo tiempo para quedarse a mirar el hermoso arte que estaba en sus manos, ya que estaba siendo perseguido por los shinobis de su aldea.
"¿Creen que van a atraparme tan fácil? Pues que mal, ya que ahora tengo mi nuevo estilo de arte" Aunque en realidad el no sabía como usar el jutsu prohibido. A penas se las arreglo para aprenderlo antes de escapar, por lo que aun le faltaba práctica.
Aun así, metió la mano a la bolsa de arcilla y miró a sus perseguidores mientras sonreía.
Después de eso, algunas arañas pequeñas de arcilla fueron lanzadas y chocaron contra los shinobis. Un segundo después lo que pasó fue…
¡BOOM!
La mirada de Deidara se iluminó al ver tal espectáculo de luz, sangre y destrucción. Su cuerpo tembló de júbilo al ver esta demostración de lo que una explosión puede hacer. Levantó los brazos mientras gritaba emocionado: "¡Esto es arte! El arte verdadero… ¡es una explosión!"
El descubrió algo nuevo con eso. Su nuevo arte, la explosión. Tan destructivo, tan hermoso que hacía que su cuerpo sintiera escalofríos por lo perfecto que era.
"Esto es… muy genial, si…" El asintió con la cabeza mientras pensaba en muchas más formas de arte que involucren las explosiones. Así fue como comenzó su viaje por el mundo hasta que se encontró con la organización Akatsuki.
-En el presente-
La pequeña araña de arcilla en su mano bailaba mirando a su creador. Deidara sonrió al ver esto, ya que el baile de la araña le recordó los viejos tiempos. Aunque el es bastante joven, así que no podía considerarse "viejos tiempos".
Los miembros mas jóvenes de la organización eran Hidan, Deidara y, por supuesto…
"Oh. Toru, no tardaste nada en llegar" Deidara, de pie en medio de la lluvia, a mitad del puente que llevaba a la cuidad de la lluvia, miró a Toru aparecer de la nada como una sombra asesina.
Esto lo sorprendió un poco, pero luego pudo recuperarse rápido.
"Pain me dijo que tenia visitas, pero no me dijo quien. En todo caso, ¿Para qué me buscan?" Las palabras de Toru fueron secas y sin ninguna emoción. De hecho, su mirada se veía más muerta que de costumbre.
"Bueno, yo…" Deidara se rascó la cabeza e intento no mirar a Toru a la cara. "Yo solo…" Un pequeño rubor se mostró en el rostro de este tipo.
Esto hizo que Toru suspirase cansado. Había pasado tanto en un día que su cerebro, a pesar de tener una capacidad para guardar información abismal, se sintió agotado mentalmente. Esto solo se intensificó al ser visitado repentinamente por Deidara y…
"¡No seas tímido, Deidara-senpai! ¡Di lo que sientes!" Tobi saltó y puso su brazo en el hombro de Deidara. Al instante, una vena se hinchó en la frente de Deidara y este, en un habilidoso movimiento, enrollo sus piernas alrededor del cuello de Tobi y lo tiro al suelo.
"¡No digas cosas que se pueden malinterpretar, idiota!" Dijo mientras asfixiaba a Tobi.
Toru solo vio esto con curiosidad. Inclino la cabeza levemente y suspiró.
"Parece que ustedes dos se llevan bastante bien" Asintió con la cabeza al ver a Deidara y Tobi jugando como si fuera niños.
Sin embargo, esto estaba lejos de ser verdad.
"¿Nosotros? ¿Llevarnos bien? Tobi solo es el reemplazo de Sasori-sensei. No tengo porque llevarme bien con el"
"Eres cruel, senpai"
Aun así, a pesar de esta extraña actuación delante de él, Toru se mantuvo como siempre y miró a Deidara en especifico.
"Ya dilo. ¿Qué es lo que quieres de mi?"
"¿Yo…? Bueno…" Deidara suspiró y aparto la mirada mientras continuaba ahorcando a Tobi. "Bueno… etto… ¿Qué tiene de raro visitar a un compañero artista…?" Dijo con una sonrisa nerviosa mientras miraba a Toru a los ojos.
"Es bastante raro… y mira que te lo digo yo"
"¡Bueno, lo que sea! ¡También vine a buscarte porque necesitaba la nueva arcilla!"
Escuchando esto, Toru se toco la frente y negó con la cabeza.
"Ya te dije que no haré más arcilla para ti. Incluso tu mismo puedes fabricarla, es bastante fácil"
"¿Crees que yo hubiera venido a ti si hubiese logrado recrear esa arcilla especial? Tu eres el único que piensa que las cosas difíciles son fáciles" Deidara soltó a Tobi y se puso de pie otra vez. 'Es por eso que Sasori-sensei te dio su respeto. Uh… mi ropa esta empapada'
"No seas malo, Toru-senpai" Tobi se limpio el barro de la ropa y se levanto del suelo. Acto seguido, se acerco a Toru y le toco el hombro con el puño de forma amigable. "Hazlo por tu compañero de trabajo. Eres bastante genial, incluso en esta aldea te llaman Tenshi (Ángel)"
Toru miró la máscara de Tobi en silencio, sin embargo, un destello carmesí se iluminó en el único orificio de la mascara. Casi al instante, el Kodō Shigan de Toru se activo y este mismo saco una la daga de su manga e intento apuñalar a Tobi en el cuello, sin embargo, algo extraño pasó.
Tobi literalmente se defendió de ese ataque a extrema felicidad usando un kunai.
"Oye, oye, senpai. ¿Por qué estás tan agresivo? ¿Qué fue lo que hice?"
Tobi se puso de rodillas como si estuviera rogando para que le perdonen la vida. Al mismo tiempo, Toru se quedó procesando lo que había pasado. El atacó instintivamente, su cuerpo se movió solo al ver aquel destello carmesí dentro de la máscara de Tobi. Así que fue inevitable que algo así pasara.
"¡Por favor, soy tu fan! ¡Aun soy muy joven para morir! ¡Ay!"
Interrumpiendo la extraña actuación de Tobi, Deidara le dio un golpe en la cabeza. "¡Ya cállate!. Oye, Toru. Es mejor que entremos a uno de los edificios, me voy a enfermar si estoy en medio de la lluvia, hmm…"
Negando con la cabeza por última vez, Toru se dio media vuelta y comenzó a caminar. Deidara y Tobi lo siguieron en silencio, bueno, casi en silencio. Ya que de la nada Deidara volvió a atacar a Tobi.
A pesar del ruido que se escuchaba, Toru se quedó pensando en lo que pasó con Tobi. El no estaba del todo seguro, pero… aun así… '¿Eso era un Sharingan?' Aparto los pensamientos que llenaban su cabeza, y continuó caminando junto a estos dos tipos que de alguna manera, a pesar de que peleaban a cada rato, aún seguían como un equipo.
-Laboratorio de Toru-
Al entrar al laboratorio, Toru vio enseguida a una mujer que se presentó ante los tres miembros de Akatsuki. Su cabello era negro, sus ojos castaños y tenía un hermoso cuerpo bajo una bata de laboratorio. Ella era la madre de aquel niño que Toru alguna vez salvo de su enfermad hace un año.
"Buenas noches, Kami-sama. Es un placer volver a verlo después de tanto tiempo"
"He estado ocupado últimamente, así que se me dificulta supervisar la fabricación de la 'Pirazinamida'. Aun así, no importa tanto. Tu ya estas a cargo"
"Le agradezco que tenga tanta confianza en mi. Mi hijo también se lo agradece. Yuu también espera visitarlo alguna vez"
"Yuu-san sigue entrenando para convertirse en ninja, ¿no?"
"Si… el quiere ser como usted. Después de todo, usted salvo nuestras vidas, Kami-sama"
Deidara vio la conversación que Toru y esta mujer tenían. Al mismo tiempo, a Tobi se le ocurrió decir algo que simplemente surgió en su mente.
"¿Entonces tienes un hijo, senpai?"
Al instante, Deidara golpeó a Tobi en la cabeza. Se veía que esa mujer frente a Toru seguramente tenía cerca de 30 años, pero aún así se veía hermosa. Aunque eso no era importante para el, después de todo, Toru los trajo a este lugar en especifico.
"Ara… ¿tener un hijo con Kami-sama? No me molestaría, pero no se que opinión tiene Kami-sama sobre mi"
Toru suspiro cansado. "Ha~ no le sigas la corriente, Akiko-san. Por ahora entraremos al laboratorio de pruebas. Encárgate de lo demás con tus compañeros"
"Como usted ordene, Kami-sama. Fue un placer poder conocernos también, Deidara-sama, Tobi-sama" Akiko hizo una reverencia y regreso a su zona de trabajo.
Toru continuo junto a estos dos al laboratorio de prueba pesadas y entro sin tener ningún cuidado.
"Entonces… ¿Harás arcilla para mi?" Dijo Deidara.
"Será la última vez. Estoy ocupado últimamente, así que aprende a fabricar tu propia arcilla"
"Sabia que podía confiar en ti, hm. Sasori-sensei también confiaba en ti"
"Sasori-sensei, eh…"
Deidara y Toru miraron al infinito mientras recordaban a Sasori, sin embargo, un sonido los saco de sus pensamientos.
Cling, cling…
Toru miro a Tobi, quien estaba jugando con los tubos de ensayo y las probetas que estaban en la larga mesa junto a la pared. Instantáneamente apareció delante de él para quitarle sus herramientas de trabajo.
"No toques nada…"
"Jajaja. Lo siento, sentí mucha curiosidad y no pude evitarlo"
Deidara simplemente suspiro cansado. El ya no sabía que hacer con este tipo. Tobi es un caso perdido, quien se toma toda situación como si fuera un tonto juego de niños. Esto lo molestaba, pero también lo ponía nostálgico, ya que le recordaba mucho su relación de compañeros de equipo con Sasori
"Es mejor que no te muevas. Si tocas algo peligroso por accidente, posiblemente termines convirtiéndote en un montón de carne derretida que respira"
"¡Hiii! ¡¿Lo dices en serio, senpai?! Entonces me quedaré bien quieto en este lugar. No moveré ningún músculo"
"Lo dudo" Dijo Deidara.
Después de eso, algunos minutos pasaron. Toru y Deidara mejoraron la arcilla que este último ya tenia y fabricaron la arcilla C4 con una pólvora especial patentada por el mismo Toru en cuestión.
Al final, Deidara se quedó bastante satisfecho con los resultados y decido que usaría esta arcilla para hacer explotar al chico de las nueve colas.
-Estatua de Pain-
"Ven aquí, perrito. ¡Atrapa la rama!"
"¡No soy un perro!"
Okaminaru se sintió ofendido por el comentario de Tobi. El no entendía porque Toru lo invocó, no, si lo entendía. Toru solo estaba usando a Okaminaru para entretener a Tobi y que este mismo no los moleste.
"¡Ahí va!" Tobi lanzó la rama que tenía en la mano y, como si de un perro de verdad se tratase, la mirada de Okaminaru se agudizó y al instante apareció en el cielo donde la rama había sido lanzada.
Atrapando la rama con sus colmillos, Okaminaru miró al suelo.
"¿Qué? ¡¿Cómo?! ¡Mi cuerpo se movió solo!"
"Jajaja. Bien hecho, eres un buen perro. Te conseguiré algunas croquetas"
"Ah!! Ya me tienes harto. Te voy a arrancar la cabeza"
"¿Uh? ¡No! ¡Espera! ¡Ahhhhh!"
Mientras todo esto pasaba, Toru y Deidara miraban desde lo alto de la estatua de Pain.
Deidara tenía una sonrisa, porque parecía que el lobo le estaba dando una buena lección de modales a Tobi. Toru solo miró esto en silencio pensando en lo que pasó al inicio, pero no le dio tantas vueltas al asunto, porque Deidara lo interrumpió.
"A veces Tobi es algo estresante, pero no es un mal tipo"
"¿Y se lo has dicho tu mismo?"
"¡¿Qué?! ¡No!"
"¿Eres a lo que los jóvenes llaman un 'tsundere', Deidara-san?"
Deidara miró a Toru con una vena hinchándose en su frente.
"¡No soy un tsundere! ¡Y no hables como si fueras un anciano cuando eres menor que yo!"
"Esta bien. No lo haré"
El silencio volvió al ambiente por unos segundos hasta que Toru se dio cuenta que Deidara aún no sabía esto. De hecho, esta pregunta surgió en la mente de Deidara, ya que, Toru estuvo con ellos en la última reunión para sellar al Bijū.
"¿Y como te fue con Hidan y Kakuzu?"
Los ojos de Toru se entrecerraron. Se toco la cabeza con dolor mientras su visión se distorsionaba y luego miró al frente antes de hablar.
"Ellos murieron"
Los ojos de Deidara se abrieron e instantáneamente miró a Toru.
"¿Qué demonios dices?"
Toru no se esperaba esta reacción por parte de Deidara. Este chico parecía bastante sorprendido y, de alguna forma, se veía un poco de culpa en su rostro.
En respuesta a esta reacción, Toru solo se quedó callado y miró a Okaminaru jugar con Tobi.
"Ha~ que carajo… ¿Cómo pudieron morir esos dos? Es casi como un sueño extraño"
Las palabras de Deidara eran serias y nostálgicas. El no se esperaba que dos ninjas que se consideraban inmortales hayan muerto así de la nada. Fue bastante sorprendente. Aunque la partida de Hidan sí que entristecía un poco a Deidara.
"Y yo que ya me llevaba bien con esos dos. La vida se extingue rápido, como una explosión. Sólo que esta vez no es nada artística"
"La muerte puede ser arte dependiendo de que sostenga el arma ensangrentada"
"Solo tu puedes decir algo tan tétrico con un esa cara de pulpo que llevas"
"¿Cara de pulpo?"
"Si. Cara de pulpo. ¿No los has visto? Son como algo así, o así, pero sin duda se parecen a ti"
"No creo que yo me parezca a un pulpo"
"Jaja. Solo era una broma…" Deidara miró al cielo lluvioso y sonrió. "Todos en Akatsuki somos artistas. Algunos están más locos que otros, pero eso convierte nuestra arte en verdaderas obras maestras. Claro, yo soy superior en todo aspecto a cualquier artista amateur" Se levanto de su asiento y levantó la mano. "¡El pop ha muerto! ¡Mi estilo es súper plano y nada puede superarlo!"
'Un estilo que no puede ser superado, eh…'
Hace mucho tiempo que Toru no se refiere a la matanza como si fuera arte. Al principio sólo lo hacía para encajar bien en el equipo de Sasori y Deidara, pero terminó por convertir la muerte en un nuevo estilo de arte.
Deidara lo sabía. Y, aunque a él le cueste admitirlo, el arte de Toru es bastante hermoso… bastante solitario y triste. Un verdadero arte que transmite emociones.
Continuará…