Como cuatro pétalos de rosa cayendo al vacío, las sombras se presentaron ante el. Una de estas sombras tenía seis brazos, supuestamente una figura masculina. Junto a esta, la silueta de una chica podía apreciarse, tenía el cabello largo, parecía tener un color rosa oscuro debido a la oscuridad que se mostraba entre las hojas de los árboles.
Otra de la sombras, la que parecía más intimidante, era la figura de un hombre gordo, parecía no tener tanto cabello en la cabeza.
La última sombra que se mostró, parecía tener dos cabezas, una pegada a la espalda. También tenía el cabello largo hasta los hombros, plateado debido a la poca luz que atravesaba las hojas de los árboles. Estos cuatro tenían un estilo de vestir muy parecido. Llevaba una túnica marrón junto con pantalones cortos negros y sandalias negras estándar, además, también llevaban un cinturón de cuerda como Orochimaru.
Toru entrecerró los ojos y suspiro. Más problemas han llegado.
"Asahi Toru"
"Tenemos una propuesta para ti"
Dos de esas misteriosas entidades dejaron salir algunas palabras.
"Me niego"
Toru, sin embargo, respondió enseguida ante esta propuesta. El ya sospechaba sobre la identidad de estas personas, pues ya los había visto anteriormente, cuando el tercer Hokage murió a manos de Orochimaru.
Ellos estaban ahí, fueron los shinobi que formaron la barrera de chakra que impidió que la ayuda llegará al Hokage.
"Vaya, esa fue una respuesta rápida"
"Jaja, el no se anda con rodeos, eh…"
"Hagamos esto rápido para largarnos de aquí"
"Hm…"
Se cruzó de brazos y pensó en la situación que se encontraba en este momento.
'Estos son los guardaespaldas de Orochimaru, o eso es lo que puedo ver. Sin embargo, que hayan llegado justo después de mi enfrentamiento contra Sasuke, algo así no debe ser una coincidencia'
Si estos ninjas llegaron a Konoha, es para llevarse a Toru y Sasuke con ellos. Obviamente Toru no será secuestrado tan fácilmente, pero no sabía con certeza lo que estos tipos planean, ya que, ellos se veían más dóciles de lo que él esperaba.
"Se de donde vienen, pero no se quienes son"
Toru tuvo suficientes problemas el día de hoy. Es difícil lidiar con los pensamientos que leer esos documentos le dejaron, así que ahora solo quería salir de este lugar.
"Fufufu… Somos Los Cuatro del Sonido. Soy Kidomaru de Toumon"
"Yo soy Sakon de Seimon"
"Jirobo de Nanmon"
"Y yo Tayuya de Hokumon"
Los Cuatro del Sonido se presentaron y, casi al instante, desaparecieron dejando imágenes residuales, pero aunque estos mostraron hostilidad, Toru se quedó sentado en el mismo lugar con los brazos cruzados.
Cerró los ojos y suspiro.
"Ustedes no entienden"
Aunque no sabía lo que estos tipos querían, Toru se negó antes de escuchar lo que ellos tenían que decir, pero parece ser que ellos son de los que no entienden con palabras.
*¡Boom!*
Movió la cabeza hacia la derecha, evitando un puñetazo que estaba dirigido a el. Para este momento, Toru vio a los ojos de este tipo que intento golpearlo.
Tenía la piel morena y seis brazos que se distribuían por los costados superiores de su torso. Cabello negro y ojos del mismo color, además, atado a su cabeza tenía la banda con la placa metálica, cuyo emblema podía distinguirse fácilmente.
'Otogakure…'
Toru suspiro nuevamente.
"Esquivaste bastante bien, muchacho'
Kidomaru sonrió levemente, se sorprendió al ver que Toru pudo esquivar fácilmente el golpe con tan solo mover un poco en la cabeza, pero ahora debería ir enserió junto a sus compañeros para poder darle una buena paliza a este niño.
Ellos creían que con esto, Toru cederá, para finalmente ir con ellos a donde Orochimaru se encuentra, así no tendrían que ir por el niño Uchiha. Pensaban que Toru era como Sasuke, alguien que desea venganza, alguien con odio en su corazón, pero estaban completamente equivocados.
Toru es diferente, el decidió esconder esas emociones en su corazón. No iba a dejar que el odio y la sed de venganza lo consuman como a su amigo de la infancia, eso solo lo llevará a una vida llena de lagrimas y sufrimiento.
"Tayuya…"
"Ya lo se, bastardo. No tienes que decirlo"
La chica de cabello rosa sacó una flauta y miró a Toru a los ojos.
Al mismo tiempo, Sakon, el que tenía una cabeza de más pegada a la espalda, dio un salto en el aire y lanzó tres shuriken. Acompañando a esto, mientras los shuriken iban con la trayectoria justo al rostro de Toru, Jirobo dio un salto hacia delante, preparándose para dar un golpe con todo el peso de su cuerpo.
Pero Toru desapareció ante los ojos de todos y los shuriken golpearon el torneo de madera.
Miraron en todas las direcciones, pero no pudieron encontrarlo hasta que la voz de este niño volvió a escucharse en este basto bosque. El estaba sentado en la rama de un árbol, justo detrás de ellos.
"¿Pueden parar ya? En serio, ahora no estoy de buen humor. Si pueden irse ahora mismo, seria algo que les agradecería de todo corazón. Últimamente he tendió muchas cosas en que pensar, así que por el momento, no quiero tener más problemas con los que lidiar"
Los Cuatro del Sonido se miraron entre si por unos segundos.
"Esto va a ser mas difícil de lo que pensé"
Sakon negó con la cabeza mientras se reía entre dientes. Ellos fueron informados anteriormente por Kabuto que Toru es extremadamente peligroso, no es alguien que deba tomarse a la ligera. Eso es algo que ya pudieron confirmar con solo ver la velocidad a la que Toru se movía, no era normal, era extremadamente letal.
(Si el se niega, no hay nada que ustedes puedan hacer. Aunque aun pueden usar su pasado para convencerlo, estoy seguro de que en ese aspecto, el es parecido a Sasuke)
Recordando estas palabras, Kidomaru cerro los ojos por un momento mientras pensaba en lo que iba a decir a continuación.
"Escucha, Asahi Toru. Orochimaru-sama puede darte el poder que necesitas para matar al tipo que te arruino la vida. Si vienes con nosotros, tendrás acceso a un poder que no puedes imaginar, serás imparable, no habrá nada en este mundo que pueda oponerse ante ti. Orochimaru-sama es la clave para que tu puedas tomar venganza por lo que te quitaron. No habrá más sufrimiento para ti, podrás estar en paz cuando ese tipo esté muerto"
"Ya lo dije antes, me niego. No pienso discutir más. Ustedes están haciendo que mi paciencia se agote"
Con toda la calma del mundo, lentamente como si su cuerpo entero estuviera relajado, se puso de pie sobre la rama del árbol. Sus ojos por un segundo mostraron una luz azul como el cielo y la pupila se fue deformando hasta adoptar la forma de una X, además, de entre su ropa, sacó una daga con forma de espina que comenzó a brillar con la luz dorada de la destrucción.
Los Cuatro del Sonido vieron a este niño mostrase hostil ante ellos, sin embargo, se quedaron callados, estáticos en el mismo lugar hasta que Kidomaru habló.
"Ese fue nuestro último intento. No hay nada que podamos hacer ahora, pero… Asahi Toru, espero que no te arrepientas de haber tomado esta decisión. No volveremos a buscarte. Sin embargo, si llegas a cambiar de opinión, si deseas poder, tienes hasta el amanecer para encontrarnos en las afueras de Konoha. Orochimaru-sama se alegrará de verte"
"No me interesa el poder de un pervertido como Orochimaru, ahora desaparezcan de mi vista antes de que mi mano se resbale por accidente y termine cortándoles el cuello a todos" La expresión sin emociones en su rostro, aunque suene extraño, mostraba un poco de molestia.
"Jajaja… eres muy agresivo, niño"
Por un momento, Kidomaru observó los ojos de Toru, estos brillaban con intensidad, como una flama azul en la oscuridad.
'¿Eso es lo que Orochimaru-sama desea tanto? Esos misteriosos ojos, eh… Kabuto dijo que podría ser una mutación del Sharingan del clan Uchiha. Supongo que por eso es tan valioso, pero para nuestra mala suerte, el se ha negado, no podemos llevarlo por la fuerza ya que posiblemente que ninguno de nosotros salga ileso. La opción más fácil es ir por Uchiha Sasuke, podremos convencerlo dándole algunos golpes, después de todo, hace algunos minutos fue humillado por Asahi Toru, ahora mismo debe estar con la mente destrozada, así que es una buena oportunidad para convencerlo'
Kidomaru se cruzo de brazos y espero un poco.
Pronto la noche caería sobre la tierra, así que el tiempo apremia, no podían seguir perdiendo tiempo rogándole a Toru que los siga.
"Vámonos, no tenemos nada que hacer aquí" Dijo Sakon.
Esto fue algo que hizo que Tayuya mirara a Toru con cara de fastidio. Pensó que era un idiota al no aceptar esta oportunidad tan buena, aún así, no había nada que hacer al respecto.
Jirobo por otro lado, se mantuvo en silencio, no era necesario hablar cuando sus compañeros ya estaban haciendo todo el trabajo.
Después de unos segundos, Los Cuatro del Sonido desaparecieron entre las hojas de los árboles.
***
Las horas han pasado, la noche ya es una realidad en este mundo.
Mirando aquella imagen en ese viejo marco, Sasuke suspiro. Habían pasado tantas cosas en estas últimas semanas, que apenas podía ordenar sus pensamientos. No sólo fue derrotado por Naruto, también por Toru, el cual solo se contuvo hasta el final, nunca peleo en serio contra el. Siempre fue así…
Pero Sasuke ya había tomado su decisión.
Hace algunos minutos fue visitando por Los Cuatro del Sonido. Ellos le abrieron los ojos, le mostraron que era débil, que su odio no era suficiente, que si se quedaba en este lugar… nunca podrá completar su venganza.
Fue una decisión difícil, pero al final, se vio a sí mismo en el espejo y recordó a su hermano, aquel hombre que traicionó a su propia familia.
Antes de salir de casa, dejo el marco con aquella foto donde Sakura, Naruto y Kakashi aparecían boca bajo, para así no verlo de nuevo.
Camino por las calles de Konoha en medio de la noche. La fría brisa le tocó el rostro y, entonces, vio a alguien frente a el.
'Sakura…'
Sasuke sabía quién era ella.
Ella le rogó que no se vaya, pero Sasuke se negó. Incluso llegó al punto de proponerle escapar de la aldea juntos, pero el simplemente no quería eso, así que en un rápido movimiento, le dio un golpe justo detrás del cuello, algo que la dejó inconsciente al instante.
Tomo a la chica tirada en el suelo y de una forma delicada la recostó en una banca que estaba cerca.
Antes de continuar, la vio durante algunos segundos mientras recordaba lo que vivió junto a su equipo, segundos después, se alejo lentamente de allí.
Faltaba poco para llegar a la salida de la aldea, pero nuevamente algo interrumpió en su camino.
Una fuerte brisa lo distrajo. Las hojas de los árboles se levantaron y una sombra se mostró entre las ramas. Tenía una capa negra que cubría gran parte de su cuerpo, una bufanda roja con los bordes rasgados y aquellos ojos que brillaban en color plateado.
"Toru…"
"Eres cruel, Sasuke. Dejar a Sakura en ese estado, es realmente triste"
Los dos se miraron y, como si fuera una reacción química, el dojutsu en los ojos de cada uno se activo.
Carmesí como la sangre y azul como el cielo. Los ojos del sufrimiento y los ojos de la muerte se encontraron.
"¿Viniste para detenerme?"
"No… más bien, vine a despedirme"
"…"
Su amigo de la infancia, alguien a quien en el pasado llamo hermano, se mostró frente a el. El pasado de ambos es parecido, sin embargo, sus intenciones son completamente diferentes.
"Sasuke… todo lo que estás haciendo ahora mismo, debo suponer que ya sabes lo que tus acciones implican"
"Eso ya no me importa"
"Lo sé. De lo contrario no estarías haciendo esto"
"No tengo tiempo para perder, habla de una vez"
Sasuke apartó la mirada, no quería ver a aquel amigo que lo superó.
"Sasuke... tu venganza es una estupidez, pero yo no estoy aquí para juzgar tus acciones. Puedes hacer lo que te apetezca, no voy a intervenir. Todo lo que hagas será por tu propia decisión…"
Se cruzó de brazos y continuó.
"Los guardaespaldas de Orochimaru también me visitaron. Se que a ti también, es por eso que estas aquí. El poder que buscas, la promesa que quieres cumplir…"
…
El viento soplo fuertemente, haciendo que el cabello de esos dos niños bailará al mismo tiempo. El silencio era lo único que estaba presente.
Lentamente la luna apareció entre las nubes, iluminando el rostro de ambos.
"Sasuke… espero que no te arrepientas de la decisión que has tomado"
Escuchar esto hizo que Sasuke cerrará los ojos. Suspiro cansadamente mientras comenzaba a caminar en dirección a la salida del pueblo.
Una sonrisa se formó en su rostro y entonces miró a Toru a los ojos.
"Nunca me arrepentiré de esto…"
"Espero que así sea"
Dándole la espalda a Sasuke, Toru comenzó a caminar de camino a casa.
Después de que Los Cuatro del Sonido lo visitarán, decidió que los seguiría para ver que es lo que iban a hacer a continuación. Lo que vio fue como golpeaban a Sasuke sin tener piedad.
Ellos hicieron que Sasuke se viera débil, y al final, todo esto lo llevó a tomar esta decisión.
Aunque Todo este tiempo estuvo visitándolo, la conclusión de este asunto fue extrañamente triste y aburrida.
'Ahora somos enemigos. No hay nada más que pueda hacer, no voy a intervenir, después de todo, no es asunto mío. Yo ya sé la verdad detrás de todo lo que paso esa noche, por eso puedo decir, que tu venganza es una estupidez. Por lo tanto, se que terminaras arrepintiéndote'
Con estos últimos pensamientos, Toru desapareció en el aire, como si hubiera sido tragado por la oscuridad de la noche.