Ese día estábamos Daniel y yo en su cuarto, él estaba estudiando y yo leyendo un libro del que tenia que hacer un examen. Cuando entró María y dijo:
-Dan, bajo hay alguien que te busca. ¡Es una chica!- Daniel me miró extrañado y me dijo que subía enseguida. Estaba en mitad de una página cuando oí un grito, baje las escaleras corriendo y vi como María paraba a Daniel que estaba en una pose amenazante.
Se giró al escucharme y me dijo:
-¡Emily vuelve arriba, no quiero que veas esto!-Me quede de piedra cuando vi a una chica muy guapa tirada en el suelo. Tenía una de sus manos en la cara, en vez de subir le dije muy suave al ver que Maria no podía con él:
-¿Qué esta pasando aquí?- Le puse la mano en el brazo, Daniel me miró y aunque estaba muy furioso me dijo con calma:
-¡Esta tía dice que me he acostado con ella! ¡También dice que esta embarazada!-Al ver mi cara de asombro, la chica empezó a gritar:
-¿Pero como puedes ser tan cruel? ¡Es tuyo! Encima que te acostaste conmigo, diciendo que tu novia no te tenía bien atendido y mientras lo hacíamos gritabas su nombre.- Estaba algo mareada pero las ganas de saber que pasaba me podían, tenia ganas de fastidiar a esa tía por todo lo que me estaba pasando mi confianza en Daniel era fuerte y sin dudar la mire y le dije:
- Si eso es verdad, podrás decirme como me llama cuando estamos en la cama, para confirmarlo me podrás decir donde tiene el tatuaje y como es.- Daniel me cogió de la mano y me miró con cansancio, al ver mis ganas de fastidiar asintió con la cabeza. La chica creyendo que sabia lo que decía, me dijo:
-Te llama Emily cuando llega al orgasmo, en eso del tatuaje no me fije pero creo que era un escudo.- Para mi eso era todo mentira, cuando estábamos en la cama o asolas me llamaba "Emi", era su modo más cariñoso y no tiene ningún tatuaje. La mire y le dije riéndome:
-Creo que te equivocas en todo, bueno puedo afirmar que me llamo Emily pero cuando estamos solos me llama de otra manera. ¡Ah! Por cierto que sepas que lo del tatuaje me lo he inventado.-Daniel estaba a mi lado callado, me giré y le dije casi a carcajadas:
-Esta tía no sabe nada de ti, ¿como podría pensar que te acostaste con ella? ¡Es ridículo!-Daniel se relajo a mi lado besándome, mientras me miraba amorosamente, la chica me dijo:
-No será tan ridículo cuando nazca él bebe.-Riéndome sin ganas le dije:
-¡Mira soy más pequeña que tú! Pero se de sobra que eso se puede confirmar con una prueba de sangre. Así que si te aburres ve a fastidiar a otros.- Esa chica se puso a insultarme, incluso se levantó para pegarme hasta que Daniel poniéndose en medio la sacó a la calle.
Después le dijo a su hermana que subiera arriba y que se calmara. A continuación me dijo:
-¡Emi! ¡Mi Emi! Así es como te llamo cuando estamos solos.- Me reí pero no mucho la verdad me sentía un poco mareada. Intente llegar a una silla pero casi me caigo, Daniel me cogió rápidamente. Me ayudo a sentarme en el sofá y me pregunto:
-¡Emi! ¿Estás bien? Estas amarillenta.-Le dije que estaba un poco mareada, me trajo un baso de agua y con un trapo mojado se sentó a mi lado. Me puso el trapo en la frente, mientras me acariciaba la cara me dijo:
-¡Dios! ¡Que día! ¿Quién era esa?- Al rato nos dimos cuenta de que ninguno de los dos la conocía era tan gracioso que nos dio la risa, un momento después volvimos a su cuarto cuando dije que me sentía mejor. Como el mareo no se me pasaba del todo me pidió que me tumbara en su cama. Se sentó a mi lado y me dijo:
-¡Si te llegaras a encontrar peor dímelo, te llevare al medico!- Después volvió a su escritorio a seguir estudiando mientras yo me quedaba dormida. Una mano fría me despertó de golpe, me giré asustada pero al ver que era la madre de Daniel me relajé. Solo era que estaba mirándome seria y me volvió a poner la mano en la frente. Me preguntó con suavidad:
-¿Te sientes mejor?- Al intentar levantarme me vino de nuevo el mareo, tubo que sostenerme. Después mirando a Daniel dijo:
-Voy a hablar con su madre quizá solo sea el principio de un resfriado, parece que tiene un poco de fiebre. Sera mejor que se quede aquí, si la llevaras en la moto se enfriaría y si fuerais a pie podría desmayarse en la calle. ¡Si tu padre estuviera aquí la llevaría pero esta de viaje!- Mi madre coincidió con la suya, después subió con un jarabe para el mareo. Después de cenar nos pusimos ha hablar en la habitación de Daniel, su madre nos permitió dormir juntos. María dijo murmurando:
-¡Que cara tenia esa tía! Mira que decir que estaba embarazada de mi hermano. Menudo problema, que fuerte me ha parecido.- Daniel enfadado dijo:
-¿Y que más da? No es cierto así que dejémoslo ahí.-María siguió diciendo:
-Pero si por ejemplo fuera Emily, ¿Qué harías?- Daniel se quedó pensándolo y dijo:
-Ahora no es el momento para tener hijos, haber seamos serios, estoy estudiando una carrera y ella esta en el instituto nos estropearía el futuro.- Sus palabras me dolieron, ahora no sabia como decirle que tenia un retraso. Las lágrimas me pudieron, Daniel se giró y me vio llorando. Preocupado me dijo viniendo hacia mí:
-¡Emily! ¿Qué pasa? ¿Te encuentras peor, llamo a mi madre?- Le dije que no era nada, que solo estaba intentando quitarme la impresión de aquella tarde. Les dije que me había dado por llorar, María me dijo que a ella le daba por reír nerviosamente. Estuvimos hablando hasta que se hizo tarde, María se fue a su cuarto, Daniel me dejo una camiseta suya para que me hiciera de pijama. Después me acosté en la cama viendo como estudiaba, Daniel al ver que no dormía me dijo en voz baja:
-¿Te molesta la luz? ¿Quieres que me vaya al estudio?- Le dije:
-¡No! Tranquilo es que no tengo sueño.- Daniel me miro y sabiendo que algo me preocupaba me dijo:
-¡Emi! Dime que te preocupa, sé que te pasa algo ¿Qué es?-Le miré y le dije sonriendo:
-Soy un libro abierto para ti, ¿verdad?- Él se levanto y me dijo:
-¡Si! Lo eres tu cara lo dice casi todo, ahora dime que te preocupa o no podre seguir estudiando. ¡Me tienes muy preocupado!- Luego suspiré y le dije mientras golpeaba suavemente el colchón a mi lado:
-¡Siéntate! ¡Por favor!-Él se sentó y me dijo abrazándome.- ¡Es grave! Normalmente no me pides que me siente, cada vez estoy más nervioso. ¿Qué pasa?- Llorando contra su camisa le dije:
-¡Estoy asustada! No me viene la regla, todos los meses me viene a su tiempo pero ahora no me viene. ¡Han pasado 9 días de la fecha de este mes y el anterior tampoco me vino!-Daniel no dijo nada durante cinco minutos, después de pensarlo me dijo:
-¿Crees que pudo ser de la noche de fin de año? Dijiste que habías notado algo raro pero comprobé el condón. No me pareció que estuviera roto, pero nunca se sabe. De todas formas hay que saberlo con seguridad, iremos al medico y según lo que nos diga haremos.- Lo dijo con tanta seguridad que me pareció creer que podría con todo esto. Esa noche cuando se acostó me abrazó muy fuerte diciendo:
-No va a pasar nada, tranquila, estoy aquí contigo. Vamos a estar juntos, vamos a hacerle frente a lo que venga.- Después me beso con dulzura.