Todos miraron a Huo Chen.
Era el pilar central del ejército en la base.
Mientras él estuviera allí, todavía habría esperanza.
Huo Chen se paró en el campo de entrenamiento mientras enormes gotas de lluvia golpeaban su rostro. Se sentían casi dolorosos.
Vio las caras de pánico a su alrededor, pero eso no lo hizo vacilar. Su firme compostura tuvo un efecto tranquilizador en sus hombres.
"¡Canción Shou!"
"¡Sí, señor!"
"Prepara a los hombres. Vamos con el Plan C".
Huo Chen no esperaba que la batalla decisiva sucediera tan pronto.
Incluso si el enemigo los atacara por la noche, aún podría usar la ruta de escape para contraatacar.
Sin embargo, tenían un traidor en sus filas, y uno que ocupaba un puesto muy importante. Eso arruinó sus planes.
Al final, tenía que hacer cumplir el plan final, sin importar lo que implicara. ¡Era su último recurso!
"¡Sí, señor!"