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Mientras tanto, al mismo tiempo, Wen He estaba tan aburrida en su habitación que de verdad decidió mirar recetas de cocina. Incluso ella misma sentía que se estaba volviendo loca del aburrimiento.
Y allí estaba ella, en la cocina, frente a su iPad para recibir instrucciones sobre cómo hacer sopa, mientras usaba un nuevo delantal azul. Su cabello corto estaba atado y revelaba su rostro delicado.
Cuando estaba a mitad de camino del proceso, escuchó pasos afuera.
—Regresaste, ¿por qué tan temprano hoy? ¡Todavía no he terminado de cocinar! —Ella sonrió mientras él entraba—. Son esas cosas de comida que tus amigos enviaron, ¿cómo sabían ellos que últimamente andaba pensando en cocinar?
Huo Chen se detuvo, ligeramente aturdido, en el momento en que asomó la cabeza por la cocina. Pensó que vio a Yangyang.
Y en el momento en que ella habló, sus sentidos volvieron a él.
—No lo sé. —Se dirigió al baño.