—¿Qué haces aquí? —preguntó Lu Xinyi entrecerrando los ojos al ver a su esposo mientras volteaba su atención hacia Xiao Lan, quien había traído a otra mujer consigo. Shen Yi le había sacado de la cama temprano esa mañana.
—Shen Yi me llamó para ayudarte a convertirte en una verdadera dama —repuso Xiao Lan—. Miss Qiao me va a ayudar a enseñarte etiqueta y modales.
—¿Qué?
—Xinyi, tienes cinco días para aprender esto. ¿Puedes hacerlo por mí? —preguntó Shen Yi, su mano se entrelazó con la suya mientras se sentaban en el sofá de la sala de estar.
Lu Xinyi y Shen Yi habían discutido acerca de cómo ella necesitaba prepararse antes de conocer a la abuela, pero nunca pensó que la idea de darle un curso intensivo para convertirse en una verdadera dama estuviese incluida en los planes de su esposo.
La señorita Qiao, quien estaba escuchando su conversación, intervino. Empujó el puente de sus gafas y miró a Lu Xinyi.