"¡Tsunade!" - exclamó Kushina mientras llegaba a la choza que estaba al borde del manantial.
"¡ARGH!" - Tsunade solo gritó en dolor mientras sentía un agudo dolor en su vientre.
"¡Menos mal que regresaste, cariño!" - exclamó Fukasaku mientras miraba a su esposa - "¡Porque yo no sé que hacer!"
"¡Ok, vine con ayuda!" - exclamó Shima mientras le indicaba a la pelirroja que se acercara a la rubia.
"Tsunade..." - dijo Kushina mientras miraba a descendiente Senju.
"¡También me gusta verte de nuevo pero llama a Shizune!" - rugió Tsunade mientras empezaba con su trabajo de parto - "¡ARGH!"
"¡O-Ok!" - exclamó Kushina mientras creaba un clon y lo mandaba a buscar a los demás.
"Voy a esperar a fuera" - dijo Fukasaku mientras salía de la choza.
"¡Ah!" - los gritos de dolor de Tsunade resonaron en todo Monte Myoboku así que Kushina decidió que era una mejor idea la de poner un sello para no molestar a los demás.
"Ok, estoy lista" - dijo Kushina con seriedad mientras Shima asentía.
"Empecemos..." - dijo Shima mientras miraba con preocupación a la rubia porque este era el momento más importante.
* * * * *
Habían pasado dos horas desde que Kurama había llegado al laboratorio de Orochimaru y lo único que había encontrado eran jaulas llenas de monstruos producidos por los experimentos del Sannin de las Serpientes.
"Me alegro que ese bastardo este muerto o juro por dios que lo hubiera matado yo" - murmuró Kurama con el ceño fruncido porque lado que caminaba, lado que se llenaba de cadáveres desfigurados.
Él lentamente continuó con su travesía sin saber que Tsunade estaba en medio de trabajo de parto porque algo le decía que podría encontrar algo un poco más adelante.
"Biblioteca..." - murmuró Kurama mientras entrecerraba los ojos. Él rápidamente entró a la habitación y caminó hacia donde estaba el archivador - "Veamos... Senjutsu... Senjutsu... donde está la maldita sección de Senjutsu..."
Kurama entrecerró los ojos mientras creó unos cuantos clones para que revisaran los otros archivos mientras él continuaba leyendo.
"¡Pasillo 15, Jefe!" - exclamó un clon mientras todos lo miraban - "¡La sección de Senjutsu está en el pasillo 15!"
"¡¿Qué están esperando?!¡Andando!" - exclamó Kurama mientras que los clones asentían a gran velocidad.
El grupo no demoró nada en llegar al lugar y empezar a buscar entre los documentos.
"¡Busquen lo más rápido posible!¡No nos queda mucho tiempo porque Tsunade-chan puede dar a luz en cualquier momento!" - exclamó Kurama mientras los clones asentían con firmeza y empezaban a buscar.
Kurama tomó uno de los libros y empezó a leerlo lo más rápido que pudo, solo para arrojarlo cuando vio que el contenido era sobre como iniciar el entrenamiento - "Siguiente..."
Pasaron 10 minutos de lectura cuando un clon empezó a gritar.
"Espero buenas noticias" - dijo Kurama con neutralidad.
"¡Sólo mire, Jefe!" - respondió el clon mientras le entregaba el libro.
"Ya veo..." - murmuró Kurama mientras sus ojos brillaban ligeramente y continuaba leyendo - "Sigan buscando, lean todos los libros de esta maldita biblioteca... y lo que no sea útil para nosotros, lo queman... el mundo no necesita de las investigaciones de Orochimaru"
"¡Hai!" - exclamaron los clones mientras continuaban leyendo y destruyendo todo lo que sentían que era inútil.
* * * * *
"¡Solo un poco más, Tsunade-sama!" - exclamó Shizune quien estaba ayudando a la rubia en su parto junto a Hikari.
Las horas habían pasado desde que inició el trabajo de parto de la rubia y en su cara podía notarse el cansancio pero ella continuó poniendo todo de su parte para poder traer a sus bebés al mundo.
En estos momentos habían 5 bebés descansando en una camilla en las cercanías.
El primero era un pequeño con cabello castaño oscuro y tenía una sonrisa en su rostro.
La segunda era una hermosa niña de cabello rojo.
El tercero era un pequeño de cabello plateado con mechones rubios.
El cuarto era un bebé de cabello completamente rubio
Y el quinto era un bebé de cabello castaño claro.
Sus nombres Tsunade los había decidido por mucho tiempo, ellos eran Hashirama, Mito, Tobirama, Dan y Nawaki. Todos habían nacidos sin complicaciones y ahora solo quedaba un bebé más por nacer.
"¡Solo falta una, Tsunade-san!" - exclamó Hikari mientras sus manos temblaban por la preocupación - "¡¿Donde diablos está, Kurama-kun?!"
"¡Lamento la demora!" - exclamó Kurama mientras entraba a la choza con un libro en sus manos - "¡Luego les contaré donde estaba, ahora necesito concentrarme!"
Kurama rápidamente se puso al lado de Tsunade y posicionó sus manos sobre el vientre de la mujer.
"K-Kurama....kun..." - murmuró Tsunade mientras apretaba los dientes.
"Tranquila... te ayudaré en esto" - respondió Kurama con seriedad mientras empezaba a circular su chakra en el interior de la mujer.
Tsunade pudo sentir como su dolor se reducía en gran medida mientras continuaba respirando con agitación.
"Estoy haciendo algo que vi en uno de los libros que logré recuperar del laboratorio de Orochimaru" - dijo Kurama con seriedad mientras miraba con preocupación a la rubia - "Es por eso que quiero que continúes tratando de traer a nuestra pequeña"
"Ok..." - murmuró Tsunade mientras continuaba pujando, solo que ahora el dolor era mucho más manejable - "¡Ah!"
"Kurama-kun..." - dijo Hikari con seriedad.
"Tranquila, sé lo que hago" - dijo Kurama con seriedad mientras continuaba haciendo que su Chakra Senjutsu circulara en el interior de la rubia.
El cuerpo de Tsunade empezó a brillar con una hermosa luz verde esmeralda mientras continuaba pujado para poder traer al mundo al último de los bebés.
El sudor corría por la frente de Kurama mientras entrecerraba los ojos porque estaba usando toda su concentración para que su chakra que circulaba en el interior de la rubia, no se saliera de control.
"¡AAAAARGH!" - Tsunade pujó nuevamente, dejando ver la cabeza de una pequeña niña de mechones rojos y rubio.
"¡Un poco más, Tsunade!" - exclamó Kushina con emoción mientras veía como la pequeña estaba a punto de nacer - "¡Un último puje!"
"¡ARGH!" - Tsunade dio un último puje mientras sentía como la energía escapaba de su cuerpo.
"¡Ya está con nosotros!" - exclamó Hikari mientras tomaba a la bebé con cuidado e hizo los procedimientos médicos necesarios, solo para notar un pequeño detalle - ". . ."
"Kazumi-chan..." - murmuró Tsunade con debilidad - "Dime como está..."
Hikari la tomó unos segundos pero la pequeña no reaccionaba.
". . ." - las personas alrededor solo podían verla con pena mientras sentía como Kurama miraba al a pequeña con preocupación.
"¡¿Cómo está?!" - gritó Tsunade mientras las lágrimas empezaban a correr por sus mejillas - "¡Dime como está mi pequeña!"
". . ." - Hikari no dijo nada, ella solo suspiró con pesar mientras negaba con la cabeza.
"¡No!" - exclamó Tsunade mientras las lágrimas corrían como ríos por sus mejillas.
"Tranquila..." - dijo Kurama con seriedad - "Todavía no termino..."
Kurama tomó con cuidado a la pequeña y circuló su energía en su interior.
"Kurama-chan..." - dijo Shima con sorpresa porque podía escuchar como el corazón de la pequeña empezaba a latir con debilidad - "A caso..."
". . ." - Kurama no le respondió. Él solo se concentró en la pequeña bebé mientras el rostro de la pequeña empezaba a dejar de ser pálido y tomar un ligero color rosado.
"!" - Tsunade abrió los ojos en sorpresa mientras las lágrimas corrían, solo que esta vez no era de tristeza, sino de felicidad.
"¡BUA!" - el llanto de la pequeña resonó en toda la habitación mientras las chicas mientras sus hermanos parecían responderle porque también lloraron.
"¡Kazumi-chan!" - dijo entre llantos Tsunade mientras miraba con cansancio a la pequeña bebé de cabello rojo con rubio - "Mi pequeña Kazumi-chan..."
Kurama por fin soltó un suspiro de alivio cuando vio como la niña empezó a llorar con mayor intensidad, demostrando que por fin estaba fuera de peligro - "Nunca más... quiero pasar por algo como esto... no creo poder resistir tanta presión psicológica..."
Lo que Kurama había hecho, era algo simple. Él había usado su chakra Senjutsu para poder estimular el chakra dentro de la pequeña Kazumi desde que estaba dentro de su madre porque sabía a ciencia cierta que ella nacería con unos Tenketsus muy diferentes a los de una persona normal.
"El nacimiento de un Sabio" - murmuró Shima con emoción, no solo porque la bebé estaba a salvo, sino también porque fue testigo de algo nunca antes visto - "Kazumi-chan es una Sabia de nacimiento... comprendo..."
Kurama solo vio como Shima había llegado a la misma conclusión que él.
"Ella no puede circular chakra común..." - dijo Kurama mientras todos lo miraban - "Para nosotros, nuestro chakra es nuestra fuente de vida... y si Kazumi-chan no puede circular su chakra, eso haría que su vida estuviera en un profundo peligro, es un principio básico pero que a todos se nos pasó por alto por la preocupación..."
"Es por eso que circulaste tu chakra Senjutsu, porque sabías que ella podría circular esa energía" - dijo Shima mientras miraba al pelirrojo con una sonrisa - "Sabías que Kazumi-chan nacería como un Sabio..."
"Ella fue la más influenciada por la Energía de la Naturaleza..." - respondió Kurama mientras miraba a la pequeña recién nacida.
"Eso no me importa" - respondió Tsunade mientras miraba con cariño a la pequeña pelirroja con mechones rubios - "Yo solo me alegro de que mi pequeña princesa está a salvo..."
"Creo que es mejor que dejemos que Tsunade descanse" - dijo Shima mientras todos veían como la rubia a duras penas podía mantener los ojos abiertos - "Ella ha pasado no solo por el parto de 6 bebés, sino también la carga psicológica que era la seguridad de Kazumi-chan"
Kushina y las demás mujeres que habían ayudado en el parto, asintieron cuando escucharon esto.
"Yo voy a quedarme en caso de que haya complicaciones con el circulamiento de chakra de Kazumi-chan" - dijo Kurama con seriedad.
"Ok" - asintieron los presentes antes de retirarse.