Marvin se sintió paralizado. En cuanto terminó de plantear la pregunta, la marca en su mano comenzó a arder. Antes pensó que era una ilusión, pero ahora notó que había aparecido una pequeña Balanza de la Verdad. Sabía del inmenso poder de la Diosa de la Verdad.
Si se recuperaba, no sería posible estimar su poder basándose en los Dioses actuales. Si él se hacía su Guardián, la mayoría de los Dioses y Diablos de todo el Universo no se atrevería a provocarlo. Era una enorme tentación. Pero negó con la cabeza, rechazando la invitación de Molly.
Su respuesta fue simple: —Sólo protejo a aquellos que necesitan de mí. Soy alguien sin fe. La Verdad es muy valiosa, pero lo siento, no tengo la habilidad de creer incondicionalmente en algo.