—Quería hablar sobre esas fotos.
—Eh, joven señora, no quiero que se lo tome a mal, pero usted no trabajo en la industria. Dudo que pueda ayudar mucho.
El director Wang era un hombre obstinado y no confiaba en el gusto de Huo Mian.
—¿Qué le parece esto? Yo hablaré y usted escucha. Si me equivoco, siéntase libre de señalarlo. Si estoy en lo correcto, por favor tome mis palabras como una sugerencia.
—De acuerdo.
El director Wang se sentó frente a la computadora, aún no convencido del todo.
Huo Mian se aproximó también. Ella señaló un conjunto de fotografías y dijo: —Observé estas fotos cuidadosamente. Probablemente está pensando lo mismo que yo. Las fotos se ven muy profesionales, tienen una excelente iluminación y los ángulos son buenos. Sus poses y expresiones son perfectas, pero algo no está bien, ¿no?
—Sí, he estado luchando con esto también.