En un día común y corriente nuestro protagonista, Izuku Midoriya, fue victima de ser transportado a otro mundo, junto a varias personas conocidas. Al pasar varios años, finalmente pudieron regresar, no sin haber hecho enfurecer a los dioses. Para su sorpresa, solamente habían pasado 10 minutos durante su ausencia. Dando como resultado a situaciones incomodas en su llegada.