—¡An, uno más por venir! —grawerrrrr!!
—¡Suenas tan repugnante como te ves! —gritó Blake mientras se preparaba para el ataque. El unicornio era rápido como un relámpago cuando se estrelló contra Blake, enviándolo volando solo por el impacto.
—¡Mierda! —Blake clavó su espada en el suelo mientras intentaba frenarse, pero no parecía que el unicornio fuera a dejarlo ir tan fácilmente, ya que se estrelló contra él otra vez, esta vez su cuerno atravesando su hombro—. ¡Cometiste un error pinchándome con tu mierda! —Blake apretó los dientes mientras golpeaba con su espada al unicornio, pero justo antes de que la espada estuviera a punto de apuñalar su cuello, el unicornio de repente desapareció, y Blake rodó por el suelo antes de chocar contra un árbol.
—Grawerrrrr!!