—Chelsea, no bromees. No estoy acostumbrado a que él me llame tía. ¡Llámame como quieras! —Yuna tomó la iniciativa de ayudar a Connor.
—Está bien entonces, Connor. Puedes llamarla como quieras, pero asegúrate de llamarme Tía Chelsea… —Chelsea respondió inexpresivamente, luego le preguntó a Connor—. ¿Cuándo comenzará la ceremonia de corte de la cinta? ¿Vas a invitarme a ser la invitada en la ceremonia de corte de la cinta?
—Está a punto de empezar. ¡Ve y prepárate! —Connor respondió.
—¡Está bien, Yuna también será invitada en la ceremonia de corte de la cinta! —Chelsea dijo.
—Sin problema… —Connor accedió apresuradamente.
Sabía muy claramente que aunque Chelsea no reveló directamente la identidad de Yuna, ya que ella la había traído, significaba que Yuna definitivamente no era una persona ordinaria. Chelsea definitivamente tenía sus propias intenciones al hacer esto.
En cuanto Chelsea se fue, Vanessa se acercó al lado de Connor y le susurró: