Punto de vista de Kelly
Olisqueé y traté de calmarme cuando sentí la presencia de Klay detrás de mí. Miré hacia abajo y me sequé las mejillas húmedas, evitando el contacto visual con él a través del espejo.
—No tienes que esconderme nada, Kelly. —Cerré los ojos con fuerza y apreté mi agarre en el lavabo. Sentí que Klay sostenía mi cintura y me hacía enfrentarlo. Abrí los ojos cuando él suavemente sujetó mis mejillas, secando mis lágrimas.
—No te merece. —Mordiendo mi labio inferior, encontré sus ojos.
—Quiero olvidarlo, Klay. He estado intentando, pero creo que solo me engaño a mí misma. —Él presionó su frente contra la mía mientras nuestras miradas se encontraban. Por un momento, quedé congelada por lo que hizo. El hombre más frío que jamás he conocido acababa de mostrar simpatía. No sé qué hacer.