Chapitre 36: El frío que congela los huesos

-En un edificio al norte del campus universitario, cuarto piso.

Este lugar era utilizado anteriormente como sala de reuniones importante por los profesores y directores de la universidad, por lo tanto, la decoración era bastante elegante, las ventanas de vidrio tenían casi dos metros de altura, lo que proporcionaba una hermosa vista desde el cuarto piso hacia el exterior. Sin embargo, aunque la vista era hermosa, el peligro también era alto porque, en este nuevo mundo, ese tipo de lugar sin protección no era un buen lugar para quedarse mucho tiempo.

Un joven de unos 21 o 22 años con un rostro bastante guapo y un cuerpo muy en forma estaba sentado en una silla de cuero mientras bebía un vaso de whisky.

Aunque los estudiantes no tenían permitido beber alcohol en el recinto universitario, independientemente de su edad, los profesores tenían sus propios suministros, por lo que fue fácil para él encontrar varias botellas.