Chapitre 27: Capítulo 27: Hierro del Inframundo

Éditeur: Nyoi-Bo Studio

Probablemente fuese el plano más rápido y eficiente de conquistar en toda la Era de Colonización de Planos. Los jóvenes magos usaron un buque de guerra mágico desgastado y solo les llevó tres meses conquistar el plano entero.

Eso no era sorprendente, ya que el nivel del Plano Óseo era muy bajo. La criatura más poderosa era un Dragón de Hueso. El buque de guerra mágico raído eliminó al dragón de la existencia con una sola ronda de ataque.

Los tres jóvenes magos se valieron de su conquista milagrosa para obtener el favoritismo de los superiores de la Torre de Marfil y convertirse en miembros cruciales de esa poderosa fuerza. Después de décadas de esfuerzo, entraron al consejo de la Torre de Marfil y se consagraron como figuras emblemáticas.

Había montones de historias parecidas en esa época, pero lo que sucedió después de ella era la parte más importante. Lin Yun recordó que después de que la Torre de Marfil obtuviera el Plano Óseo, se elevó como una de las siete fuerzas principales de Noscent. No solo controló las Tierras Altas Oscuras durante un milenio, sino que un Mago nivel Celestial provino de él, Bane.

Además, Bane poseía una herramienta mágica extraordinaria, el renombrado Libro de la Muerte.

A pesar de que la Torre de Marfil jamás reveló la razón de su rápido ascenso, un observador astuto podría suponer que estaba relacionado al descubrimiento del plano Óseo. La Torre de Marfil había sido suprimida por el Consejo de Cáucaso por varios milenios antes del hallazgo de los tres jóvenes magos. Era un secreto público de la época.

Seguido al ascenso de la Torre de Marfil, la recompensa del Plano Óseo se diseminó gradualmente por todo Noscent. Mucha gente estaba echándole el ojo a esa tierra fértil negra. La Torre de Marfil posicionó escuadrones mágicos que ejecutaban grandes cantidades de invasores a diario. La tentación de la posibilidad de grandes riquezas provocaba las incesantes oleadas de intrusos. Esta situación se sostuvo hasta que el maná de Noscent se agotara y los grandes magos cayeran, uno tras otro y la Torre de Marfil se desvaneciera. En cuanto a esa fértil tierra negra, finalmente recuperó su calma.

Por supuesto, eso aún no pasaría.

Esos tres magos se toparon con las coordenadas hacia el plano más de 10 000 años más tarde. Pero Lin Yun ya había puesto un pie en este plano fértil utilizando el sendero interdimensional de Locke Merlin. Y eso significaba que la Torre de Marfil quizás no controlaría las Tierras Altas Oscuras por más de un milenio y el mago Celestial Bane no tendría su herramienta mágica extraordinaria, el Libro de la Muerte.

Encontrar el Plano Óseo tan pronto en esta línea de tiempo era un serio problema.

La conquista sería extremadamente difícil.

Cuando esos tres magos lo descubrieron, fueron capaces de conquistarlo en tres meses porque poseían una nave de guerra mágica.

Aunque estuviera avejentado, era un buque de guerra mágico.

Al valerse de su poder, los tres magos pudieron conquistar el Plano Óseo con facilidad, deshaciéndose del habitante más poderoso con una salva. Pero Lin Yun no podía hacerlo. La Era de Colonización de Planos acababa de comenzar y aunque las naves de guerra ya habían sido creadas, distaban de tener su poder destructivo futuro.

Además, las naves actuales estaban en manos de las fuerzas más poderosos. Incluso si estas naves fueran tan poderosas ahora, como lo serían eventualmente en el futuro, una no caería en manos de Lin Yun.

Solo podía valerse por sí mismo.

Las buenas noticias eran que, todavía tenía mucho tiempo.

Si todo seguía el curso original de la historia, pasarían más de 10 000 años hasta que los jóvenes magos de la Torre de Marfil encontrasen accidentalmente las coordenadas hacia el Plano Óseo. Tenía suficiente tiempo para mejorar su fuerza. Una vez que alcanzara el punto de ser capaz de enfrentarse a un Dragón de Hueso, la conquista del plano sería inminente.

Y antes de que fuera lo suficientemente fuerte, debía mantener un perfil bajo.

El Plano Óseo no era algo imposible de explorar, pero una vez allí, debía mantenerse alerta. Esta tierra fértil estaba repleta de peligros para el actual Lin Yun.

Si más de diez esqueletos guerreros apareciesen al mismo tiempo, sería difícil mantenerlos a raya, sin mencionar el Demonio de Huesos durmiente. Su existencia se acercaba al nivel de un Alto Mago. Para alguien que poseía el poder de un mago nivel 9, si se topara con él, su única opción sería huir.

Por lo tanto, incluso si la tierra negra bajo sus pies parecía infinita, el área que Lin Yun podía explorar era una pequeña parcela cerca del sendero interdimensional. Solo allí estaría a salvo. Si encontraba algo con lo que no pudiese lidiar, podría huir rápidamente.

Lin Yun estaba explorando esa misma área en ese momento. En algunos minutos, Lin Yun se enfrentó a más de veinte esqueleto guerreros, que produjeron cuatro Esencias No-muertas.

«Esta sí que es una tierra fértil...» Encontrar cuatro esencias era equivalente a tener cuatro herramientas mágicas Excelentes y solo le tomó un poco más de diez minutos obtenerlas.

Su tiempo se estaba agotando. Los tres diamantes mágicos Abisales en el arreglo de alquimia serían capaces de mantener el sendero interdimensional abierto por alrededor de media hora. Luego de lidiar con esos esqueletos, debía emprender su regreso, para tener un margen de seguridad.

Debía esperar a la próxima vez si quería hacer esto de nuevo.

Lin Yun no perdió el tiempo y puso las cuatro esencias de no-muertos en su bolsillo y comenzó a recitar el encantamiento para irse. Pero de repente, vio una luz brillante encenderse a unos cien metros de él.

—¿Eh...?

Le tentó la curiosidad. Este era el Plano Óseo, en un mundo hecho de tierra negra y huesos escabrosos, era inusual ver una luz prenderse así.

Canceló su encantamiento para abrir la salida y envió un Ojo de Mago, manteniéndolo cerca del suelo.

Lin Yun estaba estupefacto.

A través del Ojo de Mago, pudo ver como varios esqueletos guerreros rodeaban esa luz. Cientos de ellos al menos. Montones de ojos encendidos, un bosque de huesos. Les daba un aura incluso más horrorosa.

Estaban rodeando un objeto de cientos de metros de largo. Era una vena de Hierro del Inframundo. A primera vista, se veía como una gigante pitón negra, hibernando, emitiendo una intensa aura de muerte. Había una capa de niebla cubriéndola, que tapaba la luna sangrienta e impedía la visión de Lin Yun. Al punto que estaba a un par de cientos de metros y no había visto la veta de hierro.

Hasta ahora, había visto esa luz parpadeante por accidente y lo había dejado completamente sorprendido.

Una veta de Hierro del Inframundo de cientos de metros de largo expuesta en la superficie. Nadie le creería si lo contara. Normalmente, el Hierro del Inframundo solo podía ser encontrado bajo tierra e incluso ahí, eran solo escasos trozos. Lin Yun jamás había oído sobre una veta de tal tamaño.

Era muy aterrador.

Después de todo, las Armas Mágicas forjadas con ese hierro poseerían el poder de la Muerte Congelada. Si estuvieran en el mercado, se venderían por unas decenas de miles de unidades de oro. Además, este hierro solía estar acompañado de toda clase de gemas mágicas preciosas. Esas gemas mágicas valían más que el hierro en sí. El diamante mágico Abisal era una de esas gemas.

«Una vena tan larga de Hierro del Inframundo, sería suficiente para acorazar a 10 000 personas».

Después de verlo todo a través del Ojo de Mago, no estaba en ningún apuro por acercarse. En su lugar, se acercó a una ropa y se mantuvo cuidadosamente oculto. Había cientos de esqueletos guerreros al lado de la vena. Si los alertaba, moriría al instante. Sin mencionar al Demonio de Huesos durmiente, que definitivamente no sería muy amigable.

Abrirse camino directamente no era opción. Con tantos esqueletos guerreros y un Demonio de Huesos que podía despertar en cualquier momento, necesitaría al menos la fuerza de un Alto Mago para enfrentarlos y él era solo un mago nivel 9. Avanzar sería simplemente una misión suicida.

Pero por supuesto, eso no significaba que no había nada que pudiera hacer.

Lin Yun se escondió tras una roca y lo pensó mientras dejaba salir otro Ojo de Mago. Pero esta vez, envió al ojo cerca de la vena de Hierro del Inframundo, antes de renunciar a su control. A su vez, lo llenó de una gran cantidad de maná, provocando que se viera muy extraño.

Definitivamente ya no estaba bajo el control directo de Lin Yun, pero gracias al soporte del maná residual, era capaz de mantenerse allí por mucho tiempo.

Por supuesto, su existencia no era muy significante. Ya que no era posible ver a través de él una vez que la conexión fue cortada. El Ojo de Mago flotando sobre la mina de hierro era en realidad, un objetivo.

Su único propósito era proveer una luz tenue para usar como punto de referencia.

Eso era exactamente lo que Lin Yun necesitaba.

Después de plantar el ojo, se colocó frente a la roca y comenzó a recitar un encantamiento largo y tedioso. A medida que su remolino de maná giraba, una Bola de Fuego salió volando de sus manos.

La Bola de Fuego dejó un flamante rastro mientras volaba cientos de metros hacia adelante, hasta llegar sobre la vena de hierro en un santiamén. Casi al mismo tiempo, Lin Yun pronunció la última palabra.

Un «bang» resonó, con un eco agudo y la enorme bola de fuego explotó, creando un infierno llameante en el cielo.

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