POV Rei Blaze
"¿Ya casi terminas con tu prototipo de espada sagrada?", preguntó Valerie al verme realizando los últimos ajustes al material para realizar la versión de Kaldiras de este mundo.
"Si y no es un prototipo, va a ser una espada en igualdad de condiciones a Excalibur", respondí en tono orgulloso.
"Sí, si lo que digas", comentó Valerie sin poder creerme.
Todo se debe a que desde que llegamos a Italia hace tres meses, hemos tenido tiempo de aprender más sobre el mundo sobrenatural y ella no tiene fe en que pueda crear una espada igual a Excalibur debido a que nadie en siglos lo ha logrado.
Pero ella no conoce las locas habilidades de Davey para forjar espadas, ese tipo estaba a otro nivel comparado con los herreros de este mundo; de ahí viene mi confianza.
"¿El corredor te dio alguna información nueva?", hablé dejando mis pensamientos internos de lado.
"Sí, aunque la información era un poco ambigua", comentó Valerie con algo de confusión en su rostro.
"¿Qué es?", pregunté algo interesado en el comportamiento inseguro de la chica frente a mí.
"Él me habló de algo llamado proyecto espada sagrada, aparentemente la iglesia está llevando algunos experimentos en secreto", respondió Valerie.
¿Ese no es el proyecto donde estaba Kiba?, si voy ahora podría salvar a esos chicos, hasta puede que consiga materiales para forjar, pensé para mis adentros mientras detenía todas mis acciones y miraba al Dhampir.
"¿Que otra información te dio?", replique en tono serio.
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Después de comprar toda la información que tenía el corredor sobre el proyecto espada sagrada, Junto con Valerie nos movimos hacia donde aparentemente se estaban llevando a cabo los experimentos.
Una fortaleza en la región de Sicilia, la cual estaba cubierta por varias capas de hechizos inhibidores de percepción, para que la gente normal no se acercara.
Así como múltiples puestos de guardia, que deberían estar funcionando; sin embargo, todo estaba extrañamente en desorden y sin nadie vigilando.
Aun así se podía ver gente vestida con túnicas religiosas dentro, parecían estar apuradas empacando sus cosas para moverse pronto.
"Parece que llegamos tarde", susurré en todo sombrío.
Si las personas que llevaron a cabo este experimento están corriendo así, significa que ya los descubrieron y hace ya mucho tiempo que los sujetos experimentales fueron asesinados.
Apreté mis puños y me puse un antifaz negro que me cubría los ojos, la función de este artefacto mágico es simple, hace que mi rostro se vea distorsionado, así nadie me reconocerá.
Valerie a mi lado entendiendo mis intenciones hizo lo mismo y se colocó su máscara, mientras comenzamos a descender.
Cuando caímos justo en medio de las personas que corrían de un lado a otro, todo el lugar quedó en silencio, las expresiones rígidas de los investigadores, fueron un deleite para mí porque merecían lo que les iba a pasar.
"Enuma Elish", hablé en tono casi inaudible.
Con esas palabras, cientos de cadenas plateadas emergieron del suelo y apresaron a las personas en el pasillo.
Enseguida, Valerie utilizo su niebla, para crear ilusiones en la mente de los sacerdotes y así sacar toda la información que tuvieran.
"Rui, los sujetos de prueba fueron asesinados hace seis meses, pero aparentemente hay un superviviente del proyecto; sin embargo, parece estar sellado en su propio sacred gear", hablo ella en tono sorprendido.
¿Había alguien así en la historia original?, creo que sí, pero no tengo toda la información de la novela en mi cabeza.
"Haaaah, probablemente la sacred gear se activó para proteger a su portador; sin embargo, parece no poder controlarlo, ¿Sabes dónde lo tienen?", replique luego de suspirar.
"Está en los pisos inferiores del sótano", replicó Valerie.
"Ya veo, bajemos entonces", hablé mientras ordenaba a las cadenas que atravesaran los puntos vitales de los investigadores de la iglesia.
En el camino pude encontrar a muchas personas, que estuvieron involucradas en el proyecto, las cuales mate sin remordimiento alguno.
Eran bastardos que habían abandonado su credo y su fe, mientras herían a gente inocente y ni siquiera sentían la más mínima culpa, no merecían vivir, ni tampoco pensaba darles la oportunidad de herir a alguien más.
"¿Por qué?, ¿por qué están aquí?; se supone que tendríamos más tiempo", escuché una voz errática y frustrada en la habitación del fondo, donde se suponía que estaba el último superviviente del proyecto espada sagrada.
"Tienes razón, las personas de la iglesia llegarán en medio día como máximo", comenté atrayendo su atención.
Entre caminando lentamente en su dirección y volví a hablar en tono frío, "¿dónde están los fragmentos de luz que extrajiste de ellos?".
"¿Un niño?, tú no eres de la iglesia, ¿a qué organización perteneces?", respondió Valper Galilei.
Sin un segundo de retraso, aceleré con mi cuerpo envuelto en una aura de Touki y golpeé al sacerdote excomulgado en la cara.
"Crag", se escucharon sonidos de huesos rotos.
"Boom", resonó después de que Valper se estrellara contra las paredes del cuarto.
"No lo repetiré una segunda vez", hablé mirando de reojo una esfera completamente blanca que flotaba en medio de la habitación.
Al mismo tiempo, un círculo mágico apareció en mi oído y escuché un mensaje de Valerie, "Rei, ya recolecté todos los materiales de los laboratorios de las dos plantas superiores".
"¿Encontraste algo inusual?", replique.
"Había algunos elementos inquietantes, pero es mejor que los revises tú mismo", respondió ella.
"Sobrevuela la fortaleza y avísame si alguien viene, por favor", comenté.
"Está bien, ten cuidado ahí abajo", hablo Valerie en tono protector.
"Lo haré, no te preocupes", respondí cortando la comunicación.
"Maldito mocoso, ¡cof!, ¡cof!, ¡cof!", hablo el arzobispo con respiraciones ahogadas.
Me acerqué nuevamente exhibiendo una velocidad aterradora, para alguien de doce años, y estrellé su cara contra el suelo, mientras colocaba mi rodilla contra su espalda.
Comencé a revisar cada uno de los bolsillos del sacerdote en busca del cristal, que contenía los fragmentos de luz con las almas de los sujetos experimentales del proyecto espada sagrada.
Si no me apuraba en cualquier momento llegarían exorcistas de la iglesia, así que fui exhaustivo en la búsqueda.
Finalmente, los encontré dentro de su bata, "Maldito", escuché los susurros ahogados del arzobispo excomulgado.
Me levanté y me gire en dirección del sobreviviente del proyecto que estaba sellado en su propia sacred gear, luego active las cadenas del cielo, para matar al sacerdote detrás de mí.
Sin embargo, antes de que las cadenas pudieran llegar a él, sentí una fluctuación de energía sagrada muy poderosa, lo que me obligó a girar rápidamente con cautela visible en mi rostro.
"Llegas tarde", hablo Valper, al ver en la dirección del creyente blasfemo, note un círculo mágico debajo de él, que lo teletransportó en un instante de la habitación.
Mi mirada se volvió sombría y apreté los puños debido a qué alguien había sacado a la maldita rata aquí, ha juzgar por el aura sagrada, pero fría que emitía el círculo, debió ser un caído y uno muy fuerte.
"Grigori", susurré con voz fría.
"Fuhhh, ahora no tenemos tiempo para eso", exhale un suspiro mientras esta vez dirigía las cadenas del cielo en dirección a la esfera blanca.
Las cadenas del cielo eran una construcción divina que podía retener cosas, en teoría anula o reduce el poder de un individuo esa es la idea que obtuve luego de usarla en múltiples ocasiones.
Si bien entre más fuerte es el individuo, menos efectiva es esta característica, es claro que tiene la propiedad de anular poderes hasta cierto punto.
Eso me lleva a un razonamiento simple, voy a perforar la barrera y luego voy a retener su poder con las cadenas que rompan la defensa.
Con esa idea en mente, una docena de cadenas se extendieron alrededor de la esfera, apuntando con su lado puntiagudo, concentré toda la energía qué pude y di rienda suelta a todo el poder que podían ejercer en este momento.
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POV Tosca
Poco a poco sentí que algo me estaba llamando, despertándome de un largo sueño en el que estuve inmersa.
Lo primero en invadir mis sentidos fue un delicioso olor a comida, no sabía que era, pero podía decir que su sabor era definitivamente delicioso.
Lo siguiente que sentí fueron los rayos de sol tocando mi piel, me tocaban como una cobija que calentaba mi cuerpo dándome una dulce sensación de paz y tranquilidad.
Siguiendo mis instintos quise acurrucarme aún más, sin embargo, de repente unos horribles recuerdos invadieron mi mente.
"Corre Isaiah", grite con fuerza mientras el gas comenzaba a inundar mis pulmones y todos mis compañeros comenzaban a caer uno por uno.
Todos fuimos utilizados como nada más que objetos consumibles y en el momento en que dejamos de ser útiles fuimos desechados.
Estaba furiosa por los crueles actos inhumanos realizados por las personas frente a nosotros, pero al mismo tiempo estaba profundamente herida, nuestro sueño de servir al señor, ser especiales, ayudar a la gente; todo se había destruido en segundos.
Todo lo que anhelamos fue completamente destruido frente a nuestras narices, si alguna vez renazco no volveré a creer en razones tan absurdas, como las de los sacerdotes que nos engañaron.
Pensé para mis adentros profundamente herida y destrozada por la triste realidad desoladora frente a mí.
Luego de eso sentí humedad en mi rostro proveniente de mis ojos recorriendo mis mejillas, lo cual me despertó de la pesadilla y la inconsciencia.
Abrí lentamente mis ojos y vi un techo desconocido, me levanté algo asustada al no poder reconocer donde me encontraba, así que observé más atentamente la habitación, hasta que mi mirada se encontró con la de una chica rubia de unos quince años, ella estaba acariciando el cabello de un chico que tenía la cabeza en su regazo mientras dormía.
Se veían como dos personas extremadamente cercanas, que se confiaban su vida, lo cual me hizo sentir extrañamente agradable por dentro.
"¿Cómo te sientes?", preguntó la chica en tono bajo, mientras dejaba la cabeza del chico encima de un cojín que estaba sobre los muebles y se paraba para verme de cerca.
"Estoy bien, ¿En dónde estamos?", pregunte en tono confuso.
"Estamos en una cabaña, en medio del bosque de Stelvio en Italia, es una zona apartada, por lo que es muy tranquilo", respondió la chica mientras servía un vaso de algún tipo de bebida fría.
"¿Ustedes están con la iglesia?", cuestioné en tono brusco.
"No, de hecho te sacamos de las instalaciones donde te tenían, toma bebé un poco", hablo la chica ofreciéndose un vaso de lo que parecía jugo de naranja.
Al escuchar la palabra instalación, no pude evitar estremecerme y al mismo tiempo llenarme de anhelo.
"¿Hay alguien más aparte de mí?", hablé con voz esperanzada.
"Nosotros te encontramos hace una semana en una base de la iglesia, en la región de Sicilia, aparte de ti no pudimos encontrar a nadie más", replicó ella en tono pesado.
"El nombre de ella es Valerie, él mío es Rei, ¿puedo saber cuál es tu nombre?", escuché al chico que aparentemente había estado dormido, preguntándome con voz somnolienta.
"Oh, disculpen, no me he presentado, mi nombre es Tosca", hablé en el tono más optimista que pude reunir.
"Tosca, en un bonito nombre", murmuró el chico mientras se frotaba los ojos y se acercaba a mi lado.
"¿Gracias?", comenté en tono dudoso.
El chico se sentó al lado de la cama donde estaba recostada y me dio una mirada algo compasiva.
"¿Señorita Tosca, a dónde piensa que estamos afiliados?", preguntó el chico llamado Rei mientras se señalaba a sí mismo y a la chica rubia que aparentemente se llamaba Valerie.
"Mmm, la señorita Valerie me dijo que no pertenecen a la iglesia, así que tal vez, ¿alguna facción humana de héroes?", comenté viendo lo atractivos que eran los rostros de las personas frente a mí.
"Me halaga que pueda pensar de esa manera, pero nosotros somos algo más cercano a huérfanos sin afiliación a ninguna organización, Valerie es un Dhampir con un sacred gear y yo soy un humano también con un sacred gear, nosotros escapamos del país de los vampiros hace unos diez meses más o menos", comentó el chico como si estuviera rememorando recuerdos complicados.
"Rei era parte de las personas que habían raptado los vampiros para saciar su sed, yo por mi parte era un media sangre que estaba siendo utilizado para fines bélicos, cuando nos encontramos por primera vez ambos teníamos el objetivo común de escapar, por lo tanto, decidimos hacer un intento desesperado hace cuatro meses llegamos con Rui a Italia y desde entonces nos refugiamos aquí", estaba vez hablo Valerie mirándome intentando determinar cuál sería mi reacción.
Le di una mirada algo extraño, debido a que note un ligero temblor en su cuerpo, ¿Está asustada?, inconscientemente dirigí mi atención a sus ojos y note una ligera vacilación.
Como si estuviera esperando algo que podría ser muy importante para ella, pero no podía entender que, sacándome de mis pensamientos, nuevamente escuché la voz del chico.
"Hace diez días, por medio de un corredor de información nos enteramos de que la iglesia estaba llevando a cabo unos experimentos en secreto en la región de Sicilia, queríamos saber exactamente qué estaban haciendo y cuando llegamos descubrimos algunas cosas desagradables como los experimentos que pasaron tú y tus compañeros, podemos hablar del tema ahora, pero me parece mejor que primero comas algo, después de todo estabas envenenada cuando te encontramos", hablo el chico en tono solemne pero amable.