—Luo vertió un poco de agua en su vaso y dijo: «Toma, bebe esto. ¿Por qué te imaginas algo que es tan imposible que ocurra? Entonces dime, ¿me compraste ropa o no?».
—Noah la miró con sus ardientes ojos y dijo con despreocupación: «Bueno, no me molesta que uses mi ropa cuando estás aquí. Parece que te encanta llevar mi camisa y pantalones cortos, aunque no sean lo suficientemente cómodos».
—«Bueno, no estoy cómoda usando la ropa de otra persona tan a menudo y además sin... Solo dime si compraste mi ropa o no».
—Luo lo miró a los ojos y, dejando de lado su vergüenza, le dijo: «¿O es que tienes algunos pensamientos pervertidos y quieres verme con tu ropa cada vez que vengo aquí?».