Neutro. Compañera de trabajo. Ciber. Dos fracasados, mas todos nosotros. Iris y su temor. Las figuras.
Nos piden que busquemos fracasados, ¿Sin embargo si estamos nosotros para ello?
- A ver si comprendí? – Reformulé la pregunta masajeándome la cien con los dedos de ambas manos – Tú,...si tú...¿Eres mi compañera de trabajo?
- Es simple. Como no me esperaste. Edgardo me hizo unas preguntas y quería salir a tomar una cerveza. Le dije que en otro momento. Y no estabas. Recordé el nombre del ciber que Alan mencionó que frecuenta y fui directo. Había una marcha por lo que tomé un atajo simple.
- Conozco todos los atajos..Bueno no importa
- Déjame concluir. Mientras revisaba donde quedaba el sitio, estaba el aviso de se busca empleado-atención al público. Cuando llegué Horacio estaba fuera. Envié mi curriculum de camino al Ciber. Y él lo recibió por móvil. Y retomando. Ingresé, pregunté. Mi perfil le pareció agradable. Y ahora soy tu nueva compañera. ¿Así que éste es el sitio que frecuenta Alan? Se llena de muchos Gamers. ¿No?
- See..- Fui a la mesa de maquinas – ahora Pandora es mi compañera de trabajo. ! Agradable noticia! Solo dos días de conocerla. O mejor dicho no querer conocerla.
- ¿A qué horas suele venir?
- Generalmente es en éste turno. ¿Puedo preguntarte algo?
- !Qué sea algo importante! ¡Por favor!
- ¿Por qué tienes tanto empeño en Alan? Hay muchos hombres y eres una dama linda – Expliqué – Lastima el verdadero carácter – Susurré
Ella se contuvo impoluta cuando le dije linda. Y colocó un rostro de vergüenza.
- ¿Alguna vez te has enamorado?
- Nop..que yo sepa
- Es difícil. Pero el amor te produce n sentimiento increíble sobre esa persona a la cual encuentras. Y no existe más nada alrededor que ella. A Alan lo conozco desde hace tiempo. Unos años en la secundaria. Pero siempre por vergüenza tuve un contacto efímero. Luego de tiempo me propuse conocerlo más. Por casualidad Marín mi amiga también lo conoció, sin embargo supongo que ella es más valiente.
- ¿O sea que el amor te vuelve estúpido?
El rostro de Pandora se volvió como una máscara demoniaca, a punto de estallar.
- ¿Me llamaste qué?
- Aguarda! – Coloqué mis manos para pausar la situación – Lo exprese literalmente hablando. Genéricamente.
- Bueno en ese sentido. ¿Comenzamos a trabajar?
- No empiezas mañana
- Me quedaré. Ya que estoy aquí
- Genial! – Confesé con ironía. No tenía muchas opciones más que aguantarme los reproches y problemas psicológicos de Pandora.
A medida que se iban sucediendo las horas ella se adaptaba con las tareas laborales. El ciber se compone de dos pisos con maquinas con su respectivo CPU dentro de cubículos para los que deseen privacidad. Pueden ordenar comida y estar hasta altas horas como si fueran a vivir. De hecho algunos alquilan el espacio y van y trabajar y regresan. Está destinado aquellos a los cuales la vida les pegó duro por una u otra razón. Aquí como en cualquier parte podíamos ver innumerables facciones de fracasos.
Tenía uno en vista, pero Pandora lo detectó primero.
- Encontré – Nos dijimos en coordinación – Un fracasado.
- Yo lo vi primero.
- Dedícate a trabajar es tu primer día.
- No seas molesto. Puedo hacer las dos cosas
- ¿Ah sí? ¿Y la orden de pizza que te pidieron?
- !!Ay!! Se me olvidó completamente
- !Je je! – Sonreí de manera malévola
Nuestro fracaso era William. Unos veinticinco años, metro setenta. Trabaja en una tienda de celulares. Su novia lo abandonó hace poco tiempo. No tiene familiares que se le conozcan el ciudad. Su semblante data de una perdona mayor. Eso significa estres, angustia...desesperanza.
Claro que sabemos estos datos, debido a la información que proveen cuando alquilan ese mini cuarto con computadora. El problema no es tanto laboral, lo que puede que sea amoroso. ¿No sabemos de hecho el por qué de alquilar un sucucho reducido? Cuando podría entrar en un departamento con las condiciones dignas que requiere un ser humano.
- !Mensaje en mi móvil! Un emoji de un rostro molesto. Y la palabra "Te odio"
- !Veo que te aman! - me expresa alguien detrás de mí dando un susto terrible
- Ahhhh – Me di la vuelta era Pandora
- !No seas ridículo! – Expresa ella, tampoco es que hayas visto un monstruo
- Como si no lo fueras!!! ¿Por qué husmeas detrás?
- Te estaba llamando y estabas inmerso en tu público que mucho no te quiere.
- ¿No sé quién es?
- No me importa. La maquina dos se ha apagado.
- Es solo encenderla
- Eres muy agradable. Resulta que tiene un corto circuito.
- ¡Nunca ha pasado en añares!
- ¡Bueno hoy paso.!
- Ya iré..Derívalo a otra máquina del piso Dos.
- Eso me agrada de tí..El tomar buenas decisiones.
- Me da un poco de miedo esas palabras de alago –Coloque un rostro insulso
- Viniendo de mí, por el aprecio que te tengo es un verdadero cumplido.
-¡Gracias! Lo anotaré en mi registro de momentos sublimes de mi vida. – Expresé con sarcasmo. -
- Debe ser el único – Me lo devuelve Pandora.
- Ya vete! – Tomé mi celular. – Otro mensaje por cierto soy yo Minerva. ¿Y los libros? Lo de te odio fue por lo de la biblioteca y porque seguro no tienes los libros – Esta mujer es una adivina. – No..estoy en el trabajo.....
- ¿mañana?
- No vas a esperarme como un fantasma
- ¡Quiero los libros!
- Oye tengo un fracasado
- ¿En serio? Yo tengo otro. Mi amor de la biblioteca. -
- ¡Es un fracasado!
- Posiblemente.
- ¿Lo conoces?
- ¡No!..Pero el no estar a mi lado lo hace fracasado.
- No seas tonta..En serio..
- En serio te digo.. Presiento que podría ser un caso.
- Tiene que haber características
- ¡Bien dicho!..Camarada..Ahí entras tu a conocerlo y tu servidora y cautivadora intelectual.
- Sabía que tendría una trampa todo este manifiesto.
- Mañana arrancaremos la operación. Es como que me siento emocionada.
- ¡Wow! - Y coloqué un emoji de sueño en el chat de móvil. -
Otro mensaje.
- ¿iris?
- ¿Tienes un tiempo para platicar luego?
- ¿No será el tonto del novio, amigovio, o lo que fuere no? – Me dije.
- Después – Accedí.
- ¡¡¡Graciasss Gasparín!!! – Y coloca un emoji de un fantasma. Horrible para mi gusto.
Luego de la jornada me fui a cambiar. Venían otros dos compañeros para el turno nocturno. Pandora estaba, semi recostada en una silla apoyándose en la mesa
- !Me duele todo!
- ¡Deja de quejarte! Fue solo un primer día
Ella mirando a la base de la mesa, apenas con algunas fuerzas levantó la mano.
- No tengo fuerzas siquiera para regañarte – ¡¡Auch!! - se queja
- ¡Vaya floja! – Confesé – ¡¡Bien!!..Ésta bella anatomía se retira
- ¿Te vas? ¿Y me dejas aquí?
- ¿Eh? Ya tuve que aguantarte todo el día
- Eres despreciable..Mañana me encargaré de ti.
- Si..si...muchas palabras..Pocos hechos. Adiós.
- Gaspar..Linda compañera. ¿Es tu novia? – Le dice quien cubre el puesto de trabajo de turno. -
- ¡Para nada! – Y me fui
- ¡¡Mmm!!..Hola soy tu compañero nocturno – Expresa lio
- ¡Ah! ¡Qué satisfactorio!.- Dijo con poco ánimo –
- ¿Te quedas y platicamos?
- Es que debo retirarme
- Pero..
- Este tonto de Gaspar me dejó a solas con ese no sé quién ..¡¡Ya verá!!
- ¿Te pasa algo? Oigo unos susurros. -
- No.. no – Sonríe dulcemente – Debo irme.. Adiós. – Se retira rápidamente
Cruce por la avenida al metro. Mi móvil sonaba sin parar. Al atender una voz fina y meticulosa
- ¡¡¡Gasparín!!!
El grito me cortó la audición. Lo que produjo el desvarió y alejamiento del aparato de mi oído con cierta asquedad.
- ¡¡Cuidadoo!! Me vas a dejar sordo – Le grité
- No seas así Gaspi.
- ¿Qué quieres? Si es de Octa, Octavio, Octogenario o lo que sea. No pienso escucharte.
- No es eso tonto..Es otro el problema.
- ¿Cual? ¿Te preocupan las ballenas? ¿Te quieres unir a la religión? ¿El mundo esta en tu contra?
- ¡No tontuelo! Es sobre Jonas..
- ¿Qué le pasa? ¿Esta triste? ¿Lo dejo la novia?
- Percibí algo extraño en el.
-¿Cómo qué? - Pregunté extrañado y con curiosidad
- Por empezar me invitó a salir!!
Al escucharla, medité unos valiosos segundos el cortar la llamada y luego me dije. ¡Guarda la calma Gaspar!
-¡¡ Uff! ¿Debe ser un ataque extraterrestre? – Expresé – ¡Qué te inviten a salir!
- ¡¡Gasparínnn!! No te burles
- ¡¡Tu deja de burlarte con semejante tontería!! ¿Qué esconde de raro?
- Es que presentí algo en sus ojos. Un cambio.
- ¿No serán lentes de contacto?
- No ..Estúpido..Como si fueran de otra forma
- ¿Otra forma? Mmmm
- No importa. Pasado mañana quiere verme. Y aparte estamos en el mismo grupo. Quiero que vengas de incognito y vigiles
- De ninguna manera.
- Por favor!!
- No.. Es una locura
- Y si es un maleante? Si me pasa algo?
- Seria un bien a la humanidad
- ¡¡Mal hombre!!
- Gracias por conocerme!
- Si muero, vendré como fantasma y atormentaré
- Ah que miedo
- ¡¡¡Te vigilaré!!!..Veamos..En tu intimidad con tus manos.
- ¡¡Eyyy!!
- ¡¡Porfa!!
- No...….
- Porfaavorrr!!
- ¡¡No!!
- Te prestaré mi colección de libros de Haruki Murakami. -
- ¿Tienes la colección? - Fruncí el ceño - ¿De libros? – Fruncí más el ceño - ¡¡¡¿DE MURAKAMI HARUKI?!!! – Por poco y me quedo sin la ceja derecha. -
- Ciertamente si..Va mi hermana. – ¿Por qué lo dices como si fuera un safio de la lectura? Para tu información. Soy una lectora apasionada. Me encanta la literatura romántica
- ¡No me extraña! – Explayé
- ¡Gracias don sarcasmo!
- ¡Mmmm! ¿Cómo sabes que me gusta?
- ¡¡Soy adivina!!... ¡¡Vamos!! ¡Está en pie la gran oferta!
- ¡¡Naaa!!
-¡¡¡Porfaaaa!!!
- ¡¡Buenoo dios!! ¡¡Tú ganas!!! ¡¡Está bien!!
- ¡¡¡VIVAAAA!!!
Suelta un alarido estrambótico que resuena en todo el subterráneo. Las personas me observan en un sinfín de rostros anonadados por las palabras de una damicela en apuros que quiere que la salve de una cita común y normal con un ser humano normal, pero que ella considera, bueno no quiero ni continuar narrando lo que ella piensa con sus dotes de discernimiento configurados en un papel de inhabilitada social. ¿Tiene ojos extraños? ¿Una total locura?
Al llegar a casa, ya teníamos el segundo día concluido de conocer a tres damas que influyen en mi vida de una manera drástica y eventual.
Quiero los libros de Murakami. Son caros, y no tengo dinero. Para ser sincero, lo tengo pero debo ahorrar por ciertos asuntos.
Antes de regresar a casa pase por el supermercado. Recogí la primera canasta que ví y compre algunas verduras y carne, luego especias, y una máquina de afeitar. Solo eso. Un señora estaba parada firme frente a los potes de dulces de chocolate. Al pasar sobre ella, sentí un escalofrío como si fuera una entidad anómala.
Me dejó un mal sabor de boca, las palabras de Iris con eso de que los ojos de Jonas tenían un aspecto foráneo.
La mujer de una alta edad volteó para observarme. El estremecimiento me tomó por detrás, y al voltearme pude convencerme de una imagen totalmente diferente de la señora. Era como un cumulo de formas oscuras y con dos círculos pequeños color rojo. Al instante alguien apareció a su lado, y pregunto para ella sobre un artículo. Un señor de su misma edad.
Me contuve unos instantes. Mirándolos, ese señor me devolvió su semblante como un agujero negro que quisiera poseerme. En serio, y a todas las letras del terror, que era como si estuviera frente a la posesión del exorcista. Sus caras habían contorsionado de tal expresión que podría asustar a quien quisieran en una noche fría de bufandas y neblina, o de grillos que resuenan por el calor abrumador.
De inmediato. Entre visualizaciones, ella pareció decirle unas palabras, y su puño se cerró con fuerza tensionando la energía. Quería venia hacia mí.
Debo irme de aquí – Me dije ¿Dónde vas fracasado? Acaso piensas huir ¿Y esa voz?
Di la vuelta del pasillo y me escabullí por la góndola de las mercaderías de artículos de limpieza. Las sombras venían hacia mí, y apuré mi marcha. Se supone que siendo una historia de romances frustrados, no debería concluir en un episodio paranormal….
Las sombras se iban agrandando, me di vuelta y estaban justo ahí. Esos dos. Direccioné de posición a la otra góndola de ropa y tope con un estante de sostenes, tropezando de tal manera que todas las prendas cayeron encima de mí. Cuando quería acordarme, tenia de sombrero un talle grande. Solo una parte cubría casi toda mi cabeza. Alguien acercó su mano hacia mí. Temí lo peor. La mano tomo el sujetador de grandes medidas.
¡¡Nooo!! – Explayé con temor – ¿Te ocurre algo? ¡No sabía que eras tan pervertido! ¿Jaa? ¿Minerva? ¿Tu aquí? Es lo normal. Es una sección de mujeres. Había varias damas observando. Algunas con una risita leve.
Eso hizo que me colocará en un color morado en mi rostro por la vergüenza. Pronto me incorporé del suelo.
Estoy aquí de casualidad Si, seguro – Expresa con burla. ¡Vaya! Que te gusta burlarte, ¿Tu? Me iba a llevar justo éste sostén
Era el que tenía en mi cabeza.
¡¡¡JAAA!!! – Me revolqué del asombro No seas un depravado. ¡¡Es mi talla!! Ahora entiendo porque todos los hombres la quieren Es mejor que salgamos de aquí, haces el ridículo. ¡Je! ¿Je! Mira ese hombre ¡Ja! ¿Ja! ¿Si lo viste?
Me asuste por los llamados, y nos largamos directo a la caja
¿Vienes hacer compras? En efecto, quiero cenar algo rápido, e irme a dormir ¿Y mis libros? Ya te los daré – Comenté, en cuanto miraba a todos los alrededores ¿Pasa algo? .no..para nada.. solo estaba distraído ¿? Siento como que algo no está bien en ti Nada está bien en mi Eso lo sé, pero esta vez es diferente, como si hubieras visto un fantasma..¡Ja! ¡Ja Eso no me asusta. ¡Un hombre valiente Ya deja de burlarte, o no te daré los libros, ni te ayudaré con la biblioteca. La biblioteca es parte de nuestro proyecto del club, no lo olvides. Y deja de decir tonterías con los libros. Una promesa debe cumplirse. - ¿Y Por qué exactamente? Porque cumplirla da crédito a tu palabra. De lo contrario ya nadie confiaría en tu persona – Señala con el dedo, en cuanto pasa sus cosas por la cinta de recuento de productos Señorita..¿tiene descuentos de tarjeta? No – Expresa sin mirarlo Supongo que tienes razón – Expresé ante su hipótesis formulada como ciencia de la razón universal, pues ella sostenía con su mirada y manera de expresarse ello. No podía negarme. ¿Qué hermosa que es? Aquí vamos nuevamente con los halagos de hombres desesperados. ¿Y esta con ese cara de sapo? ¡¡EYY!! – Me enfadé, en cuanto pasaba mis productos. ¡Ja! ¡Ja! – ¡Vamos cara de sapo! Guarda silencio, ¡niña de pechos grandes! ¡No seas mal educado!
Al voltearme la pareja de mayores estaban allí frente a la puerta. Sentí el escalofrió. Minerva me hablaba con naturalidad, pero no podía escucharla siquiera, estaba paralizado, ante esas figuras, que se ubicaban al lado de la puerta de salida.
Cruzamos miradas, y ellos se reían. ¡Cara de sapo! Dijo la señora..¡Je! ¡Je!..no te olvidaré. Mi cuerpo tembló con una electricidad que paralizaba mis fuerzas motrices. Pase primero por la puerta, y luego Minerva, que no comprendía lo sucedido.
¡Me estás oyendo! ¡¡¡EYY!!!
Ladee la cabeza un segundo
¡Oh si! Perdona..¿Qué me estabas diciendo? – Expresó enojada -
A decir verdad, me produjo un susto irremediable, y nada encantador.
Minerva se adelantó unos pasos entre un masetero que irrumpía en la vereda al medio de la calle vacía de carros, y con una luminosidad tenue que enfocaba su anatomía con ápices de destello. Delante de ella la luna menguante dejaba ver su rostro, de entre sus lentes.
¿No es preciosa? – Comentó con cierta alegría ¡Calculo que tienes razón!. – Expresé observando por todos lados, mientras nos alejábamos del supermercado. ¡Je! ¡Je! -….Anton decía en unos de sus cuentos… "Tenía miedo deque al volver la cara, la muerte se me apareciera bajo la forma de un fantasma" ¡¿A qué viene eso?! No lo sé..¿Te gusta Anton Chejov, o no? Claro, conozco muy bien el cuento una noche de espanto. Imaginé que temías a algo que fuera inexplicable Para nada, si creo que existe lo inexplicable, lo insólito, e indescriptible Tantos sinónimos me van a marear Lo siento. Lo primordial es buscar una respuesta plausible. Igual tienes miedo a lo desconocido, de lo contrario no observarías tanto .eso es parte de mi desconfianza – No quería decirle que tenía miedo a los fantasmas, y tampoco sobre esas figuras que vi en el mercado. A mí me da miedo a veces las apariencias que se esconden en las personas. ¿En serio? Sera por eso que también no quiero relacionarme con un hombre amorosamente, ni de ninguna otra manera. Ser alguien solitario tiene sus beneficios. ¿Relacionarse no tiene que ver con confiar también? ¿Dónde guardaste ese sentido de que la palabra es la posición de entregarse? En ese sentido tienes razón, y sin embargo el fiarse requiere una cautela. De todas maneras no tiene que ver con una necesidad de confianza, sino de precaución a los alrededores y a las figuras que abundan por la ciudad – Mientras hablaba su rostro se volvía siniestro, empañando sus lentes en la semi luz de la luna del cielo estrellado. Una suerte inmaculada de aprensión retorcía mi corazón. ¡Pero si es una dama fracasada en el amor, como lo soy yo en todos los sentidos, no había inconvenientes. Ambos somos desplazados del mundo, parias de la vida.
Ella dio unos pasos con sus manos detrás y su cabello Violeta se expandía en todas las direcciones como queriendo pertenecer a los sitios y a mí. De alguna manera sentía que Iris y Pandora actuaban idénticamente, por eso discerní que un rompecabezas estaba queriendo formarse y que muchas piezas comenzaban a enlazarse por obra de algo o alguien.
Aprendí a ser diligente, pero tú, Gaspar, me das una confianza innegable en la cual puedo entregarme. Vamos a realizar un buen trabajo – Guiña un ojo con una sonrisa – Bien – Miró su reloj de pulsera - Es hora que me retire – ¡Ve con cuidado! . – Expresé – Haremos un buen trabajo. Por algo somos los mejores fracasados y no es necesario que tenga cuidado al caminar. Hablas con un mayor. ¡Je! ¡Je! Hasta mañana. Que descanses Igual – Al despedirme. Desapareció en la siguiente calle. Ten cuidado – Dijo. Y me fui corriendo en un trote olímpico a mi casa. Cruce la puerta, y luego el ascensor. Y para concluir, mi departamento.
Las figuras, Minerva, el club de los fracasados, Pandora mi compañera de trabajo, Iris que temía de Jonas. Todo estaba muy convulsionado. Muchas situaciones que se iban desarrollando.
Apagué el ordenador. Guardando y cerrando Word…
Neutro y lo indescriptible. Vamos a la biblioteca por nuestra presa. Pandora es una locura cuando aparece Alan. Mas Figuras extrañas.
No quiero ser imprudente, pero el empleo de buscar fracasados, y tener a tres damas que se vuelven locas por sus problemas amorosos, es una tragedia griega que ni Platón o Sócrates podrían comprender.
Otra vez estoy llegando tarde, debería ser más simple el trabajo de poder despertarse una persona que intenta llevar un ciclo arremetido de antemano a su llegada por un sistema social. No digo otra cosa más que quejarme.
Claramente me he quedado dormido, al salir tengo un policía en la puerta. Que digo policía, es Minerva que aguarda leyendo mensajes con su celular. ¿Pero esta mujer, no tiene otra actividad que realizar que esperar a un idiota que se queda dormido?
Hola, buen día. .buen día ¡Qué rostro crudo! Deberías replantearte el descansar y no quedarte mirando pornografía en la Web de internet Arrancar la mañana con esos chasquidos de ánimo son un brebaje especial para continuar el día. ¿Nunca se te paso por la cabeza ser comediante? ¿Podría no?.. no va al caso ¿Y los libros?
Claramente me había olvidado
¿Te olvidaste no? Te los daré luego Podría ser ahora
Tenía mi casa hecha un desastre
Te aseguro que no querrás ingresar a esa jungla El departamento de un hombre es su castillo del terror Tú lo has dicho. ¡Vamos, o de lo contrario llegaremos tarde!
No tardamos nada en ingresar a la clase de obligaciones y contratos. Aunque era bastante tediosa, el profesor eligió a dedo a varios delegados para formar los directivos de la clase. Me escondí muy por debajo de mi asiento para no ser parte de ello. Pandora me miraba extrañada como si hubiera visto un insecto que se acurruca detrás de las paredes para escapar.
¡Pish! - Me chista Iris – ¿Podemos hablar? ¿? – ¿Y ahora que le ocurre? – Giré mis dedos dando a entender que más tarde. Teníamos un receso y luego el club, pero la mirada de Minerva en dirección a la biblioteca lo mencionaba desde un punto de vista estricto y harto de cumplir de forma imperativa. Ni se te ocurra..escaparte – Me decía con la mirada clavada en mi semblante que poco a poco se iba reduciendo ante sus ojos malignos. ¿Veo que tiene muchos problemas? – Manifestó Pandora con su mirada al frente levantando la nariz como una actriz de esas que mantienen la altanería como su bandera de batalla .que se pueden resolver.. ¡Ey! Ya se vas a decir que soy un.. .solo quería agradecerte por enseñarme el trabajo ¡Ah! – Eso me dio miedo. ¿Me está agradeciendo? No lo tomes como un cumplido excesivo. Tienes suerte que lo esté haciendo, cuando deberías ser tú que me agradezcas por tener a tan bella dama dando alegría a un ciber repleto de hombres desesperados por ganar una partida. Sabía que la humildad era tu virtud sobresaliente – Confesé con poco agrado.
La clase concluyó con los resultados esperados. Ruben, Gerald, Kathe, Alicia, Bruna. Eran los elegidos para comandar el aula como suerte de consejo estudiantil. O sea que todas las situaciones y propuestas, problemas, y actividades, serían a su cargo. Bien por ellos. No quería inmiscuirme en nada que tenga que ver con estos asuntos.
Al verlos todos juntos en una fila, sonrientes, no pude dejar de apreciar el entusiasmo que poseían ellos por realizar estas actividades. En un parpadeo un leve mareo me condujo una forma extraña, cuando todo se transformó en esas figuras del día de ayer en la cual escapaba, en cuanto ¿Minerva me platicaba de no sé qué? Debería ser sobre el bibliotecario.
Bueno ya pueden retirarse.
Todos salieron apurados. Iris se colocó frente a mí.
Te quería comentar. ¿Qué te ocurrió ahora? ¿Jonas evolucionó a Reptil? No, Octavio quiere verme el mismo día. ¿Y qué con ello? ¿No eres muy inteligente no? Olvidadizo, podría decirse Tendré a los dos en la misma cita Hay mujeres que ni tienen uno – Dice Pandora que se suma a la plática. Puedes salir con uno y el otro retrasarlo en la reunión para después. – Guiña el ojo Minerva ¿Quién te interesa más? Octavio es una suerte de amigo-novio, Jonas es un compañero del club. Te refieres al muchacho de cabello largo con ideas extrañas – Expresa Minerva Ese es John Lennon, y no son ideas extrañas son ideas que mudaron el mundo – Expresé con enojo tomando un tema salido de la nada. - Se refiere a Charles Manson. El asesino sectario de Sharon Tate, y otros – Comenta Pandora. ¡Cállense! Estoy hablando de nuestro compañero de clase. ¡No desesperes! Puedes salir otro día. Solo elige. En tu lugar seria Octavio. Yo tengo el mío, ¡!pero una maldita amiga me lo robó!! – Explaya cerrando el puño con furia Pandora -¡¡Grr!! ¡Grr! – El puño se acerca a mí ¡Cuidado mujer! – Colocó la palma de mi mano delante como tomando distancia. – Es largo de narrar, pero…Jonas, no lo conozco y no me interesa. Solo me invitó a salir, y aparte de ello, estoy con él en el grupo.
Ambas piensan
Y Octavio..es la persona que elegí para mí
Ambas ahora piensan en Alan y el bibliotecario.
¡Sal con Octavio! - Expresa Pandora ¡Sal con Octavio! - Expresa Minerva
Que rápido decidieron.
¿Veré que hacer? ¿Si dudas es porque algo ocurre? – ¡Ejem! Es hora de ir a la biblioteca – Me dice Minerva – Empezaremos las tareas del trabajo del club. ¿Quieres ir a tomar algo en el receso? – Pregunta Iris a Pandora Me parece bien, mientras podemos conversar sobre tu situación con Octavio, y la mía con Alan – Y se maravilla ella con una expresión fastidiosa. - ¡Qué bello es el amor!
Nos separamos entre el primer corredor de paredes de mármol blancas, y el segundo que se colmaba de alumnos. Un despacho un tanto añejo de dos puertas color crema gastado, tenía un cartel que decía: Biblioteca.
Nuestra misión como primera orden, verificar la información de un posible fracasado, y como segunda que Minerva, que tiene cierta vergüenza a pesar de ser una mujer muy deseada por el público masculino, hasta el punto de tener en su instagem, red social visual, más de diez mil seguidores, incluyéndome al aceptar su invitación como la de Iris, y Pandora.
Espera un segundo, antes de ingresar a la sala y saca su celular de la cartera y levanta la mano en alto – ¡Sonríe! ¿Eh? ¿Qué haces?
¡Clickk!
¡MMM! Esa imagen no me gusta – ¡Otra! –
¡Click! – Otra foto -
¡Tampoco! ¿Puedes tratar de salir bien, sin colocar rostro difícil o de payaso? No seas ridícula, y dirijámonos
¡Click! – Otra foto nuevamente. -
¡Bien..! Aquí salimos mínimamente bien – Lo digo por mí, ¿Tú?, bueno. ¡Caso perdido! - ¡¡Entremos!!..!Por el amor de dios!
Al abrir la puerta, ella respiró hondo. Me causaba curiosidad el que le produjera un retraimiento. Era lo más normal del universo.
Buenos días – No dice un muchacho de tez rubia, ojos celestes, muy del ambiente artístico. Alto con camisa blanca, y una chaqueta. Jeans a la moda color marrón claro. Cierta sonrisa. Semejante a un actor de Hollywood. ¡Buenos días! – Expresé. Minerva estaba detrás de mi. Me di la vuelta para verla con cierto resquemor – ¡¡Qué rayos haces!! – susurré – Nada, perdón –Ho..Hola – ¡Buenos días! – Expresa él un tanto contenido por la belleza de Minerva. Vamos a tardar mil años en que tengan una conversación estos dos – Me confesé a mi mismo con sinceridad – ¿Precisan algún libro en especial? – Nos pregunta. – Para nada. De hecho hemos venido a estudiar. Y a realizar un informe, del cual precisaríamos unos minutos de tu tiempo, ¿De ser posible? ¡MMM! Estoy trabajando. No te preocupes. No llevará más que ello; unos minutos – Coloqué rostro fatídico y siniestro – ¡Muej! ¡Muej! Oiga – Da un poco de miedo Ven aquí Gaspar – Me toma del brazo Minerva – ¡No lo asustes! – Susurra ella La asustada eres tu – Es una persona común y corriente – Expresé Sí, pero me da cierta impresión – Se ruboriza ¡Bueh! Iremos a un asiento, podrías venir en unos minutos. ¿O iremos a ti? Irán a mí..!pe..pe!..pero..parecen extraños .mil disculpas – Dice ella - ¡Je! ¡Je! Mi compañero, es un poco atrevido, solo queremos hacer unas preguntas para nuestro informe. Si será un placer ¿Eh? ¿Por qué no dijo eso conmigo? ¿Y tanto asustan mis decisiones? ¡¡Créeme que si!! – Dijo Minerva. – No lo puedo entender. Hubiera sido simple, si tú te presentabas y se lo proponías. – Es mejor presentar el lado malo de un informe ¡Graciosa!
Nos fuimos a una mesa al lado de un gran estante de libros. Ella fue directamente en la búsqueda de la saga de Julio Verne. Mientras tanto me distraje con un libro de William Faulkner.
Comencé a leer un tanto entretenido, hasta que minerva se acercó a mi lado teniendo en su mano el faro del fin del mundo.
Te vas a perder entre ruidos y furias. – Dijo Y tú en un faro perdido en la isla de los estados Argentina, supongo Es solo para calmar el tiempo. Estoy analizando como preguntarle a una persona si es fracasada No hay que preguntar nada – Expresé abriendo el libro de Faulkner, dando pie a una frase interesante…Es como cita libro: ..Un hombre es la suma de las desgracias – Preguntar sobre su vida, sería lo indicado - ¡Así es! ¿No es muy atrevido? No digas tonterías. Atrevido seria tocarte los senos, o entrar desnudo a la clase con una carpeta en la mano ¡Eso es pervertido! ¿O anticultural? .claro que no. Claro que sí.. la sociedad no tolera que alguien te toque los senos, como tampoco que yo ingrese desnudo a un aula. Analízalo y veras que tengo razón.
El bibliotecario venía hacia la mesa donde nosotros conversábamos. No restaba nadie en la oficina.
¿Y bien?
Ambos lo miramos dejando los libros en la base de madera barnizada
Serán unas preguntas rápidas y sencillas – Mi compañera tomará nota Está bien. Tu nombre, apellido y edad: profesión, trabajo. Por empezar Soy Lucio Comarca, tengo veintisiete años, soy de profesión bibliotecario. Y trabajo aquí en un turno de mañana hasta las tres de la tarde.
En cuanto analizaba lo que manifestaba, lo miraba fijamente. Él en cambio evitaba la mirada, y a veces observaba a Minerva que escribía
Sus gestos eran nítidos y con cierta parsimonia
¿Tienes hobbies? Relaciones amorosas ¡Gaspar! – Me regaña Minerva. Lucio se pone un tanto inquieto ¡Es parte del informe! Bueno mi hobby es actuar en teatro. No tengo novia. – Cometa. Allí agudiza el oído Minerva. .¿Y cuántos años llevas en teatro? Desde los dieciséis años ¿Y has pensado, por ejemplo profesionalizarte? No tengo el tiempo suficiente.. y es como dijiste un hobby. .¿Si te dieran a elegir la biblioteca y actuar? Me quedaría con la actuación, calculo. – ¿Tienes amigos en la actuación? ¿Tuviste novia en la actuación? ¡Oye! No es preciso que solo me preguntes sobre la actuación o el teatro Es parte del informe. ¿Qué pasaría si conocieras alguien en la actuación? Una mujer y conocieras otra mujer en otro ambiente ¿A qué apunta la pregunta? ¿Eliges una del medio que amas, o donde frecuentas? No lo sabría
Hasta ahí, minerva tendría oportunidad con él. Algo me decía que no estaba a gusto como expresó ella al verlo desde lejos.
Volvamos el tiempo atrás – Dije – ¿Eh? ¡Dieciocho años! Estas ante una obra de teatro y la concluyes de forma satisfactoria – ¿Eliges ahí la carrera indicada o te quedas continuando por mas obras? ¡MMM! Elegiría la carrera indicada ¿Por qué, si tu amas la actuación? Porqué no todo es tan simple ¿Esa gran actuación existió? ¿Cómo? ¿Sí, o no? Podría decirse que si.. y no ¿Y por qué no? No salió como se lo esperaba.. Lo consideras un fracaso No podría decirse eso. Entonces se lo atribuyes a las personas Ellos dieron todo. ¿Entonces a ti? – pregunte con siniestralidad. Minerva se congeló por lo que preguntaba Me parece que ya podemos ir terminando..!Por favor! . solo te pedimos algo más. Tu número de teléfono. Pásaselo a mi secretaria Minerva Bietka ¿Ey? ¿Cómo tu secretaria? ¡¡Shh!! Ilusa – Sonrío a Lucio – Es un informe importante para el club – necesito que sigas conversando con ella, pues precisamos de ello – Expresé y en silencio dije… - Y de paso se conocen ustedes dos que si no estarán aquí por milenios para comunicase –
Tanto Lucio como Minerva me miraban con mal ojo.
Bueno, no tengo inconveniente – Expresa –
Levanté el pulgar de espaldas a Lucio, en cuanto él le pasaba su número a mi compañera.-
Ya es hora de retirarnos – Expresé en cuanto acomodaba el libro de Faulkner. Quizás Williams - Dije a viva voz al escritor en mi mente – el amor no deba encerrarse en los libros, aunque yo si tuve que hacerlo por fuerza mayor -
Al salir Minerva me observaba fijamente.
Eres muy atrevido, pero gracias.. – Expresó con una alegría Me debes una gaseosa, no que gaseosa.. es muy barato. Una hamburguesa doble con queso, y papas fritas. ¡Ja! ¡Ja! Lo que tú quieras ¡Gaspin! No comiences con apodos como Iris Te queda bien. ¡No seas viejo repulsivo! – Ella se adelantó y fuimos al aula del club. Te toca pasar el informe. ¿Crees que sea un fracasado? Algo paso a esa edad que lo convirtió en un fracasado – Expresé – Volver el tiempo atrás es muy difícil - Me dije ¡Ahh!..!Pero ahí están! Tengo que avisarles que no hay club hoy – La profesora tomo un receso por una reunión. – confiesa Edgardo Es verdad, dijo que continuemos con las tareas - Manifiesta luz ¡Gaspar! ¿Has visto a Pandora? ¡Para nada! Dile que me llame – Bueno, ¿pero no tienes su contacto? ¡No me lo dio! ¡Mmm! – Recordé su rostro enfadado – ¿Podría dárselo no? ¡Qué más da! Ayudaré a una causa noble - ¡Toma su número! ¿En serio? ¡¡Eres un genio!! – Se alegró él ¡Je! ¡Je! Ya lo sabía Estas haciendo una tontería – Expresó Minerva Gracias por el sermón- Voz de mi conciencia, pero él es compañero de grupo de ella – .solo quería ahorrarte el regaño
De hecho Pandora y Iris se había ido, cuando vieron el cartel de que no había clase y justo del otro lado estaban Jonas y Edgardo. -
No hay clases Huyamos – Expresa Pandora Ejem – Asiente Iris.
Ambas fueron a tomar otra gaseosa, en cuanto conversaban sus historias con Alan y Octavio. Podía decirse que terminaron llorando ambas porque se veía un lago en medio de la calle aledaña al parque maldito en el cual las encontré.
Me despedí de Minerva y ya había avistado otro posible fracasado. Horacio, el puestero de periódicos. No comprendo bien, aunque era un tajante socio de la desgracia por su semblante arrugado y su forma de bostezar. Al lado un señor hablaba con él.
Esto se produjo ni bien despedí a mi compañera a las afueras de la puerta principal. El puesto estaba allí ante mis ojos. El señor con el que platicaba emanaba un aspecto sombrío y fue allí que al verlo de perfil, sus ojos eran como manchones rojos y su cuerpo comenzó a volverse oscuro como aquellas sombras en el supermercado.
¿Otra vez? ¿Otra vez está pasando esto? - Hui de inmediato de allí –
Cruzando por el parque, me introduje entre medio de la arboleda de cipreses que se iban combinando con la maleza. Hacía tiempo que no se cortaba el pasto por aquí supuse al percibir que cada pisada en esa pastizal de chañales era una hermosa invitación a caer en algún pozo ciego escondido, esperando que alguien tropezara. A partir de ese momento el parque se hizo interminable. Tal así que recorriera lo que fuera de camino, nunca podía llegar a destino. Y todas las personas se asemejaban a esas figuras oscuras que aparecieron en el supermercado. Ladee la cabeza unos segundos y luego me masaje la cien para entrar en completa razón de mi mismo.
Gaspar, te encuentras en una plaza, y lo que ves son plantas. Esas figuras negras no existen, dejar de imaginar entidades inmateriales – Por cierto esa meditación de auto ayuda barata no me sirvió para nada, así que comencé a caminar sin observar a nadie por un entramado hasta llegar al otro parque. Las figuras oscuras se iban multiplicando. Como si el mundo mismo fuera una calamidad de demonios, o fantasmas, o lo que fuera que sean, o este alucinando.
Pronto se dieron cuenta de mi persona, y con certeza, me había visto, ver su verdadera forma. ¿Es posible? Eso me pasa por rodearme de locos y locas. ¿Sin embargo que tendrá que ver?. ¡Auchh! De tanta distracción me golpee con el último árbol que demarcaba la delgada línea entre la vegetación y el asfalto.
¿Se encuentra bien? – Me expresa una de las figuras . – lo contemplo un tanto temeroso Tenga cuidado – Sonríe de forma catastrófica. ¡Je! ¡Je! Gracias – Y salí espantado corriendo a mi trabajo. Tenía tiempo para ingresar, pero todo se estaba oscureciendo, hasta que volví en sí con un simple chasquido de mi cabeza – ¡Uff! – Todo volvió a la normalidad, o eso pensaba – De seguir así, voy a tener que ir a un psiquiatra, para no terminar en un hospicio. – Al mirar la hora me sorprendí. - ¡¡¡¿Qué?!!! Pero si tenía dos horas para poder relajarme antes de ingresar al trabajo – ¡¡No entiendo nada!! - Fui caminando sopesando en todo lo sucedido entre las figuras de color oscuro y el paso fugaz del tiempo.
Al llegar al Ciber Temp, para mi susto había algo peor que las figuras. Pandora cruzada de brazos, con su hermoso rostro angelical a punto de decirme lo peor.
¡¡Leandritoo!!! ¡Sip! ¿Mira esto? – Me muestra su móvil celular – ¿Es tu móvil? Veo que tienes el de última generación No tonto..¡¡Mira el mensaje!!
Observé con pocas ganas. ¡¡Hola hermosa, son Edgardo!! Ahora estamos conectados. Envía varios emojis, y luego otro mensaje narrándole los hechos de alguna tontería. Y luego otro con emojis, y luego diciéndole que vea esa foto de un almuerzo para invitarla. Y demás
¿Sabes qué significa eso? – Se enfado de una manera brusca
La imagen de Minerva disfrutando el momento en una nube de mi mente
¡Yo te dije.! No le des el número de teléfono de Pandora – Yoo..Teee Dii..Jeeee – su voz hacia un eco en mi cerebro como un tambor resonante en todo mi cuerpo ¡Ya verás! Cou…. Y no sé que de ese apellido – Cuando se acercó, apareció de la nada Alan ¡Hola Pandora! ¡Qué bueno verte! Holaaa Alan – Sonríe ella que se alegra ¡Uff! ¡Uf! ¡Uf! – Respiré con varios suspiros – .¿Ya tienes turno? Quiero la máquina de siempre? ¡Le puedes pedir a ella! Es la nueva jefa – Dije con burla. Y la abrazo indicándole a su amigo. Alan se sorprende. – Bueno ustedes ya se conocen, yo iré a mudarme de ropa ¡Je! ¡Je! Si trabajo aquí – y Se acerca a mí, mientras Alan se distrae con su móvil - Luego me encargaré de ti – expresa con enfado. Alan guarda su móvil por un mensaje de Marin ¡Es genial mi amiga! ¡Gracias! Pasa Alan – Le expresa ella – ¿Y Marín? Se encuentra bien. Recién recibí un mensaje de ella, que salía de la universidad. Oye lo que dije la otra vez – Comentó Pandora Somos amigos desde hace mucho tiempo Pandora . Marin te quiere mucho No es eso..no entiendes Si que entiendo..nuestra relación no debe romperse. ¿Captas? Es que, veía un futuro..prometedor El futuro siempre existe. No hay que dar nada por perdido. Hay que avanzar – Le dice a ella Supongo que tienes razón
¡¡Ring!! ¡¡Ring!!
¡Me están llamando! – Expresa Alan – ¡¡Marinn!! Estoy en el ciber, ¡¿A qué no sabes?! Trabaja Pandora aquí
Pandora, mientras observaba con desanimo
¿Quieres hablar con ella? Tengo que regresar al trabajo – Dijo con rapidez – Dale mis saludos. ¡¡Adiós!! ¿Eh? Se acaba de ir –
Él continúo su plática con su novia. No obstante Pandora venía al sector en el cual me encontraba.
Pese a todo, ya estaba listo para trabajar, aunque aún me encontraba en mis pensamientos por lo sucedido en varias ocasiones. Pandora regresó a la media hora, y se colocó a mi lado
No te voy a perdonar que le hayas dado mi número a Edgardo. Pero tampoco puedo culparte por ello. De todas maneras es mi compañero de equipo del club. ¿Por cierto ustedes ya pudieron encontrar algún llamado fracasado?
Escuchaba lo que decía, no obstante no le presté atención
¡¡¡Leandritooo!!! ¡Perdón no quise hacerlo! ¿Te estoy preguntado del trabajo en equipo? ¡Eh!.. ¿A eso? Si.. el bibliotecario. ¿Te encuentras bien? Si, supongo. ¿Te ocurrió algo? .no.. ¿Tu estas bien? ¡Claro que lo estoy! Siempre lo estoy.. ¿Seguro? – Repregunto ¡MMM! Se coloca en una posición posible de lagrimear . respira hondo – El que éste aquí Alan, no es motivo para ponerse frenética y luego sentimental. Es que me cortó la plática por un llamado de mi amiga Marín – ¡Snif! ¡Snif! ¡Aquí va de nuevo! ¡¡¡No puedeee ser!!! – Y me asesta un golpe en el pecho que un poco más y me perfora la caja torácica. Aguarda, y mantén la calma. Lo primordial es que seas un tercero observador, tal vez no dure demasiado ¿Tú crees? Conociendo un poco a Alan. Es una persona que mantiene una apariencia ¿En serio? Incluso, me arriesgo a pensar que es un fracasado – Allí se me ocurrió una idea – Se me acaba de ocurrir algo interesante. ¿Qué? Utilízalo como método de estudio para el trabajo en el club. Podrás verlo seguido, aunque con Edgardo. ¿Te volviste loco? ¿Y unirlos a los dos? ¿Quieres estar con él o no? – Pregunté casi gritando
Ella juntaba los dedos índices murmurando sola
Bueno si… Entonces hazme caso..Y el otro objeto de estudio. Podría ser Marín ¡¡Ya es demasiado!! ¡Yo te ayudaré! ¡No te preocupes! Aparentar tiene más letras que ser..según Kraus. ¿Te gusta la sátira de Kraus? – Frunció el ceño. - Desde luego. Voy atender las maquina del segundo piso ¡Gracias!
Saludé de espalda con la palma de la mano
Ella ingresó a la habitación por una toalla. Estaba mi bolso abierto y suelto un borrador de mi novela.
¿Y eso? – Miró a todos los alrededores – Bueno, no creo que se enoje por echarle un vistazo, quizás sean los apuntes del trabajo en equipo del club.
Leyó solo un párrafo..
"…Yo quería ser y no fui, y tal vez, no me recuerdes y es mejor de esta manera. Es como si el amor fuera solo para los libros y nosotros estuviéramos abnegados a darnos la oportunidad de poder estar juntos. Pero hacer las maletas e ingresar a mi vida es algo tan terrible que siquiera los demonios del más bajo tártaro querrían, y te comprendo. Por misericordia decidí llevarme los recuerdos en una maleta en la cual tengo tu imagen por siempre.
¡Wow! No pensaba que Gaspar pudiera escribir de esta manera – Ella se mantuvo quieta sin poder decir palabra alguna, como si se congelaran sus piernas – ¡Pandora! Hay demasiadas personas. Ven a darme una mano con ello Ya voy Leandro – Expresó un tanto ya animada, en cuanto guardaba mi borrador en el bolso. – Que persona interesante será leandro comentó ¡¡Quieres apurarte!! – Grité ¡¡YA VOYYY!! AYYY QUE FASTIDIO SU VOZ – Dijo enfurecida – ¡Je! ¡Je! supongo que es así. -
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