Chapitre 101: Capitulo 101 Capacidades [ 1 ]
—Punto de vista de Oriana Mengral.
Finalmente, había comenzado el segundo mes en la academia.
Esto significaba que las verdaderas clases estaban por empezar.
A los cadetes de primer año se les otorgarían puntos de crédito, un total de 500. Una forma de ganar estos puntos es explorando mazmorras asignadas y disponibles dentro de la academia. Si no hay mazmorras disponibles, el cadete será compensado con 100 puntos de crédito.
Esta norma aplica para todos los cadetes. Aunque hay docenas de mazmorras en la academia, debido a la gran cantidad de estudiantes, es difícil mantener suficientes mazmorras disponibles.
Al igual que los cadetes, los profesores también tienen puntos de crédito, pero en su caso, la situación es diferente.
"Los obtienen a través de las lecciones que imparten a los cadetes."
Como profesores, no entran a mazmorras; su única manera de ganar puntos es enseñando.
Puede que te preguntes por qué se les recompensa por las lecciones si, de todos modos, es su obligación enseñarlas. La razón es que, al igual que los cadetes, los profesores necesitan puntos de crédito para sus necesidades diarias. Este sistema funciona como su fuente de ingresos.
Por supuesto, cadetes y profesores pueden hacer negocios entre ellos o solicitar préstamos, ya sea a otros o al centro de gestión de mazmorras de la academia.
Sin embargo, los préstamos no son recomendables.
Oriana no es del tipo que pide préstamos.
Ella gana sus puntos de crédito enseñando a los cadetes.
Este sistema de puntos, que también afecta a los profesores, tiene un segundo propósito.
¿Qué sucedería si los profesores no enseñaran porque no reciben nada a cambio?
Entonces, este sistema de puntos de crédito garantiza que tanto cadetes como profesores puedan ganar sus puntos sin problemas.
Aunque, claro, de vez en cuando surgen inconvenientes. En esos casos, el centro de gestión de mazmorras interviene para resolver los problemas, ya seas profesor o cadete. Si el centro se entera de un conflicto entre ambos, no dudan en intervenir para solucionarlo.
Oriana miró fijamente por la ventana.
El amanecer estaba cerca, eran poco más de las cuatro de la mañana. Actualmente estaba en su oficina, pero pronto salió y se dirigió a la sección de entrenamiento.
No es raro que un profesor entrene, pero ser profesor no significa que no necesiten entrenar.
De hecho, es esencial que lo hagan. Los profesores también buscan superar sus límites y ascender al siguiente círculo.
Es algo que ellos también necesitan, romper sus barreras y alcanzar nuevas alturas para volverse más fuertes.
Oriana tenía un objetivo.
Uno que probablemente alcanzaría en algún momento.
Pero primero lo primero, Oriana buscó en su bolsillo y sacó dos caramelos de menta.
Su primer paso es relajar el estrés y despejar su mente con la dulzura de la menta.
Es realmente relajante para ella; la menta es su fuerza mental en estas situaciones, y por supuesto, esto aclara sus pensamientos.
Pasaron unos minutos, y cuando terminó de saborear la menta, se remangó las mangas de su camisa, se posicionó en el centro y primero cerró los ojos.
"La energía interna fluye con el maná."
"El aura de un caballero se combina con el maná."
"Deja que ambos fluyan por todo el cuerpo, y entonces..."
Abrió los ojos y miró su cuerpo.
Una capa azul cubrió todo su ser; sus músculos, tendones, órganos y huesos se volvieron más resistentes y fuertes.
Podría decirse que se hizo cinco veces más fuerte que antes.
Esto es lo que se llama "Aura de caballero", una energía similar al maná, pero desarrollada por los caballeros que, al no poder usar maná, buscaron su propia fuente de poder.
Descubrir el aura es un proceso extremadamente difícil y arriesgado, que pone en peligro la vida de cada caballero.
Sin embargo, Oriana no sintió esa dificultad al obtener el aura de caballero.
Se hacía una pregunta, una y otra vez.
"¿Por qué puedo usar maná y aura de caballero?"
Se supone que ambas energías no son compatibles, entonces surge otra pregunta.
"¿Qué pasaría si las combinara?"
En el mejor de los casos, Oriana descubriría una nueva energía, una mucho más poderosa de lo normal, capaz de alcanzar alturas inimaginables.
Sin embargo, en el peor de los casos, esa misma energía podría matarla al instante debido a la incompatibilidad entre ambas fuerzas.
Por supuesto, Oriana estaba bien informada al respecto, pero ella ya había descubierto algo crucial.
"Soy capaz de usar ambas energías, pero aún no he logrado combinarlas."
Su objetivo es fusionar el aura y el maná en una sola energía que le permita alcanzar un poder superior.
Ahora, con la noticia de que ha aparecido una grieta dimensional, Oriana está más decidida que nunca a encontrar la manera de combinar ambas energías y volverse al menos tan fuerte como un mago de noveno círculo.
Sin embargo, todavía no estaba segura de si esto funcionaría.
"Podría morir."
Estaba consciente de eso. Pero si la grieta dimensional se abre en unos años y descienden monstruos que nadie puede derrotar, su única opción es arriesgar su vida para superar sus límites y ser igual o más fuerte que un mago de noveno círculo.
Tiene una fuerza que ningún otro mago de noveno círculo posee, lo mismo ocurre con su resistencia, velocidad, reflejos y sentidos. Todos sus aspectos físicos son superiores. Sin embargo, en el aspecto mágico, su nivel no es tan alto.
Le falta maná y le faltan habilidades para controlarlo.
Son cosas que necesita. Si tuviera que comparar la cantidad de maná que posee con la de un mago, sería como la de un mago de quinto círculo.
Es muy poco maná para alguien que es más fuerte que un mago de séptimo círculo, pero aún no puede enfrentarse a un mago de octavo círculo, por más que lo intente.
A partir del octavo círculo, el poder es increíblemente grande, tan grande que un mago de séptimo círculo ni siquiera puede comprenderlo.
"Haa..."
Oriana suspiró.
Luego miró a su alrededor, decidió sentarse en el suelo y comenzar su meditación. Las verdaderas clases empezarán en unas horas, pero por el momento intentará combinar ambas energías.
***
—Cambio de escena.
—Punto de vista de Gloriana Mengral.
Había terminado de prepararse y estaba de camino al salón de clase, pero la voz de Eliza resonó desde su hombro derecho.
"Es un lugar muy lindo."
"..."
Sin embargo, Gloriana estaba nerviosa.
"No te verán los demás, ¿verdad?"
"No, solo tú puedes verme. Es un hechizo de ocultación de presencia, así que solo tú y tu novio pueden verme."
"..."
Gloriana se sintió derrotada al intentar explicar que Asher no es su novio... por ahora, al menos.
Cada vez que intentaba explicarle a Eliza, esta la interrumpía antes de que pudiera siquiera comenzar a hablar.
Aunque esto molestaba a Gloriana, sabía que era mejor no enfadarse con Eliza. Después de todo, ella es increíblemente poderosa, tan poderosa que ningún humano en este mundo podría derrotarla.
Su poder se acerca al mítico y misterioso poder del décimo círculo, ese poder que te da el título de un dios.
"Haa... Está bien."
"Ahora que lo pienso, ¿siempre me entrenarás?"
"No."
"¿Por qué no?"
"Las hadas no entrenamos a los humanos. Solo lo hacemos cuando establecemos un contrato recién nombrado, pero después de eso no hay entrenamiento."
"Entiendo, pero al menos me ayudarías en una situación peligrosa, ¿verdad?"
"No."
"..."
Gloriana guardó silencio.
A pesar de tener a alguien tan poderoso sentado en su hombro, mirando en todas direcciones, no recibiría ayuda ni entrenamiento.
Entonces, ¿cuál es el verdadero propósito de tener un contrato con un hada?
Sin embargo, descartó esa idea. Gracias a Eliza, ahora puede usar magia de luz y algunas habilidades que le enseñó.
¿Qué más necesita? Nada más, por supuesto.
Gloriana estaba más que satisfecha con lo que se le había dado; no buscaría más.
Pero sabe que necesita volverse más fuerte, aunque el poder no se obtiene rápidamente.
"Entiendo. Aunque esté a punto de morir, no me puedes ayudar, ¿verdad?"
"Así es, las hadas no ayudamos a los humanos. Ellos deben buscar sus propias respuestas a sus preguntas."
"Jeje."
"..."
"¿Qué fue eso?"
"Nada."
Gloriana suspiró y siguió caminando. Pronto llegó al salón de la clase uno, que ya estaba lleno de cadetes. Su mirada se dirigió hacia un grupo de seis personas que estaban sentadas en el mismo lugar desde el primer día en la academia.
Se apresuró a tomar asiento junto a Luna y Asher, su lugar favorito.
Más que nada, Gloriana estaba ansiosa por ver qué cambios traerían las clases a partir de hoy.
Hoy comenzaban las verdaderas clases en la academia, lo que significaba que empezaban los entrenamientos y lecciones que los profesores impartirían a los cadetes.
No solo ella estaba así de curiosa; al observar a los demás, pudo ver que todos estaban esperando ansiosamente para descubrir qué enseñarían los profesores a partir de hoy.
También hoy se entregarían los puntos de crédito y tendrían la oportunidad de entrar en mazmorras.
A partir de ahora, los entrenamientos serían todos los días.
"Haa..."
Gloriana suspiró, pero Luna la miró y le preguntó:
"Te ves cansada."
De hecho, lo estaba. El entrenamiento con Eliza en el mundo de las hadas para poder usar su magia de luz la había dejado agotada tanto mental como físicamente durante un largo periodo de tiempo.
Sin embargo, aparte de eso, estaba bien.
"Mmm, sí, estoy... algo cansada."
"¿Qué hiciste?"
"Nada importante, solo entrené, eso es todo."
"No hiciste algo diferente, ¿verdad?"
"..."
Gloriana miró a Luna a los ojos, encontrándose con sus ojos color ceniza.
"¿A qué te refieres?"
"Ya sabes..."
Luna señaló a Asher, y entonces Gloriana se dio cuenta de a qué se refería. Inmediatamente trató de negarlo.
"No sé de qué estás hablando, no pienses en cosas raras, Luna."
"Jajaja, es broma. Viniendo de ti, nunca harías algo así con él, ¿verdad?"
"..."
Gloriana se encogió de hombros.
Luna tenía razón. Gloriana sabía que le era imposible acercarse más a Asher, como por ejemplo, hablar de manera más casual, como lo harían amigos que se conocen desde hace mucho tiempo.
Algo así como lo que Luna hacía, sin prestar atención al estatus y la posición de Gloriana, siendo ella una de las princesas que heredará el trono.
"Sí... tienes razón."
"..."
Luna miró entonces a los ojos rojos de Gloriana.
"Haa..."
"Está bien, entonces no te importará que yo sea su novia..."
"Eso no, no dejaré que me lo quites..."
"..."
"..."
El ambiente se volvió incómodo para Gloriana.
Clank.
La puerta del salón se abrió.
Oriana entró por la puerta y se colocó en el centro del podio, mirando a los cadetes con seriedad.
"Cadetes de primer año, las verdaderas clases comienzan hoy..."
Hizo una pausa, observando a todos los cadetes.
"Los puntos de crédito se entregarán en unos tres dias, después de una evaluación."
"..."
Todos los cadetes murmuraron entre ellos.
¿Evaluación? ¿A qué se refería exactamente?
"La evaluación se hará cada tres meses. Es para medir todas sus capacidades: fuerza, resistencia, velocidad, reflejos, control de habilidades y la cantidad de maná que poseen actualmente."
Sus palabras tenían un gran significado.
Era una manera de determinar si los cadetes realmente estaban avanzando y volviéndose más fuertes que antes, evaluándolos en todos los aspectos, tanto físicos como mágicos.
Por supuesto, los cadetes más fuertes ya sabían esto. Esta evaluación ahora determinaría el verdadero potencial y quién era el más fuerte de la clase y de todo primer año.
Sin embargo, rápidamente todos dirigieron su mirada hacia Asher.
De alguna manera, todos parecían saber que él sería quien obtuviera los mejores resultados en todos los aspectos.
"La evaluación de capacidades tiene tres etapas: la física, la mágica y una de las más importantes, la mentalidad. Ya deberían saber qué pruebas enfrentarán en cada etapa."
Por supuesto, todos lo sabían. Al principio, Oriana explicó las dos primeras etapas, la física y la mágica, pero pocos conocían la etapa de la mentalidad.
"Es una manera de evaluar si son fuertes mentalmente, si son capaces de no sucumbir ante un mago que controla la mente o ante monstruos que manipulan a los humanos."
Como si hubiera leído los pensamientos de todos los cadetes, Oriana continuó explicando.
"Todos los cadetes, diríjanse a la sección de combate de la clase uno."
Los cadetes se pusieron de pie. Esta evaluación se llevaría a cabo en la sección de entrenamiento, un lugar lo suficientemente grande y resistente, perfecto para un momento como este...
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