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83.33% La conexión de sombras: Encuentro de opuestos / Chapter 5: Sentimientos encontrados.

Chapitre 5: Sentimientos encontrados.

Ayer fue el día de natación, y honestamente, no me divertí mucho.

Hice la típica cara de tonto haciéndome el pervertido mientras observaba a las chicas nadar, y para las clases en sí, solo me sumergí a medias para evitar tener que lidiar con clases adicionales.
Ahora estamos de vuelta en el salón de clases, y, de repente, me encuentro reflexionando en mi mente.
¿Por qué estoy pensando en estas cosas como si alguien más estuviera escuchándome en mi cabeza? Mmmm, supongo que eso no es realmente importante.
Pero, dejando de lado esas reflexiones filosóficas de mi mente, hay algo que me tiene desconcertado: Fuka no ha venido a hablarme en un día y medio.
No estoy quejándome; de hecho, podría decirse que su ausencia es como un pequeño respiro.

Tal vez, solo tal vez, pueda recuperar esa vida tranquila de "extra" que tanto ansiaba.

Sonrío ante la perspectiva de pasar desapercibido, pero luego mi pensamiento más profundo se pregunta: ¿Realmente quiero eso?
Han pasado dos días desde que Fuka no me escribe, y falta poco para que se cumplan dos días desde que nos vimos por última vez…
Y ahora que lo pienso, ¿por qué estoy pensando tanto en ella? Mis pensamientos divagan, pero antes de que pueda seguir en este viaje introspectivo, el timbre sonó e indicaba que era la hora del almuerzo.
Así que es hora del almuerzo ¿Eh?. Bueno, parece que mi estómago está recordándome que es necesario alimentarse de vez en cuando.
Además, ahora que tengo una buena cantidad de puntos por la extorsión que hice, finalmente puedo disfrutar de una comida decente.
Mis puntos casi estaban en rojo gracias a las sugerencias no tan brillantes de mis "amigos" que me hacían comprar videojuegos y tonterías.
Hablando de Roma, giré la cabeza de reojo y vi a Ike y Yamauchi acercándose.
— Oye, Cid, ¿vienes? Vamos a almorzar en mi habitación —me ofreció Ike, extendiendo la invitación a ese lugar que, sinceramente, preferiría evitar a toda costa.
No, por favor, no. No quiero entrar a esa habitación de nuevo, nunca jamás de los jamases...
— Oh, váyanse sin mí. Creo que quiero comer solo esta vez —respondí, tratando de evitar cualquier aventura adicional en la "maravillosa" habitación de Ike.
Yamauchi me miró con sorpresa y dijo:
— ¿En serio? Bueno, no vamos a insistir. Pero tú te lo pierdes.
Me pregunto, ¿a qué me estoy perdiendo exactamente? ¿A su galería de fotos secretas de las chicas de nuestra clase? ¿A sus videojuegos que probablemente están cubiertos de polvo y abandono? No, gracias.
Después de que Yamauchi pronunció esas palabras de rechazo, se fueron, llevándose consigo la "oportunidad" de disfrutar de lo que sea que Ike llama "almuerzo en su habitación".
— "Creo que yo también debería irme", pensé al echar un vistazo a la hora en mi teléfono.
Salí del salón de clases con la esperanza de disfrutar de un almuerzo tranquilo y sin complicaciones en la cafetería.
Al llegar a la entrada, me acomodé en una silla, y un camarero se acercó, listo para tomar mi pedido.
Decidí que hoy era el día de darme un pequeño capricho, así que pedí lo más costoso del menú. No es como si hubiera disfrutado de algo decente en condiciones desde hace una semana, entre videojuegos, clases inusuales y peleas callejeras.
Después de transmitir mi elección al camarero, este se retiró para comunicárselo a los cocineros. Mientras esperaba, suspiré por mis adentros, saboreando la idea de disfrutar de un poco de soledad.
Pero como suele suceder… Ese deseo de paz y tranquilidad no duró mucho.
— Hoooo, mira a quién tenemos por aquí —escuché una voz animada detrás de mí.
Al voltear, me encontré con un chico que aparentaba ser mayor, alto, con piel clara, cabello rubio y ojos azul claro.
¿Alguna vez me crucé con él? ¿Quién es y por qué me habla? Son preguntas que giraban en mi cabeza mientras intentaba identificar a este chico rubio que, sin previo aviso, había decidido entablar una conversación conmigo.
Antes de que pudiera formular una respuesta, él se adelantó y ocupó la silla de adelante como si fuera la cosa más natural del mundo.
— Parece que estás solo. ¿No estás con tu noviecita? —lanzó una pregunta intrigante el chico de pelo rubio. ¿Será que le gusta Fuka? No tengo idea, solo espero que esta situación no me genere problemas innecesarios.
— Mmm, no estoy cómodo hablando con alguien que no conozco —respondí, tratando de mantener las cosas a la distancia segura de la incomodidad.
Pero antes de que pudiera dar un paso más en mi respuesta, el rubio respondió rápidamente con una expresión que sugería que la palabra "disculpa" no estaba en su vocabulario.
— Oh, mis disculpas. Parece que fui un poco grosero —sonrió, y su disculpa sonó más como una afirmación que como un acto genuino de arrepentimiento—. Me llamo Nagumo Miyabi. Estoy en la clase 2-A y soy el vicepresidente del consejo estudiantil.
¿El vicepresidente? Bueno, eso explica su actitud de seguridad y su aparente falta de respeto por los límites personales. Suspiré internamente, preparándome para una conversación que seguramente sería más intrigante de lo que había planeado para mi almuerzo tranquilo.
— Soy Cid- — intenté presentarme, pero el vicepresidente decidió interrumpirme, demostrando que tal vez no estaba tan interesado en formalidades.
— No te preocupes, te conozco muy bien —dijo con una sonrisa mientras me miraba de arriba a abajo.
Espera… ¿No será de ese palo? ¿No?
— No sé qué ve Kiryuin en ti, pero esa chica es muy caprichosa y no se enredará con cualquier hombre. Solo habla con gente interesante. También Asahina me contó sobre ti
Oh no, ya sé a qué quiere llegar, y no me gusta para nada.
— No sé, eso también me pregunto yo. ¿Qué tengo de impresionante? Ni siquiera sé por qué me aceptó — respondí, haciendo mi mejor esfuerzo para parecer confundido, aunque en el fondo sabía que estaba enredado en una situación más complicada de lo que había previsto.
— Sí, es cierto. He investigado sobre ti, y estás en la clase D. No pareces la gran cosa en sí. Notas promedio, físico promedio y, encima, te tildan de pervertido. ¿Tal vez ella solo está jugando contigo? — Esté dijo, clavándome con una evaluación bastante precisa de mi situación actual.
Sí, eso es exactamente lo que está pasando… Esa chica solo aceptó ser mi novia cuando me declaré esperando un rechazo, todo para su diversión personal, porque su intuición decía que yo era "interesante".
— Sinceramente, no estoy cómodo hablando de relaciones con gente que acabo de conocer — Intenté esquivar el tema, pero Nagumo no parecía dispuesto a dejarlo tan fácil.
— Oh, no te preocupes, no debes responderme, pero recuerda que estaré vigilándote — Nagumo dijo antes de marcharse, dejándome con la sensación de que algo malo se avecinaba.
— Aquí está su pedido — anunció el mesero, rompiendo momentáneamente la tensión al colocar la comida en la mesa.
Mientras daba un mordisco, miré en la dirección en que Nagumo se había ido y pensé para mí mismo: "Tengo el presentimiento de que algo malo va a pasar".
*Ñam*
1
Woa, estoy realmente satisfecho. No había comido así de bien en mucho tiempo, y se nota.
El regusto de una buena comida se mezclaba con la sensación de haber evitado, al menos por un momento, las situaciones extrañas de la escuela.
Ya me dirigía hacia mi habitación, disfrutando cada paso, cada momento de soledad…
Ojalá esto durara para siempre, pero sé muy bien que mi suerte no es la mejor. Bueno, no creo que pase nada raro en mi habitación, ¿verdad? Es un lugar al cual solo yo puedo acceder, es como mi cueva personal.
Estaba parado junto a la entrada y abrí la puerta con cierta anticipación. Al mirar hacia adelante, mi ceño se frunció automáticamente. Suspiré para mis adentros... tranquilo...
— ¿Qué haces aquí? —pregunté, alzando una ceja mientras Fuka estaba tumbada en mi cama, leyendo un libro como si fuera totalmente suya.
Sabía que este momento de tranquilidad no podía durar para siempre. ¿Por qué me hago ilusiones?
Al escuchar mis palabras, Fuka levantó la mirada del libro y me miró con una sonrisa.
— Qué tal, cariño. ¿Cómo estás?
¿Cariño? ¿Desde cuándo pasamos de llamarnos por nuestros nombres hace unos días a soltarnos "cariño" de la nada?
Bueno, eso no importa ahora. ¡Lo que importa es que está en mi habitación, invadiendo mi privacidad! Intenté mantener la calma y responder con sarcasmo:
— Oh, solo disfrutando del lujo de tener a una intrusa en mi habitación. ¿Y tú? ¿En qué parte de las reglas de la escuela dice que puedes hacer esto?
Fuka solo sonrió y cerró el libro.
— Bueno, pensé que sería divertido compartir un rato contigo. ¿No somos novios después de todo?
Suspiré internamente… que molestia…
Iba a responderle, pero me cortó y siguió hablando.
— ¿Sabes? Eres aburrido. No tienes ninguna revista pervertida. Pensaba que por los rumores tuyos estaría toda la habitación llena de esas cosas.
No me interesan en absoluto. Cuando Ike me regala alguna, la tiraba cuando no me veían. ¿Para qué llenar mi espacio con eso?
— No, no soy ese tipo de chico, al menos no tanto.
Fuka dejó el tema y siguió molestando por otra parte.
— Sabes, te extrañé. Estaba en un examen especial y no nos dejaban salir, así que no pude verte. Cuando terminó, vine rápidamente aquí.
¿Examen especial? Genial, pensé que podría haber un respiro y que se cansaría de mí, pero parece que eso no sucederá pronto.
— Basta de todo esto. Ahora vamos al grano. ¡¿Cómo te metiste en mi habitación?! — interrumpí su pequeño monólogo antes de que continuara con sus divagaciones sentimentales falsas.
Intentado alejar la situación utilice la forma más obvia que tenía en el momento.
Ella al escuchar mí pregunta me muestra la llave.
— Solo le dije al tipejo del mostrador que me diera una de estas porque soy tu novia, y me dio el okey.
¿En serio? ¿La seguridad de esta escuela es tan mala?
— ¿Y te la dieron así no más? ¿Y si estabas mintiendo y le dieron a la persona equivocada?
Ella me miró como si dijera "¿Eres tonto?"
— ¿No lo sabes? Mira esto.
Fuka agarró su teléfono y abrió una página, mostrándome una noticia de la escuela con el título: "La princesa Kiryuin Fuka, la chica más hermosa, saliendo con un pervertido".
Ya me parecía que mucha gente me estaba mirando en la hora del almuerzo, pero ahora que lo veo...
¿Una princesa? Si la definición de princesa es secuestrar a una persona y obligarla a ser tu novio, entonces sería muy acertada esa palabra.
Bueno, al menos me siguen viendo de una forma mala, pero digamos que soy medianamente popular o que mucha gente me conoce, aunque sea por las razones equivocadas.
En fin, ¿quién diría que la noticia de nuestra "relación" se esparciría tan rápido? Debería hacer un registro de cuántos titulares absurdos surgen a raíz de nuestras situaciones.
Estoy considerando empezar a cobrar regalías por cada noticia que usen mi imagen sin mi consentimiento. Sería una nueva forma de ganar puntos privados, ¿no?
Dejando un lado las bromas tengo que recuperar la llave.
— Bueno, no me importa. Devuélveme esto. Quiero tener mi privacidad, al menos aquí.
Fuka me miró con una sonrisa pícara, como si estuviera a punto de empezar un juego emocionante.
— Entonces, sácame la tarjeta.
Dijo moviendo la tarjeta de acceso como si fuera un reloj hipnótico. ¿En serio? ¿Jugando con una tarjeta de acceso? Que infantil…
Ya sabiendo que la situación no iba a cambiar, me resigné y tomé una decisión: "Recuperar la llave".
— Bueno, tú me obligaste.
Me preparé y comencé a caminar rápido. La estaba persiguiendo por la habitación, pero ella se movía ágilmente esquivándome.
— Vaya, que es rápida.
Cuando estaba al lado de la cama, vi la oportunidad perfecta.
¡Ahora!
— ¡Te tengo!
La tiré y cayó en la cama. Rápidamente, puse mis dos manos a ambos lados de su cuerpo.
Miré para adelante y su cabello plateado largo estaba un poco desacomodado, y mientras la miraba de cerca, noté que nuestros rostros estaban a solo unos centímetros de distancia.
Ambos nos quedamos así por un momento.
No pude evitar pensar lo linda que se veía en esa posición… Espera, espera ¿qué demonios pensé en mi cabeza?
Decidí acercarme un poco más hacia ella. Cerró los ojos, como si estuviera preparada para lo que pudiera suceder.
Agarré la tarjeta y me alejé de la cama, liberando mis brazos y manos que cumplían su función de mantener a Fuka cerca en esa situación comprometedora.

Después de eso me levanté de la cama.

Debo disolver este ambiente.
— ¿Tan difícil fue darme la llave y ya? —pregunté, tratando de romper la tensión.
Estaba mirando en otra dirección, y Fuka no respondía.
— ¿Fuka?
Cuando volví la mirada, noté un pequeño sonrojo en sus mejillas. Su expresión parecía cambiar, como si estuviera procesando algo en su mente.
Espera... No puede ser...
¿Está enferma?
— Oye, ¿qué te pasa? ¿Te comió la lengua el gato o qué?
Ella esperó un poco y, en unos momentos, respondió.
— C-Callate.
Sí, está enferma. Nunca la vi tartamudear de esa forma en todo el tiempo en que nos hemos hablado.
— Creo que me iré ahora.
Fuka, al decir esto, se levantó de la cama y se dirigió hacia la puerta.
— Nos vemos mañana.
Después de decir eso, abrió la puerta y se fue.
Todavía seguía procesando lo que había pasado hace unos pocos segundos. Me tiré en la cama y me dije a mí mismo.
— ¿Qué carajos pasó? —dije alzando mi mano hacia arriba para bloquear la luz que molestaba mis ojos.
Será que... No, no puede ser ¿no? Sí, seguro que no es nada. Debería irme a dormir y hacer como si esto nunca hubiera pasado. Pero, ¿por qué siento que las cosas han cambiado entre nosotros? Tal vez solo sea mi imaginación, pero algo me dice que las cosas no serán tan simples como solían ser.
2
-Punto de vista Fuka-
Esquivaba a Kagenou, era muy divertido; lo estaba molestando como siempre lo hago. Por alguna razón, cuando estoy con él, me siento un poco más cómoda que con los demás.
Me tropecé con el suelo, y detrás de mí estaba la cama. Kagenou estaba delante de mí y parecía ya tenerme acorralada.
— ¡Te tengo!
Caí hacia la cama y cerré los ojos fuertemente. Pronto los abrí, y Kagenou estaba encima mía. Él estaba mirándome fijamente y puso sus manos a los lados, bloqueando cualquier salida que hubiera tenido.
Su expresión estaba cambiada y parecía que se estaba divirtiendo. Nunca lo había visto de esta manera. Lo seguía mirando. Es lindo...
Al pensar eso, sentí que mi corazón se aceleraba un poco. ¿Qué me está pasando? ¿Por qué me siento tan bien en esta situación? ¿Por qué siento que quiero que me abrace en este momento?
Nos seguíamos mirando. Sinceramente, quería que esto siguiera así para siempre y que el tiempo se parara completamente.
Kagenou se acercó un poco más, y me desesperé. Espera, espera, ¿me va a besar? ¡No, no, no estoy preparada!
Estaba preparada para lo que viniera, pero ¿por qué siento que si me muevo o lo golpeo, me arrepentiré para siempre?
No lo sé... Voy a cerrar los ojos.
Estaba lista para lo que fuera, pero en lugar de lo que esperaba, solo sentí que la tarjeta que tenía agarrada con mi mano se deslizaba, y parecía que Cid se estaba levantando.
Abrí los ojos y lo vi retroceder, mirando en otra dirección.
¿No iba a besarme? Ay, ahora me siento avergonzada. Mis mejillas tomaron un color rojo y sentía el calor en ellas.
Pronto, Kagenou habló.
— ¿Tan difícil fue darme la llave y ya?
¡¿El no está tocado por la situación?!
Mi corazón está palpitando realmente fuerte. ¡No puedo creer que Kagenou esté tan relajado después de lo que acabó de suceder!
— ¿Fuka?
Kagenou se dio la vuelta y me miró. Ahora no puedo sacarme la imagen de la cabeza… realmente se veía lindo en ese momento… ¡Espera, espera, espera, eso no importa ahora!
Ya me preguntó dos veces, debería contestarle, pero las palabras no salían…
— C-Callate.
Necesito irme, debo tranquilizarme… y tal vez hablar con él mañana…
Me armé de valor y hablé de nuevo.
— Creo que me iré ahora.
Me levanté de la cama. Vi la mirada extrañada de Kagenou. Lo siento, no puedo estar más aquí…
Me dirigí hacia la puerta, la abrí y la cerré.
Cuando lo hice, me apoyé en la puerta y toqué mi pecho para sentir mi corazón…
Será que…
¡¿Estoy enamorada?!

L’AVIS DES CRÉATEURS
STsombra STsombra

¿Qué les pareció el capítulo?

Si, lo sé… la escena de Fuka y Cid fue muy cliché.

¿Muy rápido?, si lo fue lo siento…

Pero mí mente para escribir romance es como si fuese un presupuesto y ahora mí banco monetario tiene muy poca presuposición para generar ideas.

Encima te saco una rima.

Básicamente solo pensé esta escena para que haya algo del comienzo de romance en este fic, ya que solo hubo citas, pero nada del estilo.

Por lo menos aportó una buena escritura o al menos es lo que quiero creer. Creo que ya desde aquí no podré mejorar más, pero bueno.

Así que espero que les haya gustado lo suficiente como para que al menos no les haya dado cringe o disgusto.

Pero en fin, por mi parte ya he dado lo mío y hecho otro capítulo del fic.

Nos vemos el próximo capítulo. ¡Bye!

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