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Justo después de que Ambrosia se marchara, Lázaro se levantó de su silla y luego caminó hacia Nux con una mirada seria en su rostro. Nux, que en ese momento estaba hablando con Esme, se detuvo y al ver la expresión seria en el rostro de Lázaro, entrecerró los ojos.
—¿Planeaba Lázaro atacarlo? —Nux se lo preguntaba en su mente. Bueno, incluso si era así, Nux no estaba muy preocupado.
No, no porque fuera más fuerte que Lázaro. Había podido derrotar a Melia, sin embargo, contra Lázaro, que era un Semi Santo, no tenía ninguna oportunidad, incluso dando todo de sí, ganarle a Lázaro sería absolutamente imposible. Incluso contra Melia, la victoria no fue unilateral. Estaba ocultando eso ahora mismo y todavía se mantenía en pie, sin embargo, la verdad es que tenía lesiones internas por todo su cuerpo.
Lesiones que ni su [Regeneración] mejorada ni las Pociones Curativas pueden sanar. No estaba en condiciones de luchar. Incluso pelear contra Melia en este momento era difícil.