Chapitre 4: Alquilar una Tienda (Editada)

—Ciudad Incoada no era una gran ciudad. Se podría decir que era una ciudad de nivel bajo. Ciudad Cristal era una ciudad de nivel intermedio. En este caso, se podía ver fácilmente que Ciudad Cristal era más grande y prestigiosa que Ciudad Incoada.

—Pero aún así, Jack sentía que este era el lugar adecuado para empezar. Aunque Ciudad Incoada era más pequeña que Ciudad Cristal, la familia Alfonso aún no había extendido sus manos a esta ciudad.

—Después de todo, aunque la familia era rica, no lo era hasta el punto de poder abarcar todas las ciudades. Tener influencia en dos ciudades era el máximo que la familia Alfonso podía manejar. Después de todo, cuantas más ciudades influenciaban, más oponentes enfrentaría la familia.

—Y aunque no tenían una gran influencia en la ciudad, eso no significaba que no existieran. Había personas de esta ciudad y de otras que tenían cooperación con la familia Alfonso. Eso significaba que podrían hacerle un favor a la familia Alfonso bloqueándolo.

—Pero aún así, Jack pensaba que ya que él era solo una persona pequeña y no iba por ahí ofendiendo a otros, no se preocuparían por él en absoluto. Eso era lo que esperaba.

—El taxi entró en la ciudad antes de dirigirse hacia la parte oriental de la misma. Ciudad Cristal estaba al norte de Ciudad Incoada. La calle Amarilla a la que Jack quería ir se encontraba en la parte oriental de la ciudad.

—La calle Amarilla no era muy prestigiosa. También se podría decir que era el lado más pobre de la ciudad. Pero, era donde Jack podía permitirse comenzar.

—El conductor se preguntaba qué iba a hacer una persona de la gran familia Alfonso de Ciudad Cristal en la pobre calle Amarilla. Pero, eso no era asunto suyo. Simplemente sacó su teléfono y le envió un mensaje de texto a Brenda sobre dónde estaba llevando a Jack.

—Por otro lado, Jack sacó su teléfono. No era uno reciente, sino uno que estaba a punto de pasar de moda. Era un smartphone, pero no era la última versión.

—Se desplazó por él y miró los mensajes. Encontró que aparte de los mensajes promocionales, no había ningún otro mensaje. Parecía que a su padre no le importaba que él hubiera dejado la familia después de todo.

—Suspiró y revisó el saldo de su cuenta bancaria. Desde que comenzó a ahorrar, nunca había comprobado cuánto tenía en su cuenta de ahorros. Siempre guardaba algo de efectivo a un lado que podía usar. En cuanto a lo demás, lo ahorraba todo.

{El saldo de la cuenta de ahorros del banco Flyers es de $43,275.}

—Suspiró al ver esto. Ni siquiera era cien mil. Había que saber que Jack había estado ahorrando este dinero desde que tenía trece años. En otras palabras, era un ahorro de seis años.

—Parecía que el dinero que recibía de la familia Alfonso no era tanto después de todo. Después de todo, aparte de sus gastos habituales, no había nada más en lo que Jack usara el dinero que tenía, aparte de ahorrarlo.

—Ya llegamos —la voz del conductor lo sacó de sus pensamientos. Luego guardó su teléfono en su mochila y se bajó del taxi. Estaba a punto de irse cuando el taxista le gritó.

—¡Eh, aún no has pagado!

Jack no se molestó en explicar que Brenda había dicho que había pagado por él. Después de todo, sabía que Brenda no era una persona tan amable como para pagar algo así por él. Además, ella no sabía a dónde se dirigía, por lo que no había forma de que ella pudiera pagar.

—¿Cuánto es? —preguntó Jack.

—180 dólares —respondió el conductor. Jack sacó doscientos dólares y se los entregó al conductor—. Quédese con el cambio.

No estaba dispuesto a esperar el cambio ya que necesitaba conseguir un lugar donde quedarse y almorzar.

El conductor observó la figura que se alejaba de Jack y pensó para sí mismo, 'Es un joven tan generoso. Lástima que aquellos con los que trata son personas importantes que no me atrevo a ofender.'

Y con eso, pisó el acelerador y dejó la calle.

….

Ciudad Cristal, mansión principal de los Alfonso.

—Así que, ¿me estás diciendo que Jack dejó la familia y se dirigió a Ciudad Incoada? —la profunda voz de un hombre resonó dentro de la sala de estar.

—Sí padre, dijo que quería valerse por sí mismo. Pero no pensé que iría a un lugar tan atrasado. Además, fue a la zona más pobre, la calle Amarilla de Ciudad Incoada. Si alguien se entera de que es miembro de la familia Alfonso, entonces estoy segura de que la reputación de nuestra familia se verá afectada —Brenda respondió mientras se sentaba frente a un hombre de cabellos rubios.

Este era el actual jefe de la familia Alfonso y el padre de Jack, Dalton Alfonso. Tenía el cabello rubio corto, ojos verdes y una barba bien recortada. Ya estaba envejeciendo, acercándose a sus últimos cuarenta años, pues tenía cuarenta y siete.

Su expresión actual no era nada buena. Después de todo, su hijo acababa de dejar la familia sin decir una palabra. Además, se dirigió a la zona más pobre de una ciudad pequeña. Esto era denigrante para su identidad como el actual CEO del Grupo Fonso.

Era el padre de Jack y el CEO de un grupo multimillonario. Si incluso su hijo vivía la vida de un mendigo, su reputación en el círculo seguramente disminuiría.

Además, había hermanos y primos suyos que tenían la mira puesta en su posición. Estaba seguro de que iban a usar esto para asestarle un buen golpe.

Después de pensarlo bien, encontró una solución. Endureció su corazón y emitió un veredicto. —Desde este momento en adelante, Jack ya no es miembro de la familia Alfonso.

Sus palabras sorprendieron a todos los que estaban presentes en la sala de estar. Más aún a aquellos que estaban planeando qué hacer durante la reunión general de la familia.

Nunca esperaron que Dalton fuera tan cruel como para desheredar a su propio hijo con tal de mantener su posición como CEO. En otras palabras, la posición era más importante que el hijo.

….

Jack no tenía idea de que acababa de ser desheredado por su propio padre. Pero incluso si lo supiera, no le importaría ya que su padre nunca se había preocupado por él de todos modos. Así que, no había diferencia alguna.

Actualmente, estaba en un pequeño apartamento que acababa de alquilar. Este apartamento no era tan deplorable, aunque era pequeño.

Tenía una sala de estar y un dormitorio. La sala de estar estaba dividida en dos, donde la pequeña área de las dos era la cocina. Había agua y electricidad. Por lo tanto, Jack no estaba preocupado por su vida aquí.

Aunque vivía en la calle Amarilla, estaba viviendo en la zona que se podría decir que se encontraban los ricos de esta calle. El apartamento que acababa de alquilar tenía tres pisos. Él estaba en el segundo piso.

Actualmente, estaba comiendo unos fideos para el almuerzo. Esta era su vida frugal. Aunque tenía más de cuarenta mil dólares de ahorros, no los usaría para gastos. Eso era lo que iba a usar como capital.

Después de su simple comida, fue a la agencia de tiendas de la calle. Aquí es donde una persona que quisiera conseguir una tienda, ya sea para alquilarla o comprarla, acudiría.

La oficina era la única en toda la calle que tenía una vibra de hombre rico. No era muy grande. Era un edificio de cuatro pisos pintado de azul y negro, ¡qué extraña combinación! Se llamaban Agencias Leviation.

—Hola señor, ¿qué le gustaría hoy? ¿Alquilar o comprar una tienda? —preguntó la recepcionista.

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—Me gustaría alquilar una tienda en las áreas superiores de la calle. Entonces, ¿cuál es el precio? —preguntó Jack.

—Mmh, ¿qué tipo de tienda le gustaría alquilar? —preguntó educadamente la señorita recepcionista.

—Solo una tienda pequeña que se pueda usar para vender víveres y otras necesidades del hogar —respondió Jack.

Ya había pensado en lo que iba a hacer. Con una pequeña tienda para vender esos artículos, estaba seguro de que no le faltarían clientes.

—Tenemos una tienda de comestibles que ya tiene stock. Fue vendida por el dueño a nuestra agencia hace dos días. Pero, todos los artículos que pueden caducar ya se han vendido, y solo quedan los que tienen una larga vida útil. Si está interesado, podemos alquilarle esta tienda —después de revisar una lista en el mostrador, respondió la recepcionista.

Jack pensó por un momento y sintió que no estaba mal. Por lo tanto, decidió obtenerla.

Al ver que Jack había aceptado, la recepcionista reveló una sonrisa y dijo —La tienda está ubicada más cerca del final de la calle, limitando con la calle Alpine. Tiene un área de 1,500m². Esta área es abierta y el tráfico también es bueno. Entonces, el costo del alquiler sería de $700 al mes.

Al ver que Jack asentía, continuó —En cuanto al stock que hay en la tienda, de acuerdo con los cálculos que se hicieron ayer, valen $17,489.

Jack pensó por un momento y aceptó. Podría impulsar la tienda si el negocio iba bien. Si no, tendría que cambiarla.

—Comprobaré más tarde. En caso de que todo no coincida con lo que acaba de decir, tendrá que darme un reembolso —Jack afirmó seriamente.

—No tiene que preocuparse por eso —la recepcionista respondió con una sonrisa sencilla.

Así, Jack completó el pago de $18,389. Los doscientos adicionales eran por la tarifa de servicio. La tienda ya tenía una licencia que estaba incluida en el stock.

Actualmente, a Jack le quedaban $24,886. Con esto, si el negocio fracasaba, podría iniciar otro.

Con eso, Jack salió de la tienda con los documentos que mostraban que él era el actual inquilino de la tienda. La tienda no estaba tan lejos de la oficina de la agencia, era solo un paseo de cinco minutos y Jack estaba allí.

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