Cassie aprovechó ese momento para incorporarse, sacando otra arma más de su espacio, lo que a su vez hizo que el hombre tuviera un tic en el ojo. —¿Otra más? ¿De dónde sacas todas estas a tu nivel? —preguntó, mirando con avidez el arma, aunque Cassie no se molestó en responderle.
Esta era la tercera arma que sacaba. Su abuela había usado gran parte de sus ahorros de trabajar con Lenny para darle un arma extra, que de hecho terminó siendo una gracia salvadora.
También usó este tiempo para beber una poción de salud y una galleta de maná, lo que también hizo que el hombre tuviera un tic en el ojo.
A su lado, Jona aprovechó este tiempo para tomar aire. Jona se apresuró cuando se dio cuenta de que había Alteranos allí. Estaba en la zona que quemaron y tenía la tarea de quemar algunas más para añadir un poco más de problemas (de todos modos tenían exceso de aceite) para distraer a los enemigos de sus equipos.