"Vieron el coche aún estacionado en el lugar al que se le había rastreado, pero estaba cuidadosamente cubierto con hojas densas haciendo imposible notar que algo estaba escondido allí.
Si no fuera por el punto que seguía pitando en su computadora, no había forma de que alguien hubiera descubierto que algo tan grande estaba oculto allí.
Instruyó a sus hombres para que descubrieran el coche, pero tal como ya habían supuesto, no había nadie en él cuando lo revisaron.
—¿Dónde estás, Kathleen? —murmuró Shawn bajo su aliento mientras instruía a sus hombres para que se dispersaran en diferentes direcciones y no volvieran hasta que encontraran algo.
El equipo se movió con mayor urgencia, peinando cada rincón del área circundante.
Los ojos de Shawn se movían de un detalle a otro, sus instintos lo guiaban.
Continuó buscando, cada paso medido y deliberado, hasta que algo brillando débilmente en el suelo, parcialmente oculto por escombros, captó su atención.