—Dani no pudo evitar las lágrimas corriendo por su rostro en cuanto se encontró frente a su Reina. Se sentía avergonzada y con vergüenza por sus acciones, ya que estas reflejarían en su Reina. Después de todo, acababa de complicar las cosas, sin mencionar que aún no podía recordar qué fue exactamente lo que sucedió esa noche. ¿Cuándo se desmayó?
—Realmente no recuerdo lo que pasó anoche —sollozó Dani—. Estaba tan borracha en ese momento... Quiero decir, recuerdo que dije algo parecido a lo que mencionó el Canciller, pero todo lo demás es borroso para mí. No tengo una imagen completa de nada en absoluto.
—La Reina dejó escapar un murmullo resignado—. Cámbiate y come algo. Hablemos de todo esto después de que te hayas compuesto —Luego se volvió hacia Krisha y dijo:
— Ve y acompaña a Dani. Estoy segura de que agradecerá la ayuda.
—Krisha y Dani salieron juntas y se dirigieron a la alcoba de Dani donde los sirvientes ya habían preparado el desayuno para ella.
—Entonces...