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Qiao Nian bajó la mirada y abrió el mensaje.
Fue enviado a las 3:00 a. m.
Solo había una frase.
—Hermana Nian, ya estoy en casa.
Sorprendida, Qiao Nian alzó las cejas.
No había dado un ultimátum a la Familia Wei, por lo que no había manera de que Chen Yuan fuera liberado de la estación de policía por el momento.
Solo le pidió a Cai Gang que tuviera cuidado con él y buscara un doctor para tratar sus heridas.
En cuanto a la fianza de Chen Yuan…
Había planeado hablar con alguien hoy y no esperaba que Chen Yuan fuera liberado bajo fianza anoche.
Qiao Nian entrecerró los ojos e intentó averiguar quién lo había sacado de la estación de policía.
No podía pensar en otra persona con esa capacidad excepto Ye Wangchuan.
Además, solo le había contado a él sobre el incidente con Wei Qi anoche. Aparte de él, Qiao Nian no podía pensar en nadie más.