—Por eso debes enfocar toda tu energía en tu padre ahora, y lo mismo para ti, tío —Jeanne dirigió su mirada a Gary y dijo—. Tú estás a cargo de recuperarte. Mónica y yo te ayudaremos a resolver lo de Cardellini Pharmaceutical, ¿entendido?
Gary extendió su mano, que Jeanne sostuvo rápidamente.
Él había perdido tanto peso que Jeanne no pudo evitar apretar su agarre.
—Jeannie, me cuidaré mucho. Dejaré Cardellini Pharmaceutical en tus manos y en las de Mónica —dijo Gary solemnemente.
Para él, todavía no podía soltar el negocio familiar de los Cardellinis.
Aunque había estado tratando de convencerse de que no lo tomara demasiado en serio, aún así esperaba cuando había alguna esperanza.
—Está bien —Jeanne aceptó.
Gary sonrió y se mostró visiblemente mucho más tranquilo.
Después de todo, Jeanne había demostrado su capacidad antes. Con la ayuda de Jeanne, sería mucho más fácil para la Empresa Cardellini resurgir de entre los muertos.