—¿Qué pasa? —preguntó Nox—. Si hubiéramos podido hablar antes, me habría ido antes para no tener que verla.
—Nox, ¿te levantaste con el pie izquierdo hoy? —gritó furiosa Monica.
—Por suerte, lo hice, o el yo habitual te habría golpeado hasta la muerte.
—J*der. ¡Voy a pelear contigo! —Mónica estaba realmente furiosa hoy en día.
Jeanne agarró a Monica, quien estaba amenazando a Nox.
—Suficiente. Tú, ve al pequeño patio de al lado y toma un té mientras me esperas. Vendré a buscarte una vez que haya hablado con Nox.
Los ojos de Mónica estaban rojos. —Pensar que siempre he tratado a Nox como un amigo. ¿Qué pasa con él hoy? No ha parado de burlarse de mí.
—Nunca te he tratado como amigo. Finn es mi amigo. —Nox seguía tratando de provocar a Mónica.
—Nox, ¡termino mi amistad contigo ahora mismo! —gritó Mónica.
—Que así sea. No tengo miedo de ti.
—Ya es suficiente. —Jeanne arrastró a Mónica.