—¿O? —Repitió ella con un tono ligeramente atrevido y coqueto, pero Bryan ya no la estaba escuchando, su mirada estaba fija en sus labios, y sin decir otra palabra se inclinó hacia delante y cubrió sus labios con los suyos.
Sonia estaba ligeramente sorprendida, no sólo porque la había besado ya que esta no era la primera vez que se besaban, sino porque estaba sorprendida porque él lo inició esta vez, y ni siquiera era para el beneficio de nadie.
Intentó alejarse sólo para provocarlo, pero Bryan mantuvo su cabeza en su lugar con su mano detrás de su cabeza para que no pudiera alejarse de él. Después de resistirse sólo un breve momento, ella devolvió su beso, lentamente al principio, y luego se volvió ardiente.