—Es increíble cómo incluso dentro de un Espacio Sellado el elemento de oscuridad sigue filtrándose dentro de la prisión. Creo que...— La voz del hombre se desvaneció en la distancia y el grupo reanudó su avance.
Lith lamentó no haber escuchado nada relevante sobre el sistema de defensa de la habitación. Sin embargo, al escuchar la voz de Orpal y aprender cómo lo torturaban tanto física como psicológicamente todos los días, casi hizo que Lith cambiara de opinión acerca de matar a su hermano.
Casi.
Hizo una nota mental de la habitación con sus propios Ojos y le pidió a Solus que memorizara sus coordenadas dimensionales.
—No tenemos ninguna posibilidad de entrar sin ser rodeados.— Ella pensó. —Hay demasiadas personas aquí y, incluso con los Ojos, nos llevaría un tiempo abrir la puerta. Haré que Lith se sienta bien solo para mantenerlo tranquilo.—