Rex salió lentamente del coche, echando un vistazo al patio vacío a su alrededor. Apoyándose en el coche, miró la entrada principal y encendió un cigarrillo.
Al poco tiempo, el sonido de un motor de coche acercándose a toda velocidad llamó su atención. Observó cómo un coche negro se detenía lentamente y aparcaba detrás del suyo.
Inhalando su cigarrillo y dejando que el humo se esparciera en el aire, apareció su sonrisa, enmarcando su rostro tranquilo y guapo al ver a Xander salir del coche con una expresión tensa.
—Hombre, no tienes que preocuparte tanto… —Rex no pudo evitar comentar al ver a Xander caminar rápidamente hacia él, seguido por algunos hombres, uno de ellos siendo Alex Hill, el jefe de las fuerzas especiales del EquipoX.— Todo está bien adentro. ¡Ella está a salvo!
La expresión tensa de Xander se relajó poco a poco, y suspiró aliviado. —Voy a entrar —dijo, sin esperar la respuesta de Rex.