Mira como corres, apenas dabas tus primeros pasos hace unos meses, que nostalgia como pasa el tiempo, bien dicen que el tiempo vuela mi preciosa niña, mi muñequita humana cuanta falta me harán esos grandes ojos azules que me robaron el alma el día que naciste, no me arrepiento de haberle mentido a tu mami cuando le prometí que no más hijos, se que me odio por mucho tiempo pero cuando naciste me di cuenta cuanto me amaba porque tienes mis ojos, mi color y te pareces tanto a mi, amada hija si supieras que se me parte el alma al saber que no te veré crecer, no me abrazaras cuando me acueste, no me dirás papido quiero mimir contigo, no veré cuando saques tu sabanita para dormir conmigo en el suelo, buscando consolarme porque mamá Eufemia me hecho de la cama porque esta enojada, que dolor más grande siento en el pecho, mañana me voy espero que Dios le de la sabiduría y fortaleza a tu mamá para cuidar de ti mi pequeña Ester y de tus hermanos Jone y Denia, cuanto los amo pero no tengo otra opción.
Papido, papido, "PAPIDO", grito la pequeña Ester, cuando su amado papito no contestaba, que pasó mi bello ángel, que quiere mi bebita, mami dite que a mimir, hay mi niña si supieras.
Tomas a que horas piensa acostarse ya es noche y sabe que va a madrugar, si amor ya voy, contestó Tomas con una profunda tristeza.
Tomas ya descanse, trate de dormir, si amor en eso estoy, Eufemia nunca tomaba la iniciativa pero esa noche ella lo beso 💋 y le dijo cuanto lo amaba y Ester lo abrazo fuerte y sonrió como nunca lo había hecho.
Antes de dormir Tomas cerro los ojos y dijo en su mente "el beso más amargo que he recibido" porque pronto solo estarán en mi mente, lo bueno es que también recibí la sonrisa más dulce que cubre mi dolor.