Nora, que había guardado las hierbas medicinales en una bolsa de plástico negra, respondió despreocupadamente: —Son sólo algunas hierbas medicinales. Tengo la intención de tratar los ojos de la abuela.
Melissa se sorprendió un poco. —¿También eres experta en medicina tradicional?
Nora estaba a punto de responder cuando Sheena dijo: —Como si ella conociera la medicina tradicional. Probablemente, sea una pomada de venta libre que compró sin pensarlo mucho, ¿no? Tu abuela lleva más de veinte años ciega. Hemos acudido a muchos médicos, pero ninguno ha podido curarla. Será mejor que no pruebes indiscriminadamente con ella ese medicamento de origen desconocido. Tu abuela ya está muy avanzada en años. ¿Vas a asumir la responsabilidad si algo sale mal?
Su sarcasmo hizo que Nora frunciera el ceño.
Simon declaró: —¡Ya basta, Sheena! Nora es sólo una niña. ¿Por qué descargas tu ira en ella?
Inmediatamente, Sheena comenzó a discutir insistentemente con Simon.