Chapitre 71: 61
"Haaa."
Alexander suspiró mientras introducía su cuerpo semi-desnudo en el agua caliente.
Como estaba adaptado a hacer, retiró la toalla de la parte inferior de su cintura justo cuando se metía en el agua, y después de envolverla y doblarla un poco, la puso encima de su cabeza.
'Realmente... para tener baños termales en todo el Mundo...'
Alexander se sorprendía más y más, porque sabiendo que este Mundo estaba demasiado influenciado por la cultura japonesa, de manera cognitiva, la cultura "Otaku" japonesa, nunca en sus 21 años de vida en su Mundo normal, hubiera pensado que experimentaría algo así.
Por Dios, incluso le era ya bastante difícil sólo comprar un pasaje de avión a Japón, o tan si quiera como turista, era muy, extremadamente muy difícil para él.
Por eso, este tipo de cosas, sólo hacían que los sentimientos complicados de Alexander acerca de este Mundo, sólo fueran un poco más coloridos.
"Haaa."
Entonces suspiró de nuevo, ya que habían pasado unas horas desde que él y Maia, tuvieron el Duelo en el "Coliseo" de la parte lateral del Castillo.
...
Después de eso, las personas videntes y testigos de lo que pasó, tomaron en serio las palabras de su Señora, acerca de la fiabilidad de Alexander como Héroe, no sólo por sus habilidades de combate, sino porque al parecer incluso era un Mago, y uno fuerte, en eso.
Lo que resultó en que la ciudad entera se enterara rápidamente de esto, y aunque estuvieron exentos de una "Fiesta", o de algún festival, ciertamente los ánimos no eran de menos.
Todo transcurrió con normalidad, y para cuando Alexander, sus Esposas, Maia, Eleonora y algunas de las mujeres caballeras, incluído el pequeño grupo de las 10 guardias que Alexander había conocido anteriormente, se dirigieron al Castillo para dar cobijo a las Princesas Caballeros de otras Fortalezas y su nuevo y poderoso Héroe.
Por lo menos, hasta el día de mañana.
Para cuando Alexander llegó al Castillo, las guardias cercanas de Maia, ya habían terminado de arrestar y atrapar a los otros dos nobles, que trabajaban en conjunto con Bailer, y no sólo eso, sino que incluso sus Mansiones, habían sido arrasadas buscando todo tipo de evidencias de negocios turbios de cualquier tipo...
Tal vez fuera por lo que encontraron allí, que ellas mismas que habían arrestado a estos dos nobles, a personas que están por encima de ellas en la escala social, tenían semejante aura en el momento en que llegaron al Castillo.
Alexander, no pensó, no demoró, y no dudó, las cabezas de los dos nobles ya asustados al ver las miradas que se dirigían a ellos, rápidamente salieron desprendidas de sus cuerpos en un santiamén.
Nadie opinó absolutamente nada, sólo el hecho de que se habían demorado en hacerlo... tal vez, un poco demasiado.
"Pensar que... todo esto se llevaba a cabo justo en mi ciudad..."
Alexander todavía recordaba el tono sombrío en el que Maia hablaba, y de manera inóspita, repentina y natural, Alexander puso su mano sobre la cabeza de cabello rojo de Maia, mientras lentamente la acariciaba.
"Ya pasó, nunca pasara algo así de nuevo."
Pasaron unos minutos.
Después de una expresión de sorpresa, y para el desconcierto, y principalmente el celo de todos allí, Maia se sonrojó hasta que el color de su piel era el mismo que su cabello, y en unos segundos más, toda ruborizada...
"~HMnnhh~"
Ella gimió como una gata que se encontraba extremadamente satisfecha.
...
Y de hecho, nuestro Alexander, no tenía mucha idea y no pensaba mucho en estas cosas, es decir, él sólo acariciaba o daba palmaditas en la cabeza y ya, sus manos no distinguían de estatus social ni nada, pero él no recordaba...
O no tenía presente, que en los Animes... las chicas o las Waifus que tanto todos aman, se enamoraban de el MC de una forma tan estúpida pero a la vez especial, que lo hacían interesante, y de hecho... unas simples palmaditas en la cabeza... no eran algunos de los métodos más simples de los que se habían presentado en muchos Animes.
Y por supuesto, en un Hentai...
Pues...
Este tipo de cosas, tenía un efecto totalmente diferente...
Sorpresivamente, diferente, pero igual, y multiplicado algunas decenas de veces.
...
En fin, después de esa escena, y después de una profunda investigación, se coordinó que aparte de Bailer, y los otros dos nobles, nadie más estaba envuelto en lo que ellos si lo estaban.
Principalmente, debido a la gran vigilancia que incluso antes de este día, Maia mantenía sobre Bailer.
Pues si bien ella no servía absolutamente para nada en lo que a papeles se refiera, en el terreno era algo completamente distinto.
Ignorando algunas leyes por aquí y por allá, se decomisó todo tipo de artículos, propiedades, y demás, de Bailer, y los otros dos, y al final...
Maia puso una sonrisa extremadamente satisfecha en su rostro ya que de pronto, la Cuarta Fortaleza no tendría problemas económicos en un muy, muy largo tiempo.
Y para ella este día había sido genial, simplemente había sido uno de esos días especiales, como los días aquellos en que las personas ganaban la "Lotería" en los Estados unidos, un día cambia-vidas, sólo que...
Todavía su hermoso rostro se enfurruñaba un poco al recordar que perdió en el Duelo, poniendo un puchero lindo extremadamente extraño de haber visto en ella, para los que lo veían.
...
Kaguya, Alicia y Prim, acompañaron a las guardias que habían conocido, y a unas cuantas nuevas, a hablar de muchas temas sorprendentes y explosivos... o así parecía para las que escuchaban...
Y Alexander, como no tenía nada mejor que hacer, y como una idea que extrañamente una sonrojada Maia, había tenido, fue a darse un baño en el baño principal del Castillo, y aunque no faltaban las mujeres caballeros que querían ayudarlo, o incluso las Maid's del Castillo, o las Cocineras, o las de limpieza, o las que arreglaban las camas, y demás...
Él decidió irse sólo.
...
"Hmm, creo que debería crear otra habilidad del Anime, sólo que no me decido cual..."
Alexander habló un poco bajo, mientras se acomodaba en las paredes del baño, con la toalla encima de su cabeza, sin máscara, y completamente desnudo, con todos sus sentidos completamente recogidos mientras sólo trataba de pensar, y disfrutar de el agua no tan caliente, y acogedora, de un baño Japonés.
Alexander entonces, poniéndose en un estado similar a cuando meditaba solo, en el lago de Asora, sintió que podía dormir un rato.
Cerró sus ojos y sólo se concentró en descansar, por unos momentos.
Ya que aunque no lo necesitaba para nada, aún así, él era este tipo de persona.
.......
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