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Aun así, las pirañas solo eran fatales para los humanos y criaturas comunes. No era imposible para Zi y los concursantes derrotar la trampa de Hammond, pero hacerlo puede causar una conmoción y exponerse; siendo capturados por la vigilancia y alarmando inadvertidamente a la serpiente.
En ese momento, Sheyan se cortó bruscamente a sí mismo y permitió que su sangre fluyera. El aroma de su sangre rápidamente atrajo a la mayoría de las pirañas, mientras lo asediaban vehementemente en el agua. Sin embargo, su innata "Fortaleza" le permitió resistir cómodamente.
Procediendo desde allí y después de una ardua prueba, la pandilla de cuatro llegó ante la entrada del laboratorio secreto. Lo que los saludó fue un par de enormes puertas corredizas que eran tan sólidas como los búnkeres subterráneos. Además, las puertas estaban ocultas sin problemas, donde el cuarteto concursante solo lo descubrió después de una insoportable ronda de inspección.