En la última planta de Babel, en el Universo Atómico...
Toda la sala estaba llena de líneas plateadas, verdes y transparentes. Se extendían desde la pared, el suelo, el techo y el vacío, constituyendo un círculo mágico compacto y complejo.
El centro donde las líneas se reunieron mostraba unos fluidos rebosantes de una intensa vitalidad. Como el manantial de una fuente, fluyó e impregnó todos los altares alrededor.
Al observar el exuberante verdor en los altares, Lucien le sonrió a Natasha.
—El ritual de "Don de la Naturaleza" está listo.
—¿Por qué es diferente de lo que escuché de la Abuelita Hathaway? —Natasha observó a los integrantes del ritual legendario con gran interés.