En cuanto a la respuesta de las relaciones públicas, la empresa exigía a sus artistas que dominaran un hablar fluido e impecable en dar respuesta a las preguntas complicadas y duras de los reporteros durante las entrevistas.
Gu Xingze era un ejemplo vívido de ello.
No importaba cuán difícil fuera la pregunta, siempre daba una respuesta perfecta y trataba con facilidad a los implacables reporteros de los medios de comunicación.
Por otro lado, Tang Yu era un mal ejemplo de ello.
Su apariencia era bastante buena, y sus habilidades de actuación estaban bien, por su coeficiente intelectual y emocional eran muy bajos; hablaba sin pensarlo dos veces.
El resultado era algo conocido por todos; después de haber estado en el cielo, llegó hasta el fondo y con fuerza.