Viéndola fijamente, Hao Ren pensó"¿Qué no estabas ignorándome hace unos instantes?"
Sin embargo, no era de las personas que se aferran a un resentimiento. Se dio la vuelta tomando su llave magnética y dijo—: Vamos.
Zhao Yanzi se sintió aliviada en secreto ya que esperaba que Hao Ren la rechazará por completo. Como una forastera en un lugar extraño, tendría que comer sola. Si tan solo sus padres estuvieran cerca o su estómago no estuviese dándole voz a su insatisfacción, no habría venido a invitar a Hao Ren con tanto descaro.
Su ferocidad se había debilitado más aún al recordar como ella había ignorado intencionalmente a Hao Ren hace unos momentos y ahora tenía que rogarle que comiera con ella.