Montaña Rocosa estaba en completo silencio.
Esos que esperaban distanciarse claramente de la guerra ya se habían escondido lejos, observando desde afuera.
Hacía ya varios días, esta mujer llamada Tlorin había exigido que Montaña Rocosa entregara a Robin.
La razón era muy simple: poseía [Cielo Lloroso] y era, por ende, el enemigo natural de los Dragones. La raza Dragón no podía tolerar que semejante tesoro estuviera en poder de los Humanos.
Era una gran amenaza para ellos.
Esta mujer era la nueva Apóstol del Dios Dragón Negro. Siempre había tenido una actitud cuidadosa, así que no se expuso desde el inicio. En vez de eso, esparció rumores.
Se decía que cinco Dragones Negros vendrían de la guarida de Dragones Negros del norte para vengar a Clarke.