—Demonios, todavía me sorprendía porque después de cinco pisos de batalla, no hay signos de ningún jefe. Así que era Zhan Yu, ese mocoso que siempre está un paso por delante de nosotros —Humilde Caballero habló con furia, rechinando los dientes.
Su ira hacia Zhang Yang no era de hace uno o dos días, y ahora Zhang Yang lo volvió a engañar. Estaba a punto de prenderse fuego, ¡de la furia!
—Con razón los miembros de Solitario Humo del Desierto ya se desconectaron. Al parecer ya mandaron a unos cuantos por delante de nosotros —Humilde Caballero trató de provocar en los otros clanes el odio hacia Zhang Yang, pensando en Solitario Humo del Desierto destruido bajo la fuerza de tres clanes trabajando juntos.
Pero, Buscanieves sonrió gentilmente y dijo: —Los jefes de campo han sido para el primero que los vea, para todos nosotros. Todo depende de nuestras capacidades en llegar hasta ellos primero o no, así que, ¿a qué se debe toda esa ira, Humilde Caballero?