—Ha lugar.
Luego de que el juez dio su aprobación, el asistente de Zhang Shaochang le entregó un USB. Luego, él se lo entregó al jurado y el encargado lo conectó a la computadora, y puso el video en marcha. Demostraba la aterradora escena de esa noche.
Huo Mian sostenía Zhou Guangming de su cuello, mientras que con su otra mano sostenía un pedazo de la botella que había roto contra el cuello de este.
—Hermano mayor Zhou —dijeron los hombres y se dirigieron hacia Huo Mian.
—No se acerquen o él muere.
Huo Mian presionó aún más la botella contra el cuello de Zhou Guangming. El filoso vidrio de inmediato penetró su piel y el gimió de dolor.
—Mierda, esto duele. No se acerquen, aléjense.
Luego de esta pequeña escena, el video se detuvo.