La filmación iba de acuerdo a lo planeado, por fin… sin tantas complicaciones el humor del director estaba estable, y había armonía entre los miembros del staff, al ser la mayoría escenas de riesgo, era mucho seguro para todos que el ambiente estuviera tranquilo, y aunque en apariencia yo también lo estaba, extrañaba como loco a Elaine y a los niños, a lo largo del día había tenido que regañarme en varias ocasiones por tener la cabeza con ellos y no en el hecho de estar colgando en un acantilado.
Cuando por fin se dio el ultimo "corte" suspire cansado pero listo para hacer la video llamada que había estado esperando, regrese con calma al camper, y tras quitarme todo y ponerme cómodo mire el reloj, pasaba de la media noche, era muy probable que estuviera dormida.
Me quede mirando la pantalla del teléfono como un completo idiota durante casi quince minutos, por fin, me decidí a llamar, "¿por qué demonios actuó como un jovencito que llamara a su novio por primera vez?, es mi esposa…
El timbre sonó en dos ocasiones antes de que su voz saliera por mi auricular, mi corazón se detuvo por un momento, y sentí un golpe extraño en el estomago. Elaine me hacia sentir cosas que no había sentido antes y eso me encantaba.
—Buenas noches, esposo mío—saludo ella, haciéndome reír.
—Hola, esposa mía—respondí siguiéndole el juego.
Ambos nos quedamos callados por un par de segundos, escuchando la respiración del otro.
—¿Te desperté? —pregunte para romper con aquella atmosfera que aunque era algo singular impedía que escuchara su voz.
—No, estaba pensando en llamarte o mejor dejarte dormir, debes estar exhausto. ¿Cómo va la grabación?
—¿Por qué? ¿Tan pronto me extrañas?
Elaine soltó una risa melodiosa y suspiro.
—Sinceramente, si.
—Yo también te extraño, las grabaciones van bien, hoy grabamos casi cinco escenas extras, mañana debo confirmar con el director pero, creo que con eso se redujo uno o días del itinerario.
—Eso es… simplemente genial.
Note su voz cansada pero alegre, por lo que decidí no darle mayor importancia. Comenzamos a conversar acerca de los niños, de su día, del correo que envió a su firma… y yo, le conté sobre las hazañas que mi personaje hace en la trama y lo mucho que me esta gustando interpretarlo. Le conté también que ya teníamos una cita para la noche de estreno y que seguramente amaría la historia.
El tiempo corrió tan deprisa, mire el reloj y eran casi las cuatro, un pequeño ronquido fácilmente reconocible salió por el auricular, me reí y coloque el teléfono junto a mi almohada para dejarme llevar por mi propio cansancio. De esa forma Elaine durmió junto a mi como ambos hubiéramos deseado.
El despertador sonó cortando la llamada, eran las seis treinta y debía estar listo para iniciar la jornada, me levante y maldije al despertador en silencio, me prepare y antes de salir hacia la locación le envié un mensaje de buenos días a Elaine con besos para los niños.
De nueva cuenta iniciamos desde las escenas de acción y el tiempo paso corriendo, a la hora de la comida me preparaba para revisar si Elaine había respondido mi mensaje cuando la nueva mujer del comedor se acerco a mi con mi comida en las manos.
—Señor Evans, buenas tardes—saludo.
—Buenas tardes, gracias—dije al recibir el plato.
—Es un placer, disculpe mi atrevimiento, pero soy curiosa… la edad supongo. Pero, quisiera saber si la amiga de su esposa si recibió su buena noticia.
La mire impactado por la mención de dos palabras tan llamativas, amiga y esposa…
—Oh… lamento mi grosería, ayer fui a la farmacia a comprar medicamentos para el botiquín de la locación y por casualidad me encontré con su esposa en el establecimiento, iba acompañada por un hombre alto y moreno, la vi cuando compraba una prueba de embarazo y me tome el atrevimiento de desearle que tuvieran una bella noticia, pero ella me comento que era para una amiga que ha estado buscando quedar embarazada y como, mi esposo y yo pasamos por eso, me sentí identificada.
La notica me sorprendió tanto que no pude responder de inmediato.
—Si, ella me comento anoche sobre eso, pero aun no hemos recibido noticias, espero también que sean buenas.
La mujer se fue sin decir mucho mas, por mi parte deje el plato con comida sobre la mesa y tome mi celular de la funda donde Carter siempre lo colocaba. Habían mas de siete mensajes esperando por mi.
Los abrí ansioso, eran palabras de amor, un video de los niños y ella preparando galletas y uno de los tres durmiendo la siesta, supongo que fue tía Anneth quien tomo el ultimo.
Respondí los mensajes uno por uno enviando fotos con gestos graciosos y usando la locación como fondo. Una vez terminada esa tan importante labor, medite las palabras de la señora Perkins, vino a mi memoria las nauseas y la sensibilidad, el estomago me dio un vuelco. La emoción y el pánico se apoderaron de mi, un bebé, si era posible seria la noticia mas maravillosa, pero… como lo tomarían los niños, y ella… ambos habíamos acordado tratar de llevar las cosas mas despacio y disfrutar al máximo nuestra relación y de nuestros hijos. ¿qué pasaría si Elaine entraba en pánico?, ¿Por qué aun no me había comentado nada? Todas esas interrogantes saltaron en mi mente una tras otra.
Mi primer impulso fue llamarle por teléfono y comentarle acerca de la señora Perkins y su gen chismoso, pero los gritos del director echaron por la borda mis planes, mire mi plato de comida casi completamente lleno y me levante para seguir grabando.
Hice un esfuerzo sobrehumano para concentrarme al máximo a pesar de tener aquella sospecha. Cuando por fin las grabaciones terminaron mire el reloj y vi que era aun temprano, busque a Carter hasta encontrarlo conversando con uno de los chicos de utilería.
—Carter, lamento interrumpirte, pero… necesito ir a casa
El interpelado me miro extrañado por la seriedad de mi gesto, se puso de pie y tras despedirse del chico salió caminando junto conmigo hacia el estacionamiento de la locación.
—¿Esta todo bien? —pregunto mientras se abrochaba el cinturón.
—Si, solo necesito ver a Elaine. Estoy un poco intranquilo—respondí tratando de no dar demasiada información.
Carter frunció el ceño pero no dijo nada mas, se puso en marcha. Mientras tanto yo, hambriento y cansado no supe en que momento me quede perdidamente dormido en el asiento del auto.
Cuando llegamos, Carter me dio un golpe leve en el hombro para despertarme, me despabile en seguida y me baje del auto tan rápido que ni siquiera le di las gracias a Carter, entre en la casa buscándola por la sala pero el barullo venia de arriba, así que subí las escaleras sigilosamente, y camine por el pasillo hasta la puerta de la habitación de los niños, Elaine jugaba con ellos mientras los ayudaba a ponerse el pijama, la mirada tranquila y alegre de mis hijos me lleno de paz, mire por la apertura de la puerta hasta que ambos se recostaron e Elaine comenzó a leerles "Buenas noches, luna" espere pacientemente hasta que ambos niños se durmieron y ella les daba su beso de las buenas noches, antes de que saliera de la habitación me apresure a entrar a la nuestra y la espere sentado en la orilla de la cama. Escuche sus ligeros y suaves pasos acercarse mientras parecía teclear en su teléfono, temiendo que fuera a mi a quien le estuviera enviando un mensaje y el timbre de mi celular me descubriera lo metí bajo la almohada después de ponerlo en vibrador.
Elaine entro en la habitación pocos segundos después y pego un salto al verme de pie frente a ella. Al principio me dio un poco de risa su reacción pero después al aspirar su perfume, camine hacia ella. Elaine se me adelanto arrojándose a mis brazos y escondiendo su rostro en mi cuello.
—Lamento haberte asustado—dije mientras acomodaba un rebelde mechón de cabello detrás de su oreja. Ella sacudió la cabeza y me beso como si hubieran pasado siglos de la ultima vez que nuestros labios se tocaron. Respondí de inmediato estrechándola contra mi cuerpo.
—Me alegra tanto verte, solo ha sido un día y me has hecho mucha falta—dijo tras dejar mis labios un segundo, la mire y roce su nariz con la mía.
—A mi también me hacías mucha falta.
Caminamos hasta la cama y no sentamos, ambos nos veíamos tensos… ella en particular, tenia un semblante que no le había visto jamás. De pronto el silencio se apodero de la habitación.
Elaine me miro y se mordió el labio, parecía que intentaba decidir algo, finalmente sus ojos se llenaron de resolución.
—Derek… necesito decirte algo, y estoy aterrada de pensar que tal vez no sea lo que quieres.
Tome sus manos entre las mías, estaban frías, en verdad jamás la había visto tan asustada, ni siquiera aquella ocasión en la que fue amagada había tanto terror en su mirada.
—Sabes que puedes decirme lo que sea…
Ella tomo una gran bocanada de aire.
—Estoy embarazada—dijo con un suave hilo de voz grave —. Se que acordamos llevar las cosas mas despacio… y estoy asustada de la reacción de los niños, pero… ayer, cuando vi el resultado de la prueba, aunque al principio me desmorone, no he podido dejar de pensar en si será niño o niña… en como lo nombraremos… como jugara con sus hermanos y… me emocione, emocione tanto de saber que espero a nuestro bebé que todo lo demás comenzó a carecer de importancia.
La abrace pero esta vez con mayor delicadeza y bese su frente, le hable sobre la señora Perkins y su comentario, sobre mi primera reacción y el porque me había apresurado tanto para ir verla.
—Esto es bueno, cariño… jamás lo dudes, no hay nada en este mundo que pueda hacer que deje de amarte y saber que tendremos un nuevo miembro me emociona tanto como a ti. Las grabaciones van bien, incluso estamos adelantando tomas, de seguir así, quizá terminemos antes, volvamos a casa… y comencemos a planear la llegada de ese pequeño bebé.
—¿No te asusta lo que digan los niños? —pregunto seriamente.
—No, esos pequeños te adoran tanto o mas que tu a ellos, ¿que crees que dirán cuando sepan que tendrán a alguien mas con quien jugar?
Ella me miro como si de pronto esas palabras hubieran despejado una tormenta de dudas.
—Tienes razón, esperaremos a que termines tu grabación y una vez que volvamos a casa ire al medico. Pensé en ir aquí, pero podriamos despertar aun mas habladurías.
Asenti convencido de su idea y la ayude a quitarse la blusa para ponerse el pijama.
—¿Cuándo se lo diremos a los niños? —pregunto mientras me observaba abotonar la camisa de su pijama.
—En cuanto volvamos a casa, por el momento dejalos que te disfruten y disfrútalos a ellos.
Ella asintió y gateo hacia la parte de arriba de la cama, me rei por lo bajo al mirarla ser tan tierna e infantil.
Me recosté con ella para esperar a que se duermiera y cuando finalmente lo hizo, le di un beso en la comisura de los labios y sali de la habitación, Carter conversaba con Peter, me acerque a ambos para escuchar lo que conversaban. Peter habia tenido que ahuyentar a un par de paparazzi el dia anterior mientras Elaine compraba en la farmacia.
—Debemos volver a la locación—dije en dirección a Carter, el interpelado asintió y se apresuro a ir por el auto. Una vez que lo observe alejarse lo suficiente me acerque a Peter —. Necesito que sean mas cuidadosos con Elaine y mis hijos—susurre—. Ella no puede tener ningun tipo de contratiempo con nadie, cuídenla mucho y no permitan que nadie se acerque ni a ella ni a los niños.
Peter asintió con convicción.
—Por supuesto, señor.
Carter y yo volvimos a la locación a tiempo para poder dormir un par de horas antes de iniciar con las grabaciones de nuevo.
Tras una semana larga y agotadora el director dio por terminadas las grabaciones, el equipo comenzaría a limpiar el área después del banquete de despedida, por fin, después de mas de diez días, podría estar con Elaine y los niños mas de un par de horas.
Me apresure a volver a la casa para preparar todo, Elaine arreglaba a los niños cuando llegue, se veían espectaculares en su pequeño traje azul y vestido rosa. Ella había elegido algo un poco mas recatado y suelto, algo bueno tomando en cuenta que su pequeño vientre comenzaba a verse algo abultado. Seria imperceptible para los demás, pero para mi era sumamente claro.
—Se ven muy bien—dije mientras entraba a la habitación, Cassie fue la primera en correr hacia mi para darme un abrazo, seguida de cerca por Adrien, Elaine observo la escena con alegría y les dio espacio a los niños para saludarme antes de acercarse ella. Una vez los niños estuvieron satisfechos de mimos, Elaine camino lentamente hacia mi y me abrazo con fuerza, su calidez me hizo sentirme seguro y vivo.
—Tu ropa esta en el cuarto de baño y ya esta preparada la tina, date prisa… terminare de preparar a los niños y de maquillarme.
Asentí como un niño mimado y camine hacia el cuarto de baño. Para cuando termine de prepararme los niños miraban televisión mientras Elaine terminaba de arreglar el cabello de su tía.
—Lamento haberlos echo esperar—dije mientras terminaba de colocar los gemelos en su lugar. Elaine y su tía me miraron como si fuera otra persona, y los niños se rieron por su reacción, tome aquella mirada llena de sorpresa de Elaine como un cumplido y camine hacia ellas —. Muy bien, la limosina esta afuera, vamos—Los niños se pusieron de pie, tía Anneth les dio la mano para salir junto con ellos. Elaine paso su brazo por el mío y comenzó a caminar a mi lado, era nuestra primera salía como marido y mujer, y parecía estar tan nerviosa como yo.
—Tranquila—susurre para calmarla, ella me miro desconcertada por mis palabras así que le sonreí—. Yo también estoy nervioso, pero no tenemos nada que temer, no le debemos explicaciones de nada a nadie, es nuestra vida y a nadie le afecta, te amo, me amas, somos felices… —me acerque a ella para que mis labios rozaran levemente su oreja derecha— El sexo es maravilloso.—Elaine soltó una carcajada y pareció relajarse.
—Tienes razón, que se pudra el mundo. —Ahora era yo quien reía al escucharla expresarse así. —Por cierto, señor Evans, esta noche podremos realizar una encuesta de calidad respecto a su comentario anterior. — Sus ojos brillaron con picardía.
Subimos a la limosina y tras acomodarnos esta se puso en marcha. El banquete seria en una de las playas privadas del resort propiedad de uno de los productores. Al llegar la fila de reporteros parecía no tener fin, al principio me sorprendí, se suponía que solo unos cuantos sabían sobre el evento y el sitio en el que se llevaría acabo; sin embargo, parecía mas una alfombra roja de estreno que el banquete por terminación de grabaciones.
La limosina se detuvo frente a la puerta principal, primero bajaron Peter y Chris, el chofer de la limosina se preparo a abrir la puertezuela, Elaine y yo intercambiamos miradas una ultima vez antes de que yo bajara primero, ayude a los niños y tía Anneth, ellos comenzaron a caminar primero hacia la entrada en compañía de Chris. Le ofrecí la mano a Elaine para ayudarla a bajar de limosina, los flashes no se hicieron esperar, en cuanto ella estuvo de pie junto a mi, los reporteros intentaban acercarse a nosotros lo mas posible para hacernos preguntas. Comencé a sonreír y saludarlos como si fueron un publico cualquiera, Elaine se detenía conmigo cada vez que algún reportero colocaba su micrófono frente a mi cara, bombardeando con preguntas, Peter estaba realmente atento de evitar a toda costa que eso mismo ocurriera con Elaine por lo que estaba tranquilo.
Finalmente, pudimos llegar a la entrada, el recibidor del resort era enorme y brillante, elegante y sofisticado. Caminamos hacia el gran salón con los niños caminando frente a nosotros, mirando a su alrededor con los ojos abiertos. El director de la película salió a recibirnos a la entrada. Me miro primero a mi y después de a Elaine.
—Derek, me alegra que llegaras, todo el mundo esta impaciente por verte.
Sonreí y tras tomar la cintura de Elaine entone con voz fuerte y segura.
—Mike, permíteme presentarte a mi esposa, Elaine…
Tal y como imagine el salón pareció quedarse en completo silencio al escuchar aquella declaración. Mike sonrió y extendió su mano para saludar a Elaine de forma apropiada.
—Michel Rebalov—dijo en tono suave —Es un placer conocerla al fin, señora Evans.
—El placer es completamente mío, muchas gracias por tener paciencia, y permitirnos arreglar nuestros inconvenientes.
Mire a Elaine por el rabillo del ojo, siempre supe, desde el primer momento en que la vi, que era una mujer segura de si misma y sin miedo, pero… escucharla hablar con tal seguridad y naturalidad hizo que me corazón diera un brinco, con solo ese destello, me volví a enamorar de ella.
—Querida, no necesitas agradecerme, Derek ha sido mi protagonista por largo tiempo, y jamás lo vi mirar a nadie como te mira, y tampoco estar dispuesto a dejar el pellejo en el set con tal de volver rápido a casa, solo había visto hacerlo por sus hijos… así que, me alegro que todo este marchando bien y les deseo la felicidad que ambos merecen.
Tras decir aquello Mike nos guió entre el gentío hasta nuestra mesa, y tras dejarnos en ella se retiro para continuar recibiendo invitados, tras ayudar a los niños a sentarse y ordenar bebidas para todos, comencé a relajarme, supongo que en el fondo estaba nervioso por el recibimiento que Elaine tendría; después de todo, habíamos estado en el ojo del huracán hacia muy pocos días.
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