—Sé lo que me preguntarás a continuación, cómo demostrar todo esto. Y la respuesta es simple, no puedo —a diferencia de lo que el cuarto anciano esperaba, William negó con la cabeza sin dar ninguna explicación.
—Esto… ¡No me digas que es solo una teoría tuya! —En ese momento, el cuarto anciano tuvo la sensación de que había sido engañado. Y eso lo hizo sentirse un poco enojado por dentro, liberando otra tormenta de su asfixiante presión de poder del espíritu.