Leyenda olvidada de la Flor Ensangrentada

Autor: Sorahana

Capítulo 1: La chica fría

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La temperatura era fría y estaba nevando. En la remota área montañosa, casi nadie querría vivir. No obstante, era precisamente en este lugar que una magnífica zona de edificios se erigía.

Aun así, se podía ver a una chica adolescente de unos 17 a 18 años caminando con ropa delgada. Sus pasos parecían lentos pero al mismo tiempo rápidos. Atándose el cabello para formar una cola de caballo, uno no la consideraría diferente de una chica de escuela secundaria ordinaria que podría encontrarse en cualquier lugar.

Sin embargo, su expresión indiferente y plácida hacía que su hermosa expresión pareciera la de una princesa de hielo.

La chica se detuvo frente a una puerta. Miró a los dos guardias frente a ella con sus oscuros ojos de obsidiana.

—Señorita Hua, ¿ha venido a ver al doctor Zhang? —preguntó el primer guardia con una sonrisa.

Hua no era su verdadero nombre. De hecho, ni siquiera sabía cuál era su verdadero nombre ya que este era el apodo que se le había dado después de que esas personas vieran su resultado en el entrenamiento. Junto con su bella apariencia, sí parecía una joven flor en pleno florecimiento.

Levantando la cabeza, Hua asintió con calma.

—El doctor Zhang está adentro —el segundo guardia ya había abierto la puerta y permitió pasar a la señorita Hua. No se atrevía a ser negligente frente a ella ya que sabía que incluso el más mínimo error podría costarle la vida.

Hua ni siquiera prestó atención a los dos. Cuando la puerta se abrió, entró con calma. Su actitud parecía como si no pudiera ver que el lugar hacia donde se dirigía estaba perfectamente custodiado y que nadie podría acercarse.

El primer guardia miró al segundo guardia y arqueó las cejas —la señorita Hua siempre se ha comportado bien. ¿Por qué pareces tan asustado, ah?

—Tsk, eso es porque no conoces su verdadero pasado —el segundo guardia tiritó al recordar la mirada de Hua en el video antes de venir aquí. Chasqueó la lengua —si te atreves a ofenderla, no podrías saber cómo morirías.

—¿De qué estás hablando? Aquí no hay armas. El ejército ya ha eliminado todos los materiales que posiblemente podrían usarse para matar gente —el primer guardia estaba atónito.

El segundo guardia resopló pero se negó a decir algo más. ¿Sin armas? Bah, una asesina de verdad podría matar incluso sin esas cositas. Su propio cuerpo ya era un arma.

Mientras los dos guardias hablaban, Hua naturalmente no prestaba atención ya que había entrado en un gran edificio cilíndrico. No había guardias cerca como si fuera un lugar abandonado, pero ¿cómo es posible que no hubiera nadie que la observara y monitoreara? Eso sería una completa broma.

El primer piso estaba vacío y Hua caminó directamente hacia el segundo piso. En el momento en que empujó la puerta, pudo escuchar el sonido de gritos desde dentro.

—¡Por Dios! No puedo creer que Long Qian Xing haya caído en coma sólo por ese pequeño incidente! ¿Qué demonios pasa con ese lugar de mierda?! —Hua miró hacia el frente y vio a un hombre de mediana edad gritando a la televisión ante él. Se veía terriblemente molesto y no parecía darse cuenta de que ella estaba allí. Sólo cuando se dio la vuelta después de maldecir por algo más de tiempo se dio cuenta de su presencia.

—¡Ah, estás aquí, Hua! ¿Por qué no me avisaste que vendrías? —mirando al hombre de mediana edad, Hua no dio ninguna reacción.

—Has sido notificado —su voz era calmada e indiferente como si simplemente estuviera comentando que el clima estaba agradable. El hombre de mediana edad, el doctor Zhang, suspiró pero no refutó. Nunca podía adivinar cómo ella siempre lograba saber aunque él nunca filtrara nada.

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—Está bien, estaba demasiado absorto viendo esto... —dijo el doctor Zhang señalando la televisión.

Hua podía ver la televisión desde el rincón de su ojo pero no prestó especial atención a ello. Estaban reportando noticias sobre alguien que había resultado herido debido a un asunto peculiar y el doctor Zhang le estaba prestando atención.

Sentándose, el doctor Zhang miró a Hua con expresión peculiar. Siempre había tenido curiosidad por su reacción ya que no se había criado en un ambiente normal, sino en uno lleno de peligros desde que era joven. Sin embargo... terminó siendo una chica tan indiferente.

—¿Por qué viniste hoy? ¿Es que me extrañas? —preguntó el doctor Zhang.

—Hoy es domingo.

Al doctor Zhang le dieron ganas de tocarse la frente ante su respuesta directa. Su tarea era venir a informarle cada domingo pero esto lo hacía todo muy formal. Esta chica de 17 años... era realmente...

—¿Hay algún nuevo progreso? ¿Qué opinas de este lugar? —preguntó el doctor Zhang.

Hua parpadeó sus ojos. —Hay 87 personas que están observando mis movimientos. 40 están mirando a través de la cámara de seguridad, el resto observa directamente, 32 de ellos son francotiradores que están apuntando con su arma hacia varios puntos de mi cuerpo. Y luego...

—¡Para! ¡Para! —el doctor Zhang siempre se quedaba sin palabras. Si la dejaba continuar, ella convertiría esto en un informe militar. Pero en primer lugar... ¿cómo sabía ella cuántas personas la estaban observando a través de la cámara de seguridad, ah? ¡No es que fuera un robot!¡Era un ser humano!

Oh espera... en efecto hay 40 cámaras de seguridad que estaban apuntando de esta manera en este momento, así que quizás se refería a eso.

—Lo que estoy preguntando es sobre tus sentimientos —dijo ella.

Hua se mostró excepcionalmente tranquila y simplemente miró al doctor Zhang sin ninguna expresión. —No siento nada.

—¿Todavía...? —El doctor Zhang se quedó sin palabras.

Por supuesto, Hua no le respondió.

En este punto, el doctor Zhang se sentía tan impotente que deseaba golpear la mesa. De todos los pacientes que atendía, este caso era sin duda el más complicado porque no estaban encargados de obtener información de ella ni nada por el estilo.La orden era averiguar la manera de disipar la mentalidad que ya había sido implantada en ella por la organización.Una de ellas era pedirle que viviera pacíficamente aquí para que no volviera a caer en la mentalidad de campo de batalla caótico otra vez.

Pero...¿Cómo se supone que deben hacerla bajar la guardia si esos soldados siguen estando en guardia contra ella?

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